WNBA

La decisión de Breanna Stewart y su lucha por mejorar las condiciones de las jugadoras de la WNBA

Considerada como la mejor jugadora del mundo, es agente libre y asegura que busca un contrato para conseguir vuelos chárter para toda la liga.

Breanna Stewart, jugadora de las Seattle Storm./Getty Images
Breanna Stewart, jugadora de las Seattle Storm. Getty Images
Guillermo García

Guillermo García

La lucha por mejorar las condiciones de las jugadoras de la WNBA se ha convertido en una constante en los últimos años. Sobre todo en lo que a las condiciones laborales se refiere. Las estrellas de la liga no se cansan de levantar la voz para intentar evolucionar en una lucha en la que se avanza a menor velocidad de lo que a las jugadoras les gustaría.

Sin embargo, el avance puede pegar un pequeño acelerón con la entrada en escena de Breanna Stewart. Considerada como la mejor jugadora del mundo en la actualidad, la alero de Nueva York es además agente libre y su decisión de futuro mantiene en vilo al resto de la liga . Seattle, donde ha jugado desde que debutó en la liga, y Nueva York parecen los equipos con más posibilidades, pero ahora ha sido la propia Stewart la que ha dejado pistas de lo que tiene qué hacer quien quiera ficharla.

"Me encantaría contribuir con patrocinios y horas de producción para asegurar que todas podamos trabajar en un camino que priorice la seguridad y la salud"

Breanna Stewart

"Me encantaría ser parte de un trato que ayude a financiar los viajes en charter para toda la WNBA", ha asegurado la jugadora estadounidense en Twitter. "Me encantaría contribuir con patrocinios y horas de producción para asegurar que todas podamos trabajar en un camino que priorice la seguridad y la salud, que termina reflejándose en un mejor producto. ¿Quién está conmigo?".

Un mensaje que provocó una oleada de mensajes de compañeras o ex jugadoras como Sue Bird, que también piden una mejora en las condiciones de viaje de los equipos en la WNBA. Una liga en la que, de momento, siguen volando en vuelos comerciales con los perjuicios que ello puede conllevar en forma de retrasos o cancelaciones, como la que sufrieron los Sparks la pasada temporada y que obligó al equipo a pasar la noche en el aeropuerto.

No es la primera vez que surgen polémicas con el tema de los vuelos en la liga femenina de baloncesto. El pasado mes de marzo la propia liga sancionaba a las New York Liberty con una de las mayores multas de la historia (500.000 dólares) después de que su dueño Joe Tsai, el mismo propietario que los Brooklyn Nets, anunciara que su equipo iba a dejar de viajar en vuelos comerciales para pasar a hacerlo en charter.

Un convenio más justo

La liga entendió que esto podría suponer un agravio comparativo con otras franquicias que no pueden acometer un desembolso así para fletar un charter para sus equipos. La WNBA permite a los equipos viajar en charter en las Finales de la liga, pero no así durante la temporada regular en una medida que muchas veces ha servido para incidir en la diferencia con la competición masculina.

Las estrellas de la WNBA estallaron la temporada pasada y comenzaron a alzar la voz en pos de una posible igualdad salarial con respecto a sus homónimos varones. No pedían cobrar las astronómicas cifras que se embolsan los LeBron, Curry, Harden y compañía. No. Lo que ellas pedían era un reparto más equitativo de los beneficios de la liga como ocurre en la NBA.

De momento lo que han conseguido es mejorar sus condiciones con el nuevo convenio que entrará en vigor a partir de 2023. Un acuerdo que permitirá a las mejores jugadoras de la liga ganar por encima de los 500.000 dólares. Es decir, más del triple del mejor sueldo de la pasada temporada.

El nuevo convenio dejará un aumento del 53% en la compensación total en efectivo, lo que permitirá que por primera vez en la historia de la competición en que el salario base supere los 100.000 dólares. En definitiva, medidas que permitirán a las mejores jugadoras de baloncesto del planeta comenzar a ser tratadas salarialmente como tal.