El mercado más frío de la NBA pese a uno de los mayores traspasos de la historia
Algunas caras importantes de la liga empezarán la temporada vistiendo una camiseta diferente al curso pasado.
Cuando una hora antes del inicio de la agencia libre, diversos periodistas filtraban que Kevin Durant y Kyrie Irving querían salir de Brooklyn, saltó la alarma. No solo por el posible traspaso de dos estrellas de la NBA sino por la opción de que el resto de la liga detuviera cualquier movimiento, traspaso o intercambio, todos a la espera de Kevin Durant. Al final, la vida siguió su curso y el mercado de traspasos fue relativamente normal.
Tres All Star cambiaron de franquicia y otros tantos nombres importantes tienen un nuevo destino. Piezas que, con un periodo de adaptación de por medio, pueden ser clave entre equipos candidatos al anillo, luchando por plazas altas de playoffs o, por qué no, recuperar el camino a la senda de la victoria, como el caso de Minnesota o Portland. Y como siempre que hay compradores, hay vendedores.
El gran movimiento del verano fue el de Rudy Gobert. Para conseguir al tres veces mejor defensor de la NBA, los Wolves tuvieron que enviar cuatro primeras rondas y cinco jugadores a Utah, además de la opción de intercambiar otra elección en 2025. En total, 10 piezas a cambio de un jugador. Uno de los mayores traspasos de la historia de la NBA por tamaño y cantidad de activos, sobre todo porque el retorno es solo un jugador.
Para que Rudy Gobert llegase a los Wolves, Minnesota tuvo que dar cinco jugadores y cuatro primeras rondas del draft
Y no fue la única estrella que los Jazz se sacaron de encima. Si Gobert fue el primer día de la agencia libre, el caso de Donovan Mitchell fue el rumor del verano, y cuando parecía que los Knicks lo tenían cerrado... lo mandaron a Cleveland. Los Cavaliers consiguieron a Mitchell por otras cinco rondas (dos son intercambios) y tres jugadores, entre ellos Lauri Markkanen, uno de los mejores del pasado Eurobasket. Sumando ambos movimientos, los Jazz han acumulado siete primeras rondas, ocho jugadores y tres intercambios a cambio de dos jugadores.
El tercer All Star, Dejounte Murray. El base cambió San Antonio por Atlanta incluso antes de que se abriera la agencia libre a cambio de tres primeras rondas y una opción de intercambio, más Danilo Gallinari (al que acabaron cortando). No es casualidad que tanto Utah como San Antonio son dos de los favoritos para conseguir el peor récord de la temporada y estar en la carrera por Victor Wembanyama.
Investigaciones y sospechas
Con Gobert, Mitchell y Murray la lista de estrellas que cambiaron de equipo llegaba a su fin. Hubo otros nombres interesantes, como el traspaso de Jerami Grant a Portland antes de acabar la temporada pasada, la llegada de Christian Wood a Dallas, donde acompañará a Luka Doncic o Malcolm Brogdon a Boston. Jugadores para competir en el presente que estaban en proyectos de futuro como Detroit, Houston o Indiana. Y entre los jugadores que finalizaron contrato, misma situación.
Casi todos los agentes libres renovaron o extendieron con la misma franquicia. Bradley Beal, Zach LaVine, DeAndre Ayton o Anfernee Simons, por citar cuatro ejemplos atractivos, volverán a vestir la misma camiseta que lucieron en 2022. El gran nombre entre los que cambió de equipo es el de Jalen Brunson: la joya del mercado de agentes libres. El base firmó por los Knicks para sorpresa de casi nadie. Ni de la propia NBA.
El acuerdo se conocía (no de manera oficial) semanas antes del periodo de negociación e incluso el padre de Brunson fue contratado como entrenador asistente en los Knicks justo antes del mercado de traspasos. Fue tan sospechoso que la NBA anunció una investigación sobre la posibilidad de haber incumplido las ventanas de negociación que la liga permite. Y no es la única que van a escrutar hasta encontrar la verdad.
El otro movimiento, que se puede considerar uno de los mejores entre equipos candidatos al anillo, es la firma de PJ Tucker por Philadelphia. Tucker cambió Miami por Philly, pero para ello necesitaban que Harden redujera su salario. Todos esos acuerdos más la firma de Daniel Hause fueron considerados sospechosos por la liga, que está todavía analizando el caso a la espera de cerrar la investigación. Porque ha sido un verano tranquilo, lo bueno empieza en tres días.