Jaime Fernández y Alberto Díaz pilotan a España rumbo al Mundial

Esfuerzo, identidad y constancia. Tres cualidades que tiene la Selección española y que sirven para ganar partidos. Por mucho que a veces parezca que se apaga la luz de cara a aro. España ha logrado una victoria oficiosa, pero titánica en Pésaro ante Italia y ya tiene medio billete para el Mundial de 2023 que se disputará en Indonesia, Japón y Filipinas. Y eso que su rival fue de menos a más para complicar las cosas a los de Sergio Scariolo e incluso acabar forzando la prórroga.

El partido fue, cuanto menos, extraño. Más que nada porque la gran ventaja en rebotes que logró la Selección antes del descanso (8-20 a favor) no se tradujo en una ventaja real en el marcador. Un primer cuarto de dominio, un segundo con una Italia venida de menos a más y solo tres puntos por delante al descanso (33-36).

La reanudación no cambió el guion y, aunque Alberto Díaz hizo de las suyas -¿cómo es capaz de multiplicarse y estar en todos sitios?- a los de Scariolo se les hizo de noche y la oscuridad reinó de cara a aro. Si a eso se suma que Nicolo Mannion dio un paso al frente y comenzó a enchufar desde la línea de tres, la sentencia está dictada... O no. Porque para eso estaba Jaime Fernández. El base de Lenovo Tenerife se puso la capa de superhéroe y tiró del carro sumando puntos al marcador. Igualdad máxima, prórroga y otra vez Fernández para sentenciar con el 84-88 final.

España tiene al mejor seleccionador del panorama internacional. Sin los NBA, sin los jugadores Euroliga... Pero da igual. El carácter que Sergio Scariolo es capaz de imprimar en los jugadores de los que dispone es absolutamente increíble. O, bueno, quizá creíble, porque nada más hay que ver lo que se hizo hace solo tres meses en el Eurobasket... España tiene identidad, juegue quien juegue, y qué importante es eso.

Triple tras triple, así hasta cuatro veces y cuando más falta hacía. Eso sin contar el resto de acciones en las que dejó su sello ante Italia. Y ni siquiera Mannion, el mejor de los italianos, pudo hacerle sombra. El partido de Jaime Fernández es de los de enmarcar. El base de Lenovo Tenerife lideró a España y le ha dado media clasificación para el Mundial. No es de extrañar que, además, fuera su mejor partido como internacional. Visión, acierto y liderazgo para firmar 28 puntos, coger dos rebotes, dar dos asistencias y acumular un 21 de valoración. Eso sí, el MVP es compartido con su compañero Alberto Díaz.

"¿Cómo eres capaz de hacer lo que haces?". Italia intenta montar un contraataque y ahí está Alberto Díaz para meter la mano y cortar la jugada. Italia trata de acercarse a la zona, y ahí está Alberto Díaz presionando para evitarlo. Italia quiere hacer una jugada por el exterior y ahí está también Alberto Díaz. Y digo Italia porque ha sido el rival de este viernes, pero así pasa con cualquier selección a la que se enfrenta España: Alberto Díaz siempre se multiplica en pista. Pero, además, si los de Scariolo necesitan quien busque el pase clave para que un compañero anote, ahí está él también. Ocho puntos, pero cuatro rebotes y siete asistencias que le dan un 21 de valoración. El MVP compartido con Fernández, que ha evitado que Mannion hiciera aún más. Pd.: Ten cuidado si te lo encuentras que te roba la cartera y ni te enteras.

Último cuarto, 2:02 para el final e Italia va dos abajo (62-64). Y ahí aparece él con un triple, desequilibrado, cayéndose hacia atrás para poner a la escuadra azzurra por delante en el marcador en un momento clave (65-64). Si no me crees, nada más que veas la repetición y la cara que se le queda a Jaime Fernández al verlo. Michele Vitali, que acabó el partido con ocho puntos, dos rebotes y cinco asistencias, fue uno de los mejores de Italia. Y esa acción es de las de aplaudir.

Si Díaz y Fernández fueron los líderes, Joel Parra tampoco quiso perderse esa fiesta. Fue tercero más valorado de la Selección. Terminó el partido como el máximo reboteador. Y lo redondeó siendo el segundo máximo anotador de los de Scariolo con 12 puntos. El alero de Joventut está en su mejor momento y lo demostró ante Italia. No le tembló la mano para tirar de tres y castigar en la prórroga desde la línea del 6,75. Tampoco para inaugurar el casillero de triples de la Selección. Y sí, al final del último cuarto tuvo la canasta ganadora que hubiera evitado la prórroga, pero da igual. Porque el carácter y paso al frente de Parra es algo muy bueno para esta Selección. Pd.: Ay, si hubieran sido válidos los dos triplazos suyos que quedaron anulados.