Izan Almansa, un triple MVP que se corona a nivel mundial con la Sub-19
El pívot murciano vuelve a ser elegido el mejor jugador del torneo, como ya hiciera en el Mundial Sub-17 y Eurobasket Sub-18 celebrados en 2022.

Hay jugadores que desde muy niños ya apuntan bien alto. Y un ejemplo de ello es Izan Almansa (Murcia, 2005). El pívot murciano se ha convertido en la gran joya del baloncesto español. Y lo ha hecho a base de talento, trabajo... y títulos. Porque si ya el verano pasado fue el chico de moda del mundo de la canasta, en el que es considerado como el mejor verano de la historia de la Federación Española de Baloncesto (FEB), este julio de 2023 no se ha querido quedar atrás. Izan Almansa se ha proclamado campeón del mundo, pero lo ha hecho, además, siendo el mejor jugador del mundo. Un MVP Sub-19 que deja claro que el futuro es y va a ser suyo.
Cuando el pasado verano el murciano disputó el Mundial Sub-17 -él es de la generación de 2005, pero un habitual en el grupo de aquellos que son un año mayor que él- acaparó todos los focos. Su actuación fue clave para que España lograra la plata en Málaga. Y por eso, que se llevase el MVP, aunque España no fuese campeona, no fue de extrañar. Sin embargo, ocurrió algo que bien pudiera ser el preludio de lo que vendrá en el futuro: Pau Gasol fue quien le entregó el trofeo de mejor jugador. De pívot a pívot. De estrella a futura estrella. Y de referente de la llamada generación de oro a referente de la nueva generación de oro española.
Pero a Almansa todavía le quedaba mucho por decir ese verano. Un mes después de aquella gesta, ya con los de la generación posterior -la de 2004-, Almansa volvió a demostrar que para él, la edad en el baloncesto sólo es un número y que si tenía que ejercer de líder otra vez, lo iba a hacer. Y esta vez con broche de oro. España se proclamó campeona del Eurobasket Sub-18 y él volvió a ser MVP del torneo. El segundo del verano.
Quizá por eso cuando arrancó el Mundial Sub-19 este mes de junio con la Selección dirigida por Dani Miret, la misma que hace un año fue campeona de Europa, otra vez todas las miradas se posaron en él. Al igual que la Selección iba sumando triunfos, el murciano iba cosechando cada vez más méritos para volver a ser el referente. Ya no sólo de los suyos, sino de todo el torneo. Y para eso hacía falta un último baile. Una actuación final que terminara de coronar a su Selección, como la nueva generación dorada del baloncesto nacional, y que a él lo volviese a elevar a lo más alto. Y lo hizo.
Un recital defensivo ante un combinado nacional de auténtico nivel, que incluso los llevó a la prórroga, como es Francia, hizo finalmente que la balanza se decantara hacia el lado español. Y aunque en la final no firmó su mejor actuación del torneo, sí que fue el mejor de España y le sirvió para llegar a los 16,9 puntos de media, 7,1 rebotes, 1,6 asistencias y 1,7 robos, así como cerrar el campeonato con un promedio final de 22,7 créditos de valoración con los que fue proclamado como el mejor jugador del torneo. Galardón que recibió sólo unos minutos después de saber que, otra vez, formaba parte del quinteto ideal en el que, además, también estaba su compañero Jordi Rodríguez, y que le llegó de manos de otra leyenda -como ya pasó hace un año con Gasol- Dirk Nowitzki.
Otro MVP más, esta vez Sub-19, para un jugador que ya ha hecho historia dentro del baloncesto nacional. Y que, cómo no, aspira a ser el máximo referente del mundo de la pelota en nuestro país aunque, como todo apunta, en un año haya que trasnochar para verlo jugar entre los mejores jugadores del mundo en la NBA.