Saras Jasikevicius: "No importa mi futuro. ¿Qué crees que pasa en el vestuario tras una derrota así?"

El Barça llegó por la vía rápida a la Final Four de la Euroliga gracias a un viaje que se aprendieron casi a la perfección. Los de Saras Jasikevicius sellaron su pase a la final a cuatro en Kaunas, en el mismo sitio donde este viernes noche sucumbieron ante un Real Madrid que, según el técnico lituano, "ha sido mejor". "Es un palo durísimo. Va a doler por muchos años", aseguraba un Jasikevicius que no dudó en hacer autocrítica de lo ocurrido en el Zalgirio Arena.

"No encontramos la manera de jugar mejor como equipo. Veníamos jugando bien, pero esto es la Final Four. Un mal día y pierdes las opciones del título", reconocía el técnico culé, que se mostró bastante contundente con lo que ha visto sobre el parqué. "Nuestro baloncesto ha sido malo durante los 40 minutos. Hablo de baloncesto en equipo", dijo el técnico lituano después de un encuentro en el que, precisamente, su equipo colapsó.

El Barça se abonó al triple para tratar de hacer daño a un Real Madrid que estuvo más acertado (y conectado entre sí) en la pintura. Y aquello se tradujo en individualidades en busca de canastas que terminaron, entre otras cuestiones, por castigarlo de más y que terminase por colapsar a nivel mental. "No puedo explicar el bloqueo mental. Cada uno tiene que mirar lo que no ha hecho. Yo, como entrenador, tengo que mirar cómo calmar a mi equipo o hacer más jugadas moviendo de lado a lado", aseguró Jasikevicius que, eso sí, reconoció que "el castigo es muy grande" y el problema que han supuesto las individualidades.

"Los detalles deciden estos partidos. No importan los porcentajes. A lo largo de 40 minutos todo tiene sentido. Nuestro baloncesto no ha sido bueno durante gran parte del partido. Hemos querido solucionar cada uno por su cuenta. Los cinco puntos antes del descanso nos han hecho mucho daño", explicó Jasikevicius. Y la realidad es que el Barça llegaba tras una gran dinámica.

Hacía días que se hablaba de que su equipo había recuperado la mejor versión de su juego interior, una gran baza con Vesely y Mirotic ante un conjunto blanco que se abonaba a Tavares y a quien Chus Mateo tratase de usar como '4' ante las bajas. Y nada salió bien, pero menos aún el plan Mirotic. El montenegrino cerró el partido con un -2 de valoración al firmar sólo tres puntos, un rebote, una asistencia, un robo y un bloqueo, números bastante pobres respecto a su rol.

"La gente es humana y puede tener malos días, como ha tenido Mirotic", reconocía Jasikevius que quiso descargar a su jugador y asumir la culpa como técnico: "Creo que es más culpa mía porque no he podido hacer jugar a mi equipo. Hemos dejado nuestras ideas como equipo y hemos pagado el precio".

Y, claro, ante algo así los fantasmas sobre su posible salida del banquillo azulgrana volvieron a aparecer, aunque el técnico lituano los trató de espantar (u ocultar) rápido: "No importa mi futuro. ¿Qué crees que pasa en el vestuario tras una derrota así?", dijo al ser preguntado. Pero, eso sí, insistió en que la temporada aún no está acabada: "El equipo ha tenido buena dinámica. Ahora mismo las palabras sobran y hay que levantarse ganando la liga. Hay que conseguirlo y jugar el mismo baloncesto que hace unas horas".