El mercado de la NBA no solo es despiadado con Doncic: ¡PJ Tucker pasa por cuatro equipos en cinco días!
El jugador, ahora en los Raptors, ha pasado por Clippers, Jazz y Heat en menos de una semana.
![PJ Tucker./](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202502/06/media/cortadas/pj-tucker-RlqS82HWTXiHlU7jJYCvJ7I-1200x648@Relevo.jpg)
En la NBA te despiertas en California y puedes dormir en Nueva York. Y no, no por su alocado calendario de 82 partidos por franquicia. El mercado de traspasos es voraz, despiadado, como Dennis Schroder lo ha calificado una "esclavitud moderna". En resumidas cuentas, un jugador puede ser enviado a otro lugar de la noche a la mañana, sin su consentimiento e incluso sin que él lo supiera. En más de una ocasión, las estrellas de la liga han reconocido haberse enterado de su nuevo destino por Shams Charania o, en otros tiempos, por Wojnarowski. Entre todas esas variables, hay casos y casos, pero el PJ Tucker ha roto todos los límites de la lógica.
PJ Tucker es el clásico jugador trotamundos, que pasa por decenas de equipos y cuyo rol está definido a la perfección: complemento para una franquicia ganadora, con gran defensa y un buen tiro de tres. Por eso, no es de extrañar que los equipos se muevan en busca de hacerse con sus servicios en mitad de temporada. Precisamente, tampoco es el estilo de jugador que un núcleo de la parte baja de la clasificación esté interesado. Su salario, asequible, pero lo suficientemente cuantioso para que tenga un valor en cualquier movimiento, también ayuda a que se mueva de lado a lado. Esta temporada cobra 11.539.000 dólares y no tiene contrato garantizado.
The Raptors are trading Davion Mitchell to the Heat for PJ Tucker, a second-round pick and cash, per @ShamsCharania pic.twitter.com/GS3Np0LLcO
— Bleacher Report (@BleacherReport) February 6, 2025
Efectivamente, tiene todas las condiciones para moverse de una forma continua, si bien en esta ocasión conviene reflexionar sobre la repercusión que puede tener en un jugador y persona (cabe no olvidar este matiz) un trote como al que se ha visto sometido en los últimos días. PJ Tucker comenzó la temporada en Los Ángeles Clippers hasta que el pasado 1 de febrero fue enviado a Utah Jazz, un destino para nada acorde con sus características como jugador. Salió junto a Mo Bamba, una segunda ronda y cash. A cambio, llegaron a California Eubanks y Patty Mills.
Tras unos días de tregua, PJ Tucker ha formado parte del traspaso gigante que ha implicado hasta cuatro equipos diferentes. Lo más sonado es Jimmy Butler en los Warriors. A Detroit Pistons llegaron Lindy Waters III y Josh Richardson. Los Jazz, franquicia del protagonista de estas líneas, se llevaron a Schroder y una segunda ronda. Miami, por último, se hizo con Kyle Anderson, Andrew Wiggins, una primera ronda y el mencionado Tucker.
De nuevo, el destino llevó a PJ Tucker a un nuevo hogar en el que no pegaba ni con cola. Los Heat no aspiran al anillo y tras perder a Butler iniciarán un proceso de readaptación a la competición en la que el alero no sería parte fundamental. Así que sí, en la mañana de este 6 de febrero en Estados Unidos, la franquicia de Florida se ha hecho con Davion Mitchell mandando a Toronto Raptors al implicado en cuestión y una segunda ronda.
Hace tan solo una semana, PJ Tucker vivía en California. Creyó que se debería mudar a Utah, pero acabó en Miami y ahora cierra, parece que por fin, su camino en Canadá. Primero debía recorrer 1.108 kilómetros, un cambio de destino relativamente aceptable dentro de los Estados Unidos. Después, ya sí una distancia significativa de 4.085 kilómetros hasta llegar a Miami. Más los 2.401 entre el South Beach y Toronto. Un total de 7.594 kilómetros en cinco días por cambiar de ubicación laboral y en tres viajes distintos.
Si vamos un paso más allá, ha pasado de los 15 grados aproximadamente que hace estos días en California, a los 9 de Utah, a los 25 de Miami, a los -7 de mínima en Toronto.
Más allá de esta anécdota, un jugador que también tiene su familia y sus hijos acepta las normas del juego con optimismo, pero todo tiene un límite. Son cuatro destinos diferentes en cinco días, con todo lo que eso supone. Aún, incluso, podría ser cortado por los Raptors y firmar libre, aunque esto no parece estar sobre la mesa. Por cierto, tampoco es que pegue especialmente en un equipo que ni siquiera está en puestos de Play-in en la Conferencia Este, aunque se ha reforzado con un jugador de élite como Brandon Ingram.
Un mercado diferente, a todas luces, para lo bueno y para lo malo. Desde el punto de vista del espectáculo, es incuestionable. ¿Pero y qué hacemos con los demás? Entre tantas variables, Dennis Schroder puso luz: "Es esclavitud moderna".