Olympiacos destroza a un sonrojante Barça para forzar el quinto partido

Hay partidos en los que no sale absolutamente nada. Esos en los que por más que intentas regresar al juego, sea por h o por b, no hay manera. Primero, porque tu rival no te deja. Después, porque tampoco eres capaz de encontrar la lucidez ni la concentración necesaria para ello. Y esto es precisamente lo que le ha pasado al Barça en este cuarto partido de los playoffs de Euroliga ante Olympiacos (92-58).

Porque aunque el Barça salió de inicio muy bien en ataque, tan sólo siendo Moustapha Fall el que parecía ser el único capaz de ponerlo en jaque, a partir del segundo cuarto apareció Mckissic... Y desapareció el equipo culé por completo. Los de Roger Grimau se salieron mentalmente del partido y no fueron capaces de regresar ante un equipo griego que hizo que El Pireo se pusiera en pie para aplaudir el recital que acabaron dando los de Bartzokas. Habrá quinto partido en el Palau.

Vaya recital de Mckissic. Apareció como arma griega en el segundo cuarto y desde entonces no se apagó. Volvió loco a Kalinic, que no fue capaz de defenderlo... y a cualquier jugador del Barça que tratase de frenarlo. Lideró a Olympiacos de cara al aro, pero es que, además, con unos porcentajes para enmarcar: 21 puntos, 85,7% en tiros de dos, 50% en triples y 100% en tiros libres, seis rebotes, dos asistencias, dos robos y 28 de valoración. En el rebote estuvo atento en busca de las segundas oportunidades y también en defensa. Además, incluso hasta repartió juego a sus compañeros. Partido redondo el suyo.

"Tremendo trabajo mental que te toca hacer de cara a la semana que viene". Lo de este jueves en Grecia no hay por donde cogerlo. Pero es que lo peor son las sensaciones que ha dejado el Barça, sobre todo a nivel de mentalidad. La falta de concentración fue un lastre tras el primer cuarto. Y el técnico azulgrana no fue capaz de convencer a los suyos para que se lo volvieran a creer. Cosa que, por cierto, tendrá que hacer y mucho para que el Barça realmente tenga opciones en ese quinto partido a vida o muerte. Porque o salen con más intensidad y, sobre todo, concentración o ante un equipo como Olympiacos está claro que pueden volver a llevarse un repaso como el de este jueves que haga que vean la Final Four de Berlín por televisión.

Ha sido el primer partido de la serie que ha podido jugar tras haber pasado un virus. Pero vaya vuelta de Papanikolau. Sin haber podido entrenar siquiera volvió a ser de la partida. En el tercer cuarto, cuando el Barça parecía que intentaba despertar, anotó tres triples que les dejó claro a los de Grimau que sólo habían tenido un conato de reacción. Pero es que, además, también se ha empleado a fondo en defensa (seis rebotes) y hasta para asistir. Por eso, mi fondo de pantalla va para él.

Si uno mira las estadísticas, seguramente se puede extrañar, pero de lo poco que se puede de salvar del Barça este jueves seguramente sea el carácter de Darío Brizuela. Se perdió los dos primeros partidos de la serie -porque no jugó, aunque estaba convocado, por decisión técnica-, en el tercero disfrutó de algunos minutos y en este cuarto sí que ha jugado casi 20 minutos y, aunque no haya estado acertado, de cara a aro (igual que todos sus compañeros, básicamente), si algo ha demostrado Brizuela es que persistencia, porque no iba a dejar de intentarlo. Mientras que otros parecía que le tenían miedo a jugársela, él ha seguido y seguido, incluso tratando de pelear el rebote en busca de segundas oportunidades. Y eso, al final, hay que destacarlo.

Cuando en el último cuarto la diferencia en el marcador ya era desorbitada, el colaborador de Relevo, Chema de Lucas, publicó el siguiente tuit (o post en X):

Y ahí estaba la clave de todo. La realidad es que el Barça, salvo Nnaji, al que hizo jugar Grimau con la debacle ya consumada, terminó el partido prácticamente andando. Tratando de evitar un mayor desgaste o que se produjera alguna lesión de cara al quinto partido. Y es que, en este sentido, la historia estaría de parte del Barça. Porque como dice el tuit de Chema de Lucas: nadie como visitante ha ganado un quinto partido. Así que a ver qué pasa la próxima semana.