Pablo Laso convierte a un periodista de 26 años en su nueva mano derecha: el ascenso fulgurante de Nacho Juan
A sus 26 años, el joven zaragozano salta al mundo Euroliga de la mano de Pablo Laso y el Bayern de Múnich tras casi un lustro en el banquillo de Casademont Zaragoza.

Si le mencionas el nombre de Ignacio Juan Gracia a cualquier experimentado twittero aficionado al baloncesto, es posible que no le suene demasiado. Sin embargo, si le dices "NachoJuanRules", la probabilidad de que la respuesta cambie es bastante alta. En pleno apogeo de la red social que hoy en día se caracteriza por sus bandazos en la dirección y problemas técnicos, un joven zaragozano se hizo su propio hueco hablando de jugadores, equipos, sistemas y pizarrazos que tenían lugar al otro lado del charco. Ya fuera en la NCAA o NBA, si necesitabas conocer mejor a alguien, @NachoJuanRules era tu hombre.
Detrás de aquel nick de Twitter se encontraba Nacho Juan. Nacido en 1997, combinaba sus innumerables horas compartiendo contenido en la red social con sus primeros pasos en los banquillos y lo que aparentaba ser su futuro profesional, el periodismo. Graduado en la Universidad de Zaragoza, Nacho tocaba todos los palos. Firmó artículos en Basket4Us, Farhampton Magazine, BasketAmericano, SkyHook Magazine y The Goal Point, donde llegó a escribir y hablar de otros deportes. Sin embargo, sus obras maestras de cada temporada siempre tenían que ver con el baloncesto universitario. Ya fuera como colaborador o director, las guías NCAA con su firma, sinónimo de profundos y certeros análisis, se convirtieron en un clásico.
Aquella etapa en la que figuras insultantemente jóvenes se concentraban en Twitter para compartir contenido innovador fue derivando en otra algo diferente. Los chavales ya no eran tan chavales y algunos de ellos empezaron a ocupar puestos interesantes en algunos medios de comunicación y clubes deportivos. Sucedió en el mundo del fútbol, pero también en el del baloncesto. La actividad en Twitter de Nacho Juan fue cesando.La razón nada tenía que ver con el aburrimiento o cansancio, sino con su crecimiento en otro de sus hobbies: el de entrenador de formación.
Con 18 años, el especialista NCAA se convirtió en ayudante de su amigo Sergio Rabinal, conocida firma NBA en España, en Stadium Casablanca. Dos temporadas después, en el mismo club zaragozano, pasó a sentarse en el banquillo junto a Diego Ayensa, otro clásico de los últimos años en el baloncesto aragonés. Y recién entrado en la veintena, el club (habituado a tener equipos de buen nivel dentro de la ciudad) decidió darle la dirección de todo un junior. Un equipo en el que la diferencia entre entrenador y jugadores era de apenas 3 años.
Lo curioso de todo aquello es que la experiencia duró poco. Bastante poco. En junio de 2018, Casademont Zaragoza llamó a su puerta. El equipo del que era abonado le ofreció un puesto bastante llamativo en primera instancia. Con apenas 21 años y sin experiencia previa en la estructura formativa del club rojillo, Nacho Juan entró a formar parte del staff del conjunto de Liga EBA y del junior (conjuntos que compartían gran parte de la plantilla en su apuesta por la juventud).
Un año y dos meses después de su llegada, Porfi Fisac lo incorporó al staff técnico del primer equipo. El recorrido había sido meteórico. Cuatro años antes de acceder a la Liga Endesa, Nacho estaba dirigiendo un Alevín B. La razón, para todos aquellos que le conocían desde el principio, siempre estuvo muy clara y presente: trabajo, pasión, generosidad y un talento especial. Nadie veía el baloncesto como él.
Esa mezcla de cualidades tan valiosas que le llevó hasta lo más alto en su ciudad, también le mantuvo en su puesto durante cuatro temporadas. Ahí, combinando sus labores en el primer equipo con su papel en la cantera (entrenaba al Cadete A esta temporada) y su ayuda a la Dirección Deportiva, se asentó, aportó y aprendió hasta que ha llegado el siguiente punto de inflexión en su trayectoria. El más importante hasta ahora, porque la historia con el equipo de su corazón ha llegado a su fin. Al igual que su camino como twittero o periodista, no porque nada haya salido mal, sino porque ha llegado el momento de volver a mirar hacia arriba. A la Euroliga... en una de las posiciones más especiales de la actualidad: el banquillo de Pablo Laso.
Ponemos punto y final al @pablolasoTCamp. Una experiencia única al lado de profesionales admirables y personas maravillosas.
— Nacho Juan (@NachoJuan_) August 3, 2019
Eternamente agradecido por todo lo aprendido. Me llevo más que baloncesto en la mochila. pic.twitter.com/cWRzHQd3pP
La relación del nuevo técnico del Bayern de Múnich con el entrenador maño viene de lejos.Desde 2019, ambos han coincidido en el Pablo Laso Training Camp. Un espacio que surgió cuando uno todavía entrenaba al Real Madrid y el otro estaba preparándose para su salto a la ACB. El punto inicial de una amistad que ha ido fortificándose con el paso de las temporadas y que este próximo año vivirá su cambio más especial. En la reaparición de Laso en los banquillos, con el proyecto del Bayern de Múnich dando un giro ambicioso, los dos españoles se sentarán juntos. Laso con su vitrina llena y cargado de experiencia en la élite del baloncesto europeo; Juan con la ilusión de empaparse de todo lo que pueda en su primera experiencia Euroliga con 26 años. Otra oportunidad que demuestra lo extraordinario de su caso.