Katir sí habla cuando gana (en series) y se agarra al 'espíritu Alcaraz': "Cabeza, corazón y cojones"

Budapest-. Mohamed Katir se marchaba el pasado domingo sin hablar de la zona mixta después de caer eliminado en las semifinales del 1.500 cuando era uno de los grandes favoritos al oro. No quiso atender a la prensa y decidió marcharse al hotel ante la incredulidad de todos los que le vieron pasar de largo. Hoy, en las series del 5.000, se ha resarcido con una victoria mostrando poderío y sí se ha parado ante la prensa española acreditada en Budapest.

"Imagínate que estás cuatro meses fuera de casa preparando esto y no te salen las cosas, pues es normal que no quieras hablar con nadie... pero en un día vuelvo a ser yo", ha intentado explicar ante los periodistas. "Yo sé perder y sé ganar", ha querido matizar ante la pregunta de si se ha podido recuperar del duro golpe del 'milqui'.

"Yo venía mentalizado: no solo tengo que entrenar mi cuerpo, también entreno la mente que es el motor de nuestro cuerpo", cuenta el murciano sobre cómo ha pasado estos días y ha querido cerrar el asunto: "No puedo meterme en una máquina del tiempo y volver atrás a solventar mi error. No soy un atleta perfecto, si lo fuera sería brutal".

Ahora, solo mira hacia adelante y ya piensa en la final [domingo, a las 20:20h.] y para ello se ha acordado de su paisano Carlos Alcaraz: "Como dice el mejor tenista, que es de mis tierras: cabeza, corazón y cojones". En un aviso a los grandes nombres con los que se verá en la lucha por las medallas como el noruego Jakob Ingebrigtsen y toda la armada africana, se ha marchado de la zona de prensa con un mensaje: "Vamos con todo el domingo".