España se la juega sin red y Canadá avisa: "No va a ser divertido"

Yakarta.- La España funambulista, esa que se ha acostumbrado a caminar en el alambre casi en cada torneo, tendrá que volver a hacer un ejercicio de equilibrismo para no caer al vacío. La Selección no tiene margen de error tras su inesperada derrota ante Letonia y necesita ganar sí o sí a Canadá (15:30 hora peninsular en La1) para meterse entre los ocho mejores del Mundial y seguir teniendo opciones matemáticas de estar en los Juegos de París sin necesidad de pasar por el temido preolímpico.

Para hacer más difícil el ejercicio de supervivencia de la muchachada de Scariolo, en mitad del alambre un obstáculo llamado Canadá. Uno de los grandes favoritos al oro mundial… que también llega con la necesidad de victoria para no quedarse fuera de los cuartos de final de un gran torneo, como lleva sucediendo con el equipo de la hoja de arce en los últimos 24 años. Quizás por esa necesidad histórica los jugadores canadienses avisan al equipo español de que este encuentro no tendrá nada que ver con el disputado en Granada hace dos semanas.

"Esto ya no va a ser divertido", advertía Nickeil Alexander-Walker a Relevo. "Es un partido muy importante para ambos países. Sabemos que ganaron el Eurobasket el verano pasado y este verano querrán repetir, por lo que tenemos que dar lo mejor". Si lo consiguen la amenaza contra España será real, porque pese a la derrota contra Brasil, Canadá ya ha mostrado argumentos y guarismos para asustar a todos sus rivales.

La selección de Jordi Fernández ha sido el equipo más anotador de la primera fase, con 108 puntos de promedio y tiene el mejor rating ofensivo de la competición. Son la tercera mejor defensa del campeonato, el equipo que más pérdidas provoca en su rival, el mejor en porcentaje de rebotes ofensivos, tiene siete jugadores NBA… Un sinfín de argumentos que decantarían la balanza a su favor en cualquier pronóstico.

Y además, tiene a Shai Gilgeous-Alexander. El jugador de los Thunder está siendo uno de los nombres propios del campeonato y es el gran candidato a MVP del torneo junto a Luka Doncic. Es el alfa y el omega del equipo canadiense, como recordaba el técnico español en la previa: "Él es nuestro hombre. No necesitamos a un jugador que gane él solo los partidos, solamente es su rol y es muy importante para nosotros. Todo el mundo tiene un trabajo y si tú haces ese trabajo ya sea anotar, rebotear o estar listo cuando tus compañeros te necesitan, tendrás éxito".

Sin embargo, la omnipresente figura de Shai hace que a veces el equipo canadiense tenga excesiva dependencia de él y eso puede ser una ventaja para sus rivales: dejar que el jugador haga y deshaga a su antojo, pero no dejar que sus compañeros entren en juego. Eso es lo que hizo Brasil y de lo que ha tomado nota España.

"He hablado con Marcelinho y me ha dado algunos detallitos", aseguraba Rudy Fernández en la previa del choque ante un equipo con las señas de identidad muy definidas, como recordaba Willy Hernangómez. "Juegan físico. Desde el base hasta el pívot, todos pueden hacer muchas cosas. Olynyk te puede subir al balón, Shai tiene calidad y es uno de los máximos anotadores de la NBA. Pero confiamos en el plan de Sergio y tenemos que ejecutarlo al 200%".

Si Canadá exhibe músculo y números, España, que cuenta con la duda de Llull por un golpe en el gemelo izquierdo, tendrá que tirar de experiencia y de esa palabra que la ha convertido en referencia en las últimas décadas: equipo. Recuperar las señas de identidad de un grupo que ya sabe lo que es salir a flote cuando el barco parece totalmente hundido.

"En lo que he insistido es que juguemos el baloncesto que sabemos los que hemos construido la leyenda de este equipo. Y que no estemos tan estresados con el resultado final. Si fuéramos un equipo que no ha ganado… pero siempre hemos superado cualquier tipo de previsión hasta el punto de olvidar cuál es nuestra naturaleza real actualmente", apuntaba Scariolo en la previa. "Hay pocas previsiones a nuestro a favor a priori, pero no existe un partido imposible ni un rival imbatible. La historia de este equipo no termina mañana, ganemos o perdamos".

El crédito se lo han ganado con títulos, partidos épicos y también con baloncesto, que al final es de lo que se trata esto. España no ha encontrado todavía un patrón de juego en este campeonato, pero sí ha exhibido algunas de las armas con las que hoy pueden anular a la, en teoría, todopoderosa Canadá: alternancias defensivas, lectura de partido, dominio en el poste bajo con la figura de Willy, solidaridad con un movimiento de balón en busca siempre del mejor tiro posible (los de Scariolo son el equipo que más asiste en el campeonato) y un trabajo de equipo para minimizar los errores que se vieron ante Letonia.

Tarea complicada, casi imposible, la que se avecina ante Canadá, pero eso no ha minado el ánimo de un grupo que ya se levantó el año pasado cuando todo el mundo daba por favorito a Lituania en octavos. O hace cuatro años cuando nadie apostaba por España ante Serbia o Italia. Recuerdos que sirven para llegar con la moral "a tope. No hay otra. Es ganar o ganar. Estamos todos convencidos y hemos viajado para seguir aquí. Mañana no jugaremos cinco o doce en Yakarta, sino que esperemos que miles de españoles que nos siguen", apuntaba Willy Hernangómez en la previa. Y si no, ya saben. "El que no crea, que no venga".