EUROLIGA | REAL MADRID - BAYERN DE MÚNICH

El legado de Pablo Laso en el Real Madrid: "Algunos jugadores me llaman cuando tienen un problema personal"

El ahora entrenador del Bayern y Serge Ibaka hablan de lo especial que es el partido ante su exequipo.

Pablo Laso aplaude durante un partido con el Bayern. /GETTY IMAGES
Pablo Laso aplaude durante un partido con el Bayern. GETTY IMAGES
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Si algo ha quedado totalmente claro es que el de este jueves en el WiZink Center va a ser un partido lleno de sensaciones. Tanto en el Real Madrid como en el Bayern de Múnich. Porque si por un lado, Chus Mateo se desenvolvía en elogios hacia el que fue su compañero (y antecesor) en el banquillo blanco, o el propio Sergio Llull dedica un tuit al que bien se puede decir que fue su mentor durante una década, el sentimiento también es mutuo por la otra parte. A Pablo Laso le sale sola la sonrisa al hablar del "cúmulo de sensaciones" que será este partido de Euroliga entre ambos. El primero ante su club de toda la vida -como jugador y entrenador- tras tantos años.

Pablo Laso le desea lo mejor a Chus Mateo y al Real Madrid. NOELIA GÓMEZ MIRA/RELEVO

"Esa sensación de que vas a saludar a mucha gente. A algunos de aquí os veía todos los días y estoy encantado de veros y de ver que estáis bien. Yo también lo estoy. Mañana veré a mucha gente y me pasará lo mismo. Veré a mucha gente con la que he tenido muy buena relación durante mucho tiempo, pero creo que cuando empieza el partido te olvidas un poco de todo eso. Tengo muchos mensajes de gente que va a venir al partido, otros que dicen que lo sienten porque no pueden venir… Eso es lo que más te enorgullece, que la gente se acuerde de ti. Sin pensarlo mucho, es inevitable. Es un partido hasta cierto punto especial, pero cuando ya empieza te centras en lo tuyo", explicaba el ahora técnico del Bayern de Múnich, desde el hotel de concentración en la capital española.

Lo cierto es que, entre esos mensajes, también hay alguno de los que fueron sus jugadores. El propio Llull lo hizo público a través de un tuit (o post en X, mejor dicho) del que, por cierto, Laso tuvo conciencia a través de su hijo Axel y dejó la anécdota de la previa. Porque, eso sí, a él lo que es el resultado le da igual, porque el objetivo es que una vez acaba el partido, su padre le consiga la camiseta de Sergio Llull.

Y si este, por ejemplo, fue a través de las redes, otros lo hicieron por privado. Porque, como explicaba Laso, la relación con muchos de ellos es (y fue) más que la de entrenador-jugador.

"Con algunos de ellos mantengo contacto. Con muchos de ellos. Para mí, más allá del baloncesto, si tienen algún problema saben que pueden llamarme. Yo, por mi forma de ver entrenador-jugador, siempre les digo que estoy ahí para lo que necesiten. Y algunos de ellos me llaman, me mandan un mensaje cuando tienen un problema personal, cuando se alegran de que he ganado o yo les mando para animarles porque les veo bien o mal. Al final esa relación va más allá del entrenador-jugador. Creo que para sacar lo mejor de las personas tienes que ser capaz de estar ahí no sólo en los buenos momentos sino en los no tan buenos", explicaba. Y lo cierto es que unos minutos antes, Serge Ibaka hablaba de lo mismo.

Pablo Laso habla de la relación que mantiene con jugadores del Real Madrid. NOELIA GÓMEZ MIRA/RELEVO

El ahora ala-pívot del equipo alemán también vivirá un partido especial ante un equipo que lo acogió durante un tiempo antes de volver a la NBA. Y, precisamente, si ha vuelto a recalar en Europa y bajo las órdenes de Laso ha sido por esa relación entrenador-jugador que va más allá de lo tangible.

"Pablo, no sólo como entrenador, sino como persona, es muy buena persona. Eso es la clave para mí. Me gusta mucho este deporte y siempre intento ayudar a todos. Creo que es muy importante tener buen corazón. En la parte del deporte, a veces hay suerte y otras no, pero como persona me encanta Pablo y como entrenador es uno de los mejores de Europa", explicaba un Serge Ibaka que ha confesado haberse reencontrado con la felicidad de jugar gracias al técnico y a Múnich. "Como jugador que siempre ha trabajado mucho y duro, sí, he recuperado la felicidad. Porque para eso paso muchas horas en el gimnasio, para jugar y disfrutarlo", dijo el ala-pívot que también se mostró contento por reencontrarse con antiguos compañeros.

Porque eso es lo que será el duelo de Euroliga entre Real Madrid y Bayern de Múnich. Un partido de reencuentros en el que, de seguro, habrá una gran ovación del WiZink al que, como el propio Chus Mateo decía, "es una leyenda del Real Madrid que instauró el estilo que ahora se mantiene" y al que espera que las cosas "le vayan bien". Y esto es algo que también el propio Laso le ha deseado a su exclub y al que fuera su escudero en el banquillo durante tantos años al conocer estas palabras hacia él.

"Son muy buenas palabras hacia mí, así que muchas gracias. Es una persona que ha trabajado conmigo muchos años, como todos los jugadores, que me conocen. Yo quiero lo mejor para ellos, para Chus por supuesto. Si lo mejor para Chus es que gane partidos pues que gane. Que pierda mañana (sonríe), pero que gane. Y no solo Chus, he trabajado con mucha gente en el Real Madrid a la que le deseo siempre lo mejor. ¿Cómo no se lo voy a desear? Pon que yo el año que viene trabaje en una fábrica de ruedas. Querré que a mis amigos les vaya bien. Yo veo así la vida. Me alegro de que piensen que a mí me vaya bien en la fábrica de ruedas", dijo el entrenador del Bayern.

Por todo ello, lo de este jueves será, de una u otra forma, especial para todos. Para los protagonistas, para los aficionados e incluso para la prensa que tantos años ha compartido entrenamientos con el ahora técnico del equipo alemán. Eso sí, todo durante la previa del partido, porque como ha dicho el propio Laso, "cuando empiece el partido, nos centramos en él y ya".