La carrera más descarada por ser el peor equipo de la NBA y recoger el testigo dejado por Michael Jordan
Los Detroit Pistons están a seis partidos de firmar la peor racha de la historia. Acumulan 22 derrotas seguidas y sólo han ganado un 8% de sus partidos, el peor porcentaje de siempre.

Ver noche tras noche los resultados de la jornada y encontrar una derrota de los Detroit Pistons ha dejado de ser noticia. Van 22 seguidas y ya están a sólo seis del registro que alcanzaron los Philadelphia 76ers entre las temporadas 2014-2015 y la 2015-2016, cuando acumularon 28 partidos sin conocer el triunfo.
Precisamente fue la franquicia de Pennsylvania la encargada de convertir a estos Pistons en la peor plantilla que ha vestido el uniforme de los Bad Boys - una franquicia con tres anillos en sus vitrinas- tras superar el peor registro histórico de partidos perdidos consecutivos. Una racha en la que el conjunto de Monty Williams coquetea no ya con el tanking de forma descarada (perder a propósito para tener más opciones en el draft de 2024) sino que puede convertirse en el peor equipo de la historia de la NBA. Un 'tankeo' que se les ha ido de las manos.
En este momento, los Pistons tienen una marca de 2-23 (empezaron la temporada con 2-1). O lo que es lo mismo, un 8% de victorias (peor porcentaje en la historia de la NBA). O lo que es lo mismo, que están en proyección de terminar la temporada sin alcanzar los siete triunfos. O lo que es lo mismo, los peores números en los 77 años de competición de la NBA.

Existe una posibilidad muy real de que este grupo de los Pistons se convierta en el peor equipo en la historia de la NBA, eclipsando la mediocridad de los Charlotte Bobcats de 2011-12, cuando terminaron con 7-59 en una temporada más corta de lo habitual por el cierre patronal que retrasó el comienzo de la competición. El único equipo que alguna vez ganó menos de 10 partidos en una temporada completa (82 encuentros) son los 76ers de 1973, que terminaron con nueve victorias.
Aquellos Bobcats, equipo 'gobernado' por Michael Jordan que incluso fue abucheado en más de una ocasión en Charlotte, quedaron en el imaginario colectivo como el peor equipo de todos los tiempos. Apenas sumaron un 11% de triunfos en su casillero y su media fue de derrotas por 14 puntos de diferencia. Hoy esos números parecen hasta buenos si los comparamos con los de los Pistons.

"Lo repetitivo son nuestros partidos, no vuestras preguntas", aseguraba ante la prensa el técnico de los Pistons. Un Monty Williams que es el segundo entrenador mejor pagado -firmó por seis temporadas y 78 millones de dólares- sólo por detrás del veterano Gregg Popovich, entrenador de unos San Antonio Spurs que son el segundo peor equipo de la liga con cuatro victorias y 20 derrotas, luchando también descaradamente por mejorar sus opciones de cara al draft.
La franquicia de Detroit, que acumula 245 derrotas en las últimas cinco temporadas, firma el peor diferencial de la liga con una media de -11,3 puntos y pese a que no es la peor defensa de la liga, sus números no invitan precisamente al optimismo. Un equipo joven con un número uno del draft en plantilla como Cade Cunningham y varios top-10 como James Wiseman (2), Marvin Bagley (2), Ausar Thompson (5), Jaden Ivey (5), Killian Hayes (7), Kevin Knox (9). Materia prima de sobra, pero que todavía no ha terminado de encontrar su sitio en una liga que se les está haciendo demasiado grande.