La historia de una de las fotos del año en la NBA que sostiene la narrativa de que Anthony Edwards es "el nuevo Michael Jordan"
El jugador de los Timberwolves deja una de las acciones del año con su póster a John Collins, mientras sigue subiendo enteros como sucesor de 'Air'.

Nikola Jokic, Shai Gilgeous-Alexander, Giannis Antetokounmpo, Luka Doncic… todos ellos son los grandes candidatos a MVP de la temporada regular en la NBA. Sin embargo, hay un nombre propio que no entra en la terna, pero que se ha convertido en uno de los grandes personajes de la temporada en la NBA. Y no es otro que Anthony Edwards.
El alero se ha convertido en el líder de los sorprendentes Minnesota Timberwolves -y más ante la ausencia de Karl-Anthony Towns- que siguen segundos en el Oeste, a sólo medio partido del liderato que ocupan ahora los Oklahoma City Thunder. Un jugador capaz de sostener al equipo para sumar triunfos ante equipos tan correosos como los Utah Jazz (104-114) y, encima, hacerlo con espectáculo y jugadas que quedan para el recuerdo.
Porque si hace unos días Edwards dejaba una de las fotos del año con un tapón a dos manos para sellar el triunfo de los Wolves ante los Pacers, en esta ocasión 'Ant Man' (como se le conoce en la NBA) ha vuelto a tirar de muelles para firmar uno de los mates de la temporada en la liga estadounidense.
Una acción que ha provocado el aplauso de leyendas como Kevin Garnett o Dwyane Wade y que ha dejado sin palabras al locutor del partido. Edwards, cuyo salto vertical alcanza los 104 centímetros, recibe en carrera y salta desde un poco más adelante de la línea de tiros libres. Le da igual. Como le da igual que delante estuviera John Collins. Edwards se lo llevó por delante -además de sacarle la falta personal- para terminar reventando el aro.
"Me da escalofríos", aseguraba el jugador de los Wolves nada más ver su acción repetida al finalizar el choque. Vacilón y orgulloso de su acción, aseguró que le iba a regalar su camiseta a su rival, cuando un niño de la grada se la pidió al finalizar el encuentro. Un jugador diferente que ha hecho de la confianza en sí mismo y sus posibilidades su principal virtud.
"La liga debe estar lista para Anthony Edwards. Esta es la liga de Edwards ahora, el nuevo MJ. Ese chico se parece a Michael Jordan
Exjugador de la NBAUn jugador al que por sus vuelos y sus acciones espectaculares muchos han empezado a comparar con Michael Jordan. Palabras mayores. Pero es que no sólo tiene a su favor los muelles de sus piernas, sino también una personalidad que casa con la que tenía el '23'. Un jugador sin miedo a nada ni a nadie y que cuando está en la cancha piensa que no hay nadie mejor que él mientras no se demuestre lo contrario.
"La liga debe estar lista para Anthony Edwards. Esta es la liga de Edwards ahora, el nuevo MJ. Ese chico se parece a Michael Jordan", comentaba Nick Young, exjugador de la NBA, en un directo de Instagram en su cuenta personal. No es el único que ha decidido comparar al mítico '23' de los Bulls con el joven jugador de Atlanta. También Patrick Beverley, una de las personalidades más polémicas de la NBA, ha destacado el potencial de Edwards.

"Si digo esto, creo que todos me diréis que estoy loco y que pondré mucha presión en el chico. Pero, le dije, 'Tío, tienes una oportunidad. Una oportunidad de ser Michael Jordan hermano. La tienes, la tienes'", explicaba el exjugador de Philadelphia 76ers, entre otros equipos, en el podcast de JJ Redick hace más de un año (marzo de 2022). Incluso Tim McMahon, periodista de ESPN, reveló en 'The Hoop Colective', que un ojeador de la NBA confesó que Edwards "va a ser el próximo Michael Jordan".
Un Jordan que viajó expresamente hasta Atlanta antes del draft de 2020 para ver en persona al jugador y sopesar la opción de escogerle con el número 3 que tenían esa temporada los Charlotte Hornets. No llegó a 'caer tan bajo'. Los Minnesota Timberwolves no dejaron pasar la oportunidad de llevarse al talentoso jugador de Georgia en su primera elección. Y parece que no se equivocaron.
La tragedia como gasolina
Edwards ha ido respondiendo a las expectativas temporada tras temporada. Lo ha hecho gracias a su físico, pero también a su talento y a una extraordinaria ética de trabajo. Un espíritu y unas ganas por mejorar cada día que convirtió en su refugio particular ante la desgracia que le ha acompañado desde que era niño. 'Ant Man', como se le conoce gracias al apodo que le puso un padre que apenas ha estado presente en su vida, ha tenido que superar numerosos baches hasta llegar a la meta de la NBA. Y lo ha hecho como lo hacen los grandes: a base de sudor y lágrimas.
Edwards comenzó batiéndose el cobre con sus hermanos en el patio trasero de la casa de su abuela en Atlanta, Georgia. Allí alternaba las espirales que le lanzaba su hermano con el balón ovalado con las canastas que compartía con su hermana. Y allí comenzó a fraguarse una relación que se convertiría en el sostén fundamental de Edwards cuando en 2015 la desgracia golpeó a su familia.
Anthony Edwards. Youth football. https://t.co/wOoiH4slnL pic.twitter.com/femZkTcvEG
— Honest☘️Larry (@HonestLarry1) November 18, 2020
En apenas ocho meses su madre Yvette y su abuela Shirley fallecieron víctimas del cáncer y dejaron a un Anthony adolescente completamente bloqueado, sin saber cómo seguir con su vida. Fueron sus dos hermanos los que le hicieron continuar, los que le hicieron ver que tenía un talento especial para los deportes y que podía honrar a sus seres queridos siendo el mejor en la cancha o en el césped. Edwards se transformó en una fiera competitiva. Cogió el número 5 (en honor a su madre y a su abuela que fallecieron en el quinto día de mes) y trabajó día y noche por mejorar en su juego. "Perder a mi madre fue muy duro. Y mi abuela era nuestra columna vertebral. Hacía todo por nosotros. Pagaba nuestras facturas cuando no teníamos dinero y me dijo que siempre sonriera, pasara lo que pasara", recordaba años después.
"Perder a mi madre fue muy duro. Y mi abuela era nuestra columna vertebral. Hacía todo por nosotros. Pagaba nuestras facturas cuando no teníamos dinero"
Esas dos figuras, su madre y su abuela, fueron fundamentales para que Edwards llegara a la NBA y eligiera el baloncesto por delante del fútbol. Considerado el mejor running back infantil del país, para Edwards el baloncesto es un trabajo, porque su verdadera pasión sigue siendo el fútbol americano. De hecho sigue aspirando a ser el primer deportista en compaginar NBA y NFL. "Creo que podría serlo", comentaba hace poco un jugador que es todo determinación, como demuestra cada vez que se come el aro como hizo ante los Jazz.