Luces y sombras en el debut de Victor Wembanyama en la Liga de Verano

Llegó el día que la NBA esperó por algo más de dos años. Por fin Victor Wembanyama se vistió de corto con una equipación NBA, por fin la estrella francesa debutó en la mejor liga del mundo. Lo hizo en la siempre interesante liga de verano, en Las Vegas, y en sus primeros minutos dejó luces y sombras. La ilusión de lo que puede llegar a ser, muestras de potencial en defensa y generación y una noche aciaga de cara al aro. Los Spurs se llevaron el partido 76-68 en la primera victoria del conjunto texano en la liga de verano.

Y por primera vez en mucho tiempo, la expectativa superó a la realidad. Porque la locura que envuelve a Wembanyama fue mucho más que su actuación en el primer partido de la Summer League de San Antonio. Al francés se le notaron los nueve meses de competición con Metropolitans 92, al contrario que la mayoría de compañeros o rivales, que llevan desde marzo o abril de vacaciones. El jugador terminó el partido con nueve puntos, con 2/13 en tiros de campo y 1/6 en triples, además de ocho rebotes, cinco tapones y tres asistencias. Y más allá de los números, Wembanyama desprende sensaciones que muy pocos jugadores han dejado en una pista.

Primero lo positivo. Dejó perlas para analizar, como su impacto en defensa, o la capacidad para generar para sus compañeros. Hizo de ancla en su propio aro y de base en el campo de ataque. Porque el potencial de Wembanyama no es por su talento, sino por las aptitudes que maneja pese a medir 226 centímetros. Se le vio en su primera noche cogiendo el rebote y lanzando el ataque, creando para sus compañeros y rompiendo a rivales desde el exterior para generar ventajas. La capacidad de crear ventajas tras bote ha quedado latente desde su primer partido, como ver a Rudy Gobert manejar el balón como si fuera Kevin Durant, algo hipnótico.

La peor parte, su carta de tiro. Falló los dos primeros, y no fue hasta su tercer tiro que metió sus primeros dos puntos, con adicional. Llegó a estar en 1/9 antes de conseguir anotar su primer triple, también con falta personal recibida para acabar con nueve puntos. Por detrás de Julian Champagne, que volvió a robar el show para San Antonio, Malaki Braham, Blake Wesley y Dominick Barlow, todos ellos con experiencia en la NBA el curso pasado. Habrá un proceso de aclimatación, también en lo físico. En más de una ocasión, Brandon Miller, pick #2 del último draft y rival la noche de ayer, consiguió frenarle en la pintura. 

Las entradas para el primer día de la Summer League, para ver el debut de Wemby, se agotaron en lo que fue el quinto día en la historia de la competición en la que se llenó el pabellón al completo. Las más de 17000 personas que llenaron el Thomas & Mack Center pagaron en promedio 96 dólares, diez más que para el debut de Zion Williamson en 2019. Para el día de ayer solo quedaban entradas a partir de $186, con las de pie de pista a más de $600. La fiebre por ver el debut de Wembanyama es tal que las entradas para el domingo, con todavía la duda de si jugará o no, también se han agotado.