ATLETISMO

Ndikumwenayo y un triunfo que vale un triplete en las grandes citas de cross

El atleta de origen burundés, pero nacionalizado español, logra la corona de laurel en Itálica. Su triunfo devuelve a España a lo más alto del podio 39 años después.

Ndikumwenayo, tras cruzar la meta de Itálica como primero. /EFE
Ndikumwenayo, tras cruzar la meta de Itálica como primero. EFE
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Han pasado casi cuatro décadas de la última vez que España coronó las ruinas romanas de Santiponce. Fue en el año 1983 cuando el himno nacional sonó por última vez en la entrega de trofeos del Cross de Itálica. En aquella cita fue el onubense Juan Barón quien, tras recoger el testigo de José Alonso, se subía a lo más alto del podio. Hasta la fecha, solo estos dos atletas -en 1982 y 1983, primera y segunda edición de esta carrera- habían logrado teñir de rojigualdo una prueba que, con los años, ha acabado convirtiéndose en referente mundial de la especialidad del campo a través. Hasta hoy. 39 años después, España ha vuelto a lograr la corona de laurel gracias a Thierry Ndikumwenayo, un atleta que solo lleva 11 días siendo, oficialmente, ciudadano español.

El triunfo de Ndikumwenayo en Itálica tiene dos particularidades. La primera, el haber roto la sequía nacional en esta prueba ocho lustros después. La segunda, el triplete de victorias en cross de este atleta en solo un mes, un hecho inédito para cualquier atleta... aunque no todos han sido triunfos españoles. Vamos a explicarlo.

Un triplete inédito con distinta nacionalidad

El atleta de Playas de Castellón es de origen burundés. Llegó a España en el año 2016 y tras cuatro años en Alicante, se mudó a Castellón en 2020 donde reside becado por la Diputación. Ya entonces se había convertido en una gran promesa del atletismo nacional. Solo había un problema: no era español. Durante años, Ndikumwenayo trató de lograr la nacionalidad, algo que se complicó -incluso estuvo un tiempo como "alegal" y no podía abandonar España-, pero que el pasado 9 de noviembre finalmente se hizo realidad.

Cosas de la casuística o la casualidad, llámalo como quieras, esta oficialidad llegó en mitad de un mes donde el cross celebraba tres citas importantes: Soria, Atapuerca e Itálica. Y las tres tuvo el mismo campeón: Ndikumwenayo. Sin embargo, solo en dos de ellas el triunfo contó como español. Y es que la victoria en Soria fue solo unos días antes de que el atleta lograse la nacionalidad. Por tanto, esta no computa en la vitrina española como tal.

El hito en Itálica

Ndikumwenayo estaba en su mejor momento de forma. Lo que antes era una "promesa" para el atletismo español, ahora ya era una realidad. Y así lo volvió a demostrar este domingo. Adel Mechaal arrancó la prueba como líder, pero los atletas africanos apretaron y se situaron en cabeza. Sin embargo, a los diez minutos de recorrido, el atleta de origen burundés lanzó su primer ataque. A él respondió Mohamed Katir, que mostró mejor versión que hace una semana en Atapuerca y finalizó la carrera en sexta posición. Pero el verdadero duelo estuvo entre Ndikumwenayo y Rodrigue Kwizera.

Este atleta de Burundi y amigo y compañero de entrenamiento del ya corredor español del Platas de Castellón, mantuvo en vilo el desenlace de la carrera hasta el final. Si bien, el gran estado físico y mental que tiene actualmente Ndikumwenayo fue determinante. Antes de la última curva lo adelantó. Mantuvo un primer puesto que le dio la corona de laurel tras culminar los 10.092 metros de recorrido en 28:51. Y así, hizo que España volviese a lo más alto del podio 39 años después.

En busca del permiso de World Athletics para ser seleccionable

Con el papeleo de la nacionalización ya zanjado, ahora Thierry Ndikumwenayo lo que aguarda es el okey de la World Athletics para así poder formar parte de la selección nacional de atletismo. ¿Su objetivo? Poder representar a España en el Europeo y, si no, en el Mundial. Y es que el de cross está fijado para el mes de febrero del próximo 2023 en Australia, mientras que también querría defender los colores nacionales en los Mundiales de Budapest de agosto de 2023, ya que el mediofondo y el fondo también son modalidades que domina. Si no, basta con ver su actuación en los 5.000 metros de la Diamond League de Mónaco o el sello que dejó en los 3.000 al lograr le mejor marca mundial del año con 7:25.93.

Tras ello, como no puede ser de otro modo, los Juegos Olímpicos de París 2024 también están dentro de un horizonte que, de continuar con el estado mostrado hasta ahora, de seguro le traerá más éxitos por el camino.