CAPÍTULO 1

Biriukov y Arlauckas, dos leyendas del madridismo, descifran a Obradovic: "En el partido estaba como una cabra; dentro de las cuatro líneas de la cancha es un hijo de p***"

El Madrid se juega los playoffs frente al Partizan del técnico que les llevó a conquistar su primera Euroliga. Dos de sus jugadores entonces analizan al técnico en la primera parte de esta tertulia.

Chechu Biriukov y Joe Arlauckas posan tras la tertulia en Relevo./A. Corral | S. Fenoll
Chechu Biriukov y Joe Arlauckas posan tras la tertulia en Relevo. A. Corral | S. Fenoll
Guillermo García
Salvador Fenoll
Álex Corral

Guillermo García, Salvador Fenoll y Álex Corral

El 13 de abril de 1995 el Real Madrid de baloncesto ponía punto y final a 15 años de sequía en la máxima competición continental. De la mano de Zeljko Obradovic, el mismo entrenador que les había eliminado la temporada anterior con el Joventut, los blancos conquistaban su octavo cetro europeo y estrenaban su palmarés bajo la denominación de Euroliga.

Una competición que luego ha levantado en otras tres ocasiones y en la que esta temporada, tras una marcha irregular, todavía puede clasificarse directamente para los playoffs. Y para ello sólo tiene una tarea por delante: ganar hoy (20:30 horas) en Belgrado al Partizan de… Zeljko Obradovic. El técnico más laureado de la competición vuelve a cruzarse en el camino de los blancos, a los que llevó a recuperar la gloria en Zaragoza, hace 30 años.

Y quién mejor que dos miembros de aquel equipo para descifrar al genio de Cacak. Son Chechu Biriukov (Moscú, 1963) y Joe Arlauckas (Rochester, 1965), dos de los jugadores más carismáticos que han vestido la camiseta del Real Madrid y que coincidieron durante dos temporadas en el vestuario blanco. Lo hacen en esta primera parte de una tertulia en la que los dos exjugadores comparten anécdotas, risas y recuerdos de su etapa en la cancha. Y como siempre, sin pelos en la lengua.

Biriukov y Arlauckas recuerdan la figura de Zeljko Obradovic.A. Corral | S. Fenoll

"Hay veces que hay que tener cuidado con lo que pides", recuerda entre risas Joe Arlauckas sobre la llegada del serbio tras una temporada entrenando a las órdenes de Clifford Luyk. "Porque cuando llegó la temporada dije, 'este tío está loco, este, chaval, está loco'. Ahí era cuando te decía, 'Capitán, haz tu trabajo'".

Biriukov recoge el guante y rompe una lanza a favor de la figura de Obradovic entre risas. "Bueno, era bastante sensato. Por ejemplo, cuando decías que querías ir a cenar con amigos, porque normalmente cenábamos con el equipo, se lo pedías y no había ningún problema. Pero estaba loco. Bueno, lo sigue estando. En el partido estaba como una cabra, siempre se está poniendo rojo", recuerda el jugador español sobre el último entrenador que tuvo en su carrera deportiva.

Es en ese momento de la tertulia, a carcajada limpia, cuando Arlauckas pide permiso: "¿Se puede decir esto? Entre las cuatro líneas del campo era un hijo de puta". Una afirmación que provoca una nueva risotada, antes de que el estadounidense aclare que no habla de Obradovic como persona. "Era muy duro. Daba igual que Sabonis, Arlauckas, Biriukov… . Pero como dices, cuando sonaba el final del entrenamiento e ibas andando a la ducha, era una persona totalmente diferente. Era alguien que te entendía".

Los dos exjugadores del Real Madrid recuerdan los entrenamientos con Obradovic.A. Corral | S. Fenoll

El pasado de Obradovic como jugador facilitaba ese trato con su plantilla, a pesar de la dureza de los entrenamientos. "Era un tío que te entendía perfectamente porque también había sido jugador. Su mentalidad era 'tú haz lo que quieras, pero cuando llegas aquí me das 200%". Y me parece muy justo. Yo siempre cuento la historia de cuando llegó, que me dijo, '¿tú crees que eres buen jugador?' Y yo le miré como, 'claro que sí'. Y me dijo 'bueno, pues conmigo vas a mejorar'".

Es en ese momento cuando la charla entre estos dos mitos se traslada a la cancha y, siempre entre risas, rememoran cómo eran los entrenamientos de aquel Real Madrid. "Boom, boom, boom. Todos los días entrenando me ponía a Martín Ferrer, ¿te acuerdas de él? Y yo le decía: 'Martín, por favor, hoy no, que llego aquí harto de mi mujer, de mis hijos y llego para tener paz'. Y el me decía que no, que como no me diera…", cuenta Arlauckas. "Además nos dábamos hostias como panes", apunta Biriukov.

El internacional español cuenta cómo eran esos entrenamientos y los compara con los de hoy en día. "Eran dos veces al día. Ahora yo no sé si tienen tiempo para entrenar tanto. Eran durísimos". "Eran con Paco López en la Casa de Campo y en el INEF", recalca un Arlauckas que cambia el gesto al recordar aquellas físicas sesiones. "En el fondo eran un descanso porque no estaba Zeljko".

"Todos los días entrenando me ponía a Martín Ferrer. Y yo le decía: 'Martín, por favor, hoy no, que llego aquí harto de mi mujer, de mis hijos y llego para tener paz'. Y él me decía que no, que como no me diera…"

JOE ARLAUCKAS

De esa exigencia nació una temporada para el recuerdo para el madridismo. Un curso irregular en la ACB, pero que quedó marcado por la consecución de la octava Copa de Europa del Real Madrid. Un logro que terminó de abrochar la leyenda europea de Sabonis y consagró a Obradovic, hoy rival de los blancos, como uno de los mejores entrenadores de la historia de la Euroliga. Pero eso ya será otra historia para la que tendrán que esperar a la segunda parte de esta tertulia.