Kevin Durant, entre polémicas y récords: décimo anotador histórico mientras se enzarza con Adidas

Faltaba menos de un minuto en Phoenix para llegar al descanso en el duelo entre los Nuggets y los Suns cuando Kevin Durant cogió el balón pisando la línea de triple. Defendido por Reggie Jackson, KD decidió atacar la superioridad física. La ayuda de Nikola Jokić llegó tarde, el base de los Nuggets acabó en el suelo y como casi siempre, el balón que salió de las manos de Kevin Durant finalizó su viaje entrando por el aro. Eran sus puntos 16 en la primera parte, que acabó con 22, cifra que le servía para superar a Moses Malone en la lista de máximos anotadores históricos de la NBA y colarse en el top-10. Un lugar donde iba a llegar, tarde o temprano.

Por delante, además de LeBron James o Kareem Abdul-Jabbar, protagonistas el curso pasado con el cambio de líder, Karl Malone, Kobe Bryant y Michael Jordan cerrando las cinco primeras posiciones. Les siguen Dirk Nowitzki, Wilt Chamberlain, Shaquille O'Neal y Carmelo Anthony, justo delante de Durant. De hecho, tanto Shaq como Melo, ambos retirados, serán víctimas de Durantula esta temporada. Porque tras el partido, la diferencia es de 866 con Carmelo y 1173 con Shaquille O'Neal. Al promedio al que está anotando esta temporada, por encima de los 30, son unos 28 partidos para superar a Anthony y algo más de 40 para llegar a O'Neal. Un trámite para Kevin Durant que está en su segunda campaña más anotadora pese a tener 35 años.

Es el quinto jugador con un mayor promedio anotador en la historia, solo por detrás de Michael Jordan (30.12), Wilt Chamberlain (30.07), los dos únicos por encima de los 30, Joel Embiid (27.39) y Elgin Baylor (27.36). Ni Kobe Bryant, ni Kareem Abdul-Jabbar, ni Karl Malone, algunos de los grandes anotadores de la historia. Y es que muy pocos han conseguido meter puntos al nivel de KD. Cuatro veces ha liderado la liga en puntos, la última en 2014 todavía en Oklahoma, aunque en sus últimos años ha promediado casi 30 puntos, superando con mucha diferencia, su época en Golden State (25.8) o sus últimos cuatro años en Oklahoma. Tanto en Brooklyn como en Phoenix, ambos conjuntos en los últimos cuatro años, ha superado los 29 en promedio. 

Y eso que lo hizo después de una lesión que podría haber acabado con su carrera. Porque al final los problemas físicos son el único motivo por el cual Durant ha tardado tanto tiempo en llegar al top-10. En 2015 solo pudo jugar 27 partidos, se perdió la campaña 2020 al completo tras caer lesionado en las finales de 2019 que Golden State perdió ante Toronto y desde entonces promedia 45 partidos por temporada. Las lesiones han alargado una espera que el destino tenía reservada para Kevin Durant, siempre en la conversación por ser el mejor anotador de la historia: por capacidad, recursos, físico y porcentajes. Dos veces acabó la temporada con el famoso 50-40-90, 50% en tiros, 40% en triples y 90% en tiros libres. La primera en 2013, la última el año pasado. 

LeBron y Durant eran hasta la semana pasada los únicos jugadores en activo en el top-25, aunque James Harden se coló tras adelantar a Pat Ewing, a quien espera adelantar Russell Westbrook a corto plazo. Steph Curry, DeMar DeRozan y Chris Paul son todos top-50, con Damian Lillard siguiente en la lista a 220 puntos de entrar a los cincuenta mejores anotadores de siempre. Aunque ninguno de ellos como Kevin Durant, desde anoche, top-10.

La noche de récord de Kevin Durant no pudo terminar con felicidad completa tras la derrota cosechada en Denver. Un tropiezo que llegó horas después de que el alero se viera envuelto en una nueva polémica en redes sociales. Todo vino cuando a Anthony Edwards, jugador de los Minnesota Timberwolves, le preguntaron en un acto con Adidas qué jugador le gustaría ver con su línea de zapatillas y respondió que Kevin Durant.

El alero de los Suns se desmarcó en X, la red antes conocida como Twitter, con un cortante "nunca me veréis poner un dedo en esas zapatillas". Una respuesta inesperada que provocó la reacción de la marca alemana con un tuit en el que afirmaba que a Durant le quedaba poco para la retirada. El mensaje fue borrado poco después por la cuenta oficial de la marca, que afirmó que esas palabras querían haberlas colgado en su burner account, un perfil anónimo para expresarse libremente, y que es una indirecta más a Durant, que ha sido acusado varias veces de tener varios de estos perfiles.