A vueltas con las sanciones por insulto en el baloncesto y un endurecimiento que provoca críticas

El DM Group Mollet ha denunciado a través de un comunicado que consideran "desproporcionada" la sanción que su jugador Carles Marzo recibió en el partido disputado contra el Juventut de Badalona B. En concreto, el baloncestista se perderá 6 partidos que hacen que no pueda estar disponible para la fase de ascenso a LEB Plata.

El motivo de la sanción habría sido un insulto de Marzo a un jugador del otro equipo. A falta de un segundo para terminar el partido, Carles Marzo se dirigió a un rival diciéndole "puto niñato de mierda", según el acta del encuentro. Una infracción calificada como grave por el Comité de Competición y ratificado por el Comité de Apelación.

El conjunto catalán matiza que su jugador no utiliza la palabra "puto", sino que la frase fue "calla niñato de mierda", considerando que es un cambio determinante para la reducción de la sanción. Aunque no existen imágenes que puedan probar el argumento del club y al recurrir no han tenido éxito.

El reglamento se ha visto endurecido precisamente para castigar a quienes sobrepasen unos límites a la hora de dirigirse con insultos a árbitros, rivales o cualquier persona que se encuentre en un partido de baloncesto. Carlos Peruga, responsable del área arbitral, ha atendido a Relevo y ha asegurado que el trabajo de los árbitros es el de cumplir con el reglamento, sea el que sea, y, en este caso, limpiar el baloncesto de insultos.

Es la segunda sanción de Carles Marzo esta temporada por motivos similares. A comienzos del curso, insultó a un árbitro y le castigaron con 5 partidos. Además, otros jugadores han sufrido sanciones del mismo calibre. Michael Carrera fue multado y castigado con 7 partidos en el Movistar Estudiantes por encararse con los árbitros que consideraron que una canasta entró fuera de tiempo, pero se le rebajó la pena finalmente a 5 encuentros. Devin Schmidt, jugador del Real Valladolid Baloncesto, fue sancionado con otros 7 encuentros, ya que se dirigió a un rival con "insultos graves reiteradamente", pero también se le redujo la sanción a 5. A Sergio Llorente, del Club Ourense Baloncesto, le cayeron otros 7 partidos por "dirigirse al árbitro auxiliar 2 con un insulto de carácter grave".

En cualquier caso, tras estos hechos, el CB Mollet invita a la reflexión, ya que describen estas sanciones como "abusivas". "Desde el club denunciamos esta situación en las redes dada la indefensión en la que nos encontramos. Aun dudando de la veracidad del contenido del informe arbitral, sostenemos que en ningún caso el hecho reflejado puede considerarse como insulto grave. Los clubs cumplimos con unas exigentes bases de competición en las que el producto que recibimos a cambio deja mucho que desear en las categorías FEB", concluye el club en su comunicado.