Jean Montero: "Por enfocarme en la NBA me desvié de las cosas importantes"
El base-escolta del Real Betis Baloncesto se ha convertido en el líder del equipo. Con los pies en el suelo y el Mundial (y la salvación) como objetivos, analiza en Relevo su temporada.
![Jean Montero, el día que hizo historia como uno de los más jóvenes en hacer más de 20 puntos y 10 asistencias. /ACB PHOTO/S. GERONÉS](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202305/13/media/cortadas/jean-montero-acb-s-gerones-RcrBY1jUYGWa2HnYHYjdZcL-1200x648@Relevo.jpg)
Hay quien dice que la historia se escribe, en muchas ocasiones, gracias a un conjunto de casualidades. También que hay personas que están llamadas a escribirla. Y lo cierto es que en Sevilla bien puede decirse que, desde hace cuatro meses, se ha ido escribiendo, poco a poco, pero con buena muñeca, un nuevo capítulo. Y este lleva la firma de Jean Montero (Santo Domingo, 2003). A sus 19 años ha revolucionado el baloncesto nacional. Tanto que se ha convertido en el Mejor Joven de la temporada de la Liga Endesa. Pero también internacional, pues fue él, junto a su selección (República Dominicana), quien dejó a la Argentina de uno de sus referentes -Facundo Campazzo- sin Mundial.
Lo del base-escolta del Real Betis Baloncesto comienza a quedarse sin calificativos. De hecho, esta misma semana ha grabado su nombre junto al del Chacho y Luka Doncic como el tercer jugador más joven en hacer más de 20 puntos (hizo 25) y 10 asistencias en un partido. Pero él prefiere seguir con los pies en el suelo -si no, ya se los pone su padre-, como reconoce en esta videollamada con Relevo, para no cometer errores del pasado. Y ayudar a su equipo, el Real Betis, a conseguir esa ansiada permanencia que hoy tiene una cita fundamental.
Hace unos días lideraste al Betis para remontar 19 puntos ante Girona y hacer historia en Liga Endesa. Ahora os la jugáis ante Covirán Granada. ¿Cómo se lleva tanta exigencia?
Es una semana muy tensa, ya que te tuvimos un partido que se decidió en el último cuarto ya que íbamos a 19 abajo. Realmente ese partido era de un nivel de exigencia máxima. Ahora, con este partido que tenemos creo que es el partido más importante de la temporada. Nos estamos jugando la permanencia y entiendo que mis compañeros también están angustiados con él.
¿Cómo siendo tan joven se gestiona toda esa presión a nivel mental?
Yo siempre digo que es algo que hago desde muy pequeño. A mí siempre me gustan los retos. Soy una persona que es muy competitiva y no me presiono básicamente por nada en cuanto al deporte. Simplemente lo disfruto. Incluso me emociona más cuando hay un partido así, de máxima importancia, que cuando hago un partido, vamos a decir, de liga regular. Me inspiro más, me da más motivación ese partido. El nivel de enfoque es máximo y para mí ese tipo de partidos realmente me hacen sentir muy bien, ya que requieren de mucho, de mucha fuerza mental y físicamente también.
¿Nunca lo has trabajado con un profesional?
No. Realmente nunca he trabajado con un psicólogo deportivo ni nada. Gracias a Dios no lo he necesitado hasta el momento. Creo que por todas las cosas que yo he pasado en Santo Domingo cuando era pequeño. He tenido que madurar a mi corta edad, salir de mi casa a los 13 años... O sea, como que esa dureza mental la he tenido desde muy pequeño y bueno, me me siento ya como un adulto realmente jugando al baloncesto. Estoy jugando a nivel profesional desde los 16 y para mí, como lo dije al principio, algo que me llama la atención y me motiva mucho es el nivel de competencia, cuando hay un partido que exige mucho y te estás jugando mucho la vida.
¿Cómo comenzaste en el baloncesto?
Con mi primo. Mi primo me lleva cinco años a mí y jugaba con sus amigos. Siempre fui como creciendo y jugando con categorías más alta que la mía, dos o tres años o cuatro. Y siempre fue como así, como un reto. Siempre tenía que dar lo mayor de mí porque era el más pequeño del grupo, el más flaquito. Entonces tenía que jugármela, tenía que lucirme, tenía que hacer cosas que no eran normales a los nueve o diez años. Tenía que jugar con chicos de 13, 14. Es algo que me sale natural. Estoy muy agradecido con esto, la verdad.
He visto por ahí que tu referente era Kobe Bryant. ¿Cómo te fijaste en él?
Fue por el típico partido que tu ves y el jugador que mejor juegue se día o el equipo que gane es el equipo que se te queda marcado. En ese caso fue un juego de los Lakers contra Boston en el 2010. Ganaron y Kobe hizo un partidazo y yo dije que ese era mi jugador y con ese era el que me iba a quedar. Y desde siempre, desde el primer día que lo vi, siempre lo he seguido mucho. Lamento lo que pasó, pero sigo con él en el corazón.
Y en una entrevista dijiste que, a nivel europeo, te fijaste en Facundo Campazzo, Toko Shengelia y Mike James. ¿Con qué te quedas de cada uno?
De Campazzo es como la facilidad con la que él pone a jugar a su compañeros. Es un jugador que se la juega mucho, hace muchas cosas que tú te quedas: ¿cómo lo hizo? Tiene esa inteligencia para ver el juego mucho antes que el resto, el IQ, como dicen. Es un jugador impresionante. Lo escuchaba mencionar desde muy pequeño cuando estaba en Dominicana: "Campazzo, Campazzo, un argentino que juega allí en España". Y bueno, de Shengelia lo comencé a ver cuando estaba aquí, cuando vine con Gran Canaria, y me fascinaba verlo jugar porque era un jugador muy inteligente también, la facilidad con la que se movía y eso. Y Mike James es un jugador anotador, tipo como el jugador que yo soy y como llega al aro, como se juega los triples y todo eso. Esos son los jugadores que cuando yo vine a Europa me gustaba ver mucho sus partidos.
