BALONMANO

Un suceso surrealista con unas baldosas obliga a retrasar el comienzo de la Liga Europea de balonmano

El área de seis metros medía, en realidad, cerca de siete metros. El incidente se resolvió en un tiempo prudencial.

Operarios recolocan las baldosas./X/ErichAschi
Operarios recolocan las baldosas. X/ErichAschi
Daniel Domínguez

Daniel Domínguez

La Liga Europea de balonmano comenzó este martes, pero no todo estaba listo para ello. La segunda competición continental, que cuenta con el REBI Balonmano Cuenca y el Balonmano Ciudad de Logroño como representantes españoles, vivió un episodio surrealista en el encuentro del Grupo B entre el HC Kriens-Luzern suizo y el TSV Hannover-Burgdorf alemán.

Su comienzo, fijado para las 18:45 horas, se demoró más de un cuarto de hora por un problema con las dimensiones de la pista. Concretamente, con las del área de seis metros... que de seis metros tenía poco. Las baldosas se colocaron de una manera que el área había quedado a 6,90 metros, tal y como informó Sport Bild.

El error motivó el retraso del saque inicial, puesto que fueron los propios jugadores quienes se percataron de dicha incidencia durante la realización de los pertinentes ejercicios de calentamiento. Vincent Büchner y Hannes Feise, extremos del conjunto teutón, alertaron de ello al director deportivo de la entidad, que lo trasladó al delegado que la EHF había designado.

Así pues, el suelo, formado por baldosas individuales, tuvo que ser recolocado por varios operarios, que resolvieron el incidente en un tiempo prudencial. El partido, finalmente, transcurrió con normalidad y finalizó con victoria por 23-31 del Hannover-Burgdorf, que confirmó su favoritismo pese a la presencia de Andy Schmid en el Kriens. A sus 40 años, el central suizo anotó ocho de los goles de su equipo. Un jugador con un pasado brillante