No ha jugado al baloncesto en su vida, pero ha engañado a toda la NBA

La picaresca ha cruzado el Atlántico y ha llegado a Estados Unidos. Y más concretamente al draft de la NBA donde sólo se hablaba de Victor Wembanyama hasta que un nombre desconocido empezó a hacerse viral y a copar titulares en las noticias. Se trata de Jordan Haber, un estudiante de derecho que nunca ha jugado al baloncesto y que esta noche puede llegar a la mejor liga del mundo.

Haber estará pendiente del televisor. Cuenta con nulas posibilidades de oír su nombre en boca de Adam Silver, comisionado de la NBA, o de Mark Tatum, vicecomisionado de la liga. Pero da igual. Abogado de profesión, Haber ya ha hecho historia en la NBA con el mero hecho de haberse colado en uno de los drafts más mediáticos que se recuerdan y que tendrá parte de la atención centrada en este creador de contenido relacionado con Star Wars en Tik Tok.

El aburrimiento es la razón por la que Haber está hoy entre Wembanyama, Henderson, Miller o Nnaji. Durante su etapa como estudiante de derecho en la Universidad de Florida, Haber se dedicó a estudiar el convenio colectivo que regula la NBA y entre línea y línea, en la página 273, encontró un resquicio legal por el que colar su nombre en el draft.

Tras horas y horas de lectura Haber se dio cuenta de que cumplía perfectamente con los requisitos para inscribir su nombre en una de las jornadas más importantes de la temporada en la NBA: superaba los 19 años y estaba recién graduado en la universidad. Fue entonces cuando comenzó su camino hacia la mejor liga del mundo.

Primero se reunió con sus amigos y se apostó con ellos que sería capaz de entrar en el draft de la NBA. Dicho y hecho. Haber mandó un correo electrónico a la NBA solicitando entrar y recibió como respuesta un formulario que tenía que rellenar. "Tienes tres o cuatro meses para hacerlo", confesaba el abogado de Florida en el vídeo de Tik Tok en el que anuncia su candidatura. "Ahora ya soy Jordan Haber miembro de la clase del draft de 2023".

En un primer momento, tras enviar el formulario a la NBA, no recibió respuesta de la liga, así que lo volvió a intentar enviando otro mail. La liga le respondió que su nombre no estaba entre los 300 que la NBA certificaba como jugadores NCAA o en Europa. Él estaba en la lista de 18 'jugadores' que la liga no tenía bajo el radar.

Haber se ha colado en la lista de 318 nombres que pueden ser elegidos esta misma noche, aunque siendo realistas sus posibilidades son escasas. Da igual. Haber ya ha hecho el viaje de su vida. De hecho ya está en Nueva York para vivir la ceremonia 'in situ' y grabar un documental con todo lo vivido en los últimos meses. Y todo sin haber jugado al baloncesto en toda su vida.