¿Y por ver tantos partidos de Campazzo lo pudiste frenar en las Ventanas y dejarlo fuera del Mundial?
Ya lo tenía estudiado desde hace mucho tiempo. Yo nunca había tenido la oportunidad de jugar en contra de él ni nada. E Incluso se lo dije en el partido, le dije: te tengo cogido porque ya tengo mucho tiempo viéndote jugar.
¿Y qué te dijo?
Se explotó de la risa ahí, pero me dijo que siga, que siga con el enfoque, y que siguiéramos el partido.
Hablando de Mundial... Tercero consecutivo de República Dominicana, primero tuyo y como líder. ¿Cómo lo afrontas?
Para mí eso va a ser una experiencia inolvidable. Ser parte del equipo que clasificó, que se jugó la vida en las Ventanas para clasificar al Mundial, eso me hace sentir muy orgulloso. Y para mí, ir allá y poder competir, poner la bandera dominicana lo más alto del mundo es algo que es un sentimiento único, que hay que vivirlo para sentirlo. Eso de ser referente y eso... No sé, yo simplemente hago lo que me diga el entrenador y me salgo a divertir a la cancha, a competir y a lo que salga. Y a ganar.
Eso lo estás haciendo con el Real Betis... Hay quien dice que 'Sevilla tiene un color especial, pero que ese color lo ha puesto Jean Montero'.
Sí, yo estoy muy agradecido con el coach, la organización en general, porque me dieron una oportunidad. Yo venía básicamente de estar dos meses sin jugar. Donde jugué fue en la Ventana esa de noviembre en Santo Domingo y, bueno, me dieron la oportunidad. Vine aquí, traté de hacer mis cosas para que me dieran la confianza que necesitaba y hasta ahora me la han dado. Eso me hace sentir súper feliz porque tras venir de esos meses de incertidumbre, llegar aquí, ganarme la confianza, jugar, divertirme y poder disfrutar de la ciudad, el juego y todo eso, eso es muy bonito la verdad.
Has disfrutado de la ciudad... Y de la Feria, en la que, además, te llevaste el premio a Mejor Joven de la Liga Endesa...
La Feria es increíble. A mí me gusta mucho como leer cosas del pasado, de lo que pasó hace mucho tiempo, en 1930, 1940. Porque eso me hace teletransportarme a ese entonces. Y cuando fui a la feria yo sentía eso por la vestimenta de la gente, el vestido flamenco y esas cosas. Es muy bonito, la verdad. Y aquí las personas son muy dedicadas a la feria. Yo estaba muy sorprendido. ¡La gente se lo toma muy en serio! Es muy bonito, la disfruté. Y en cuanto al premio ese, la verdad es que me la jugaron. No tenía idea de lo que iba a suceder, simplemente me dijeron: vamos a la feria, a una entrevista y ya no quedamos por ahí disfrutando y nos montamos en los juegos de allí y ya está.
¿Y tu familia cómo está viviendo todo esto? Porque no hay jornada en la que no salga tu nombre como destacado.
Mi papá siempre me vive dando críticas, ¿sabes? Mi papá no me dice todo lo bueno que yo hago. Él siempre es el típico que te dice que había un momento en el partido que debiste de hacer esto. Siempre me va dando esa crítica y mi mamá también. Aunque mi mamá es una persona muy contenta, muy feliz. A ella siempre le gusta sonreír y todo está ahí y entiendo que ahora mismo está viviendo un momento que hace mucho tiempo que no lo vivía. Está muy contenta, la verdad.
Llegaste a Sevilla cedido por Gran Canaria y lo cierto es que el equipo este año está muy bien. Hasta ha ganado la Eurocup y tiene billete para Euroliga. ¿Te ves jugando en la máxima competición continental el año que viene?
Todavía tengo contrato con ellos. Es una decisión que se tomará más adelante. Estoy muy contento porque lograron el campeonato, ya tenían varios años haciendo una buena competición. Cuando estuve allí jugando en el 21, llegamos a la semifinal e hicimos un buen papel. Entonces ahora que lo tienen estoy muy contento por ellos.
¿Cuál sería tu objetivo a nivel personal? Como le pasa a muchos jugadores jóvenes, ¿tu sueño también es la NBA?
Ese es el sueño, como dicen, de todo el que comienza a jugar al baloncesto desde tan joven. Pero yo ya pasé por un momento que por tratarme de enfocar tanto en eso, me desvié de las cosas que tenía que ponerle importancia, la verdad. Y ahora mismo estoy enfocado aquí en Europa, trato de hacer mi trabajo, de hacer mis cosas, crecer como jugador, crecer como persona y ya en un futuro, si Dios quiere o lo permite, y es mejor la oferta de allí que las de aquí entonces ya tomaremos la decisión. Veremos.
Y el sueño este año será la permanencia con el Real Betis, ¿no? Y para eso este sábado hay una cita importante ante el Covirán Granada...
Ya me han chivado que hay sold out para el partido. Es algo que me llama mucho la atención y estoy contento por eso. Ya estoy ansioso de que llegue, la verdad. Es un partido que hay que tratar de competir cada segundo, segundo por segundo, minuto por minuto. Y ya en el minuto 40 se decidirá quién se queda con la victoria. Quiero que sea un partido muy competitivo y bonito y que la afición pueda disfrutar de eso.