40 minutos de infartos, móviles y calculadoras: Unicaja reina en ACB, no habrá final Madrid-Barça y el Baskonia confirma su desastre

La última jornada de ACB fue una demostración más de que esta competición, un manantial que emana emociones y que presenta cada fin de semana a 18 aficiones en comunión con sus héroes, es insuperable en Europa. Fueron dos horas para el infarto. El liderato, una plaza de playoffs, todo su orden, el descenso. Todo en juego. Celosos Girona y Zaragoza despidieron la temporada con triunfo de los maños (79-89), sin nadie salvo sus propias hinchadas mirando.

Normal. Fue la jornada de los móviles, las lágrimas, la tensión... El Unicaja cierra el año como líder y ahora le toca demostrar en playoffs que es merecedor del título. El Madrid ganó a Baskonia, que se queda sin la octava plaza, que será para BAXI Manresa. Y el gran premio para Covirán Granada, que salva la categoría, con su épico triunfo ante Gran Canaria. Un último capítulo para Monbus Obradoiro que se va para sí volver. Tras años y años en ACB, han dejado huella y la promesa de un regreso cercano. Lo merecen.

La final en la que ambos pueden perder llegaba al WiZink Center. El Real Madrid de baloncesto necesitaba ganar y el Baskonia también, pero ambos podrían no ver cumplido su objetivo aún lográndolo. En el banquillo, necesitaban móvil y calculadora. En el blanco, se veía el Unicaja-Zunder Palencia. En el vitoriano, el Lenovo Tenerife-BAXI Manresa.

Mientras, en el primer tiempo intercambiaron canastas como los dos clubes de élite que son. Eso sí, faltaba Markus Howard, que quizás no vuelva a vestir la camiseta de Baskonia. Marinkovic y Miller-McIntyre le sucedían. En el Madrid, Musa y un invitado poco habitual, Rudy Fernández. Tres de tres en triples para el balear, que llega justo a tiempo para el tramo decisivo de la temporada y como si el tiempo no pasara para él. Como para Llull, que dejó nueve de ventaja al descanso con otro triple de los suyos.

Unicaja bailaba con los deberes. Un sí, un no... El Zunder Palencia se quería despedir de la ACB por la puerta grande, con Benite a los mandos. Menos mal que el líder cuenta con una plantilla profunda en la que el día gris de Taylor o Carter bien lo suplen Ejim, Kalinowski o quien se plante. Ya no hay motivo alguno para creer que este equipo no puede levantar el trofeo de la Liga Endesa en el Carpena. Tras minutos de sufrimiento, arreón final y ocho de ventaja. Como quien oye llover.

Y el que no aguantaba el tirón era el BAXI Manresa, remando a contracorriente desde el inicio, siempre por debajo en el marcador y como si su éxito no le garantizase nada. Claro que su rival, Lenovo Tenerife, era aspirante a estar arriba en ese alboroto por el orden de los playoffs. El ecuador equilibró la balanza, como si nada hubiera ocurrido.

El liderato quedó visto para sentencia con aún mucho por jugarse. Sí, por primera vez en cuatro años no habrá final entre Real Madrid y Barcelona. Unicaja, con total merecimiento, concluye la Liga Endesa en primera posición ante un Carpena completamente entregado y que les llevó en volandas al triunfo ante Zunder Palencia.

Algo frío el WiZink Center, consciente de lo que ocurría hacia el sur. Y todavía más al sur, Baskonia soñaba. Tenerife continuaba arriba ante Manresa y el marcador en la capital estaba en un puño. Aunque, en realidad, iba a arreones. Que si el Madrid coge ventaja, que si los de Ivanovic se acercan... El técnico lo sabía. Si no se habían hecho los deberes hasta entonces, jugarse el todo por el todo en el WiZink no era una buena solución. La derrota (106-100) puso fin a una temporada decepcionante... y tampoco le sirvió a los de Chus Mateo. La victoria de Lenovo Tenerife ante Manresa (84-80) resultó intrascendente por la octava plaza.

Dos ambientes ensordecedores, las aficiones de Granada y Monbus Obradoiro rindieron pleitesía a los suyos antes de jugarse el todo por el todo en 40 minutos por una permanencia. Para los gallegos, que no dependían de sí mismos, no empezó nada bien el asunto... Ruzic, del Joventut, firmó uno de los mejores cuartos de la temporada con 14 puntos. Pronto sumó también siete rebotes. Imparable. El segundo compás fue una fiesta local, con el hambre necesaria para enmendar errores. Un solo tiro de dos fallado y con la masterclass de Scrubb. La ventaja al descanso (45-35) nació de remar. Solo así se salvan categorías.

Por supuesto que a Covirán Granada también le tocaría sufrir. Tras aguantar el tipo en el primer cuarto, sucumbieron ante la presión y encajaron un parcial de 9-22, basado en el poderío reboteador y en la intensidad de Ben Lammers. No es buen augurio la incapacidad de frenar a tu adversario cuando estás a vida o muerte, ni tampoco los once de desventaja en el intermedio.

Mientras Obradoiro mantenía el control en el marcador, los ojos de Fontes do Sar ya atendían a Granada, donde un parcial espectacular de los de Pablo Pin, liderado por Cheatham hacía creer en el milagro. Con diez minutos por jugar, adalides del baloncesto taquicárdico, acordaron un empate a 53. Ya son dos años seguidos de los granadinos llamando a la puerta del éxito o el abismo en los compases finales. Una angustia suficiente para regalar el abono a todos sus fieles.

Lo que podría ser una fiesta en Santiago era ya casi un funeral. Covirán Granada apostó por el corazón (y el tiro exterior) para volar. El parcial, demoledor, ya les colocó diez arriba. Dos gradas y una misma impresión. Aficionados a los que les une la misma pasión rozando las lágrimas, unas de alegría, otras de desilusión. Pero quedaba mucho, claro que quedaba mucho. Y el Gran Canaria también se la estaba jugando.

Cuando estás con el agua al cuello, no hay tiro imposible. Lammers enchufó y los diez de ventaja ya de repente eran cuatro, con cuatro minutos por jugarse. Y luego Albicy, ¿cuánto duran realmente tres minutos?, ¿qué debe sentir un jugador que escucha a su afición celebrar lo que ocurra en otra cancha? Dos preguntas, posiblemente sin respuesta.

El final del partido fue un clásico. Minutos, minutos y más minutos de revisión. Discusión. Tiros libres. Tiempos muertos. El destino convierte 30 segundos y tres puntos de ventaja en toda una temporada. Llamen a la ambulancia. Valtonen, iceman, colocó un tapón que pasará a la historia del club y anotó los dos libres. Y ese mismo compás, se confirmaba la victoria de Obradoiro (97-71). Posiblemente, la menos celebrada de siempre. El Granca no pudo y el Covirán Granada estará un año más en Liga Endesa. Otro año sobre la bocina. Así se disfruta mejor.

Realizar una quiniela para acertar el orden de los puestos de nobleza debería entregar premios millonarios a su acertante. Y eso que alguno se encargó de hacer los deberes rápido, como UCAM Murcia, brillante al descanso ante un Breogán salvado (38-25). También parecía hacerlo Lenovo Tenerife, pero el BAXI Manresa remó al ver que el Baskonia jugaba a los muchos puntos en Madrid.

Más sorprendente resultó ver a Valencia Basket, el que tenía en su mano el factor campo, ceder ante un MoraBanc Andorra matemáticamente salvado. Ojeleye era el único que no se andaba con contemplaciones, con 12 puntos antes de afrontar la segunda mitad. Mientras, Grimau no se andaba con contemplaciones: minutada a Jabari, Laprovittola y Ricky, no quedaba otra que ganar... Este Barça ha sufrido mucho, pero tiene un roster preparado para todo. Miribilla, que despedía la temporada, les impedía demostrarlo (37-38).

Llegó la lógica: el Barça despuntó en el marcador, UCAM seguía firme, al Gran Canaria le tenía que tocar sufrir por la agonía de su rival... Y el surrealismo: ¡29 abajo Valencia Basket tras un 31-8 en el tercer cuarto! Ver para creer. El tiempo confirmó la victoria y tercera plaza del Barça Basket aun con sufrimiento (68-72) y a Jean Montero (47 de valoración) como verdugo de los taronjas y aspirante claro a mejor actuación de toda la temporada. Llegó a ir 42 arriba MoraBanc... Finalmente fueron 28.

UCAM Murcia completó los deberes ante Breogán (68-61); Lenovo Tenerife también ante Manresa (84-80) y para cerrar el partido del año entre Covirán Granada-Gran Canaria, con victoria para los locales por 74-67. Mucho texto y pocas conclusiones. Ahora sí: el Barça es tercero; el Valencia, cuarto; UCAM, quinto; Lenovo Tenerife, sexto y Gran Canaria, séptimo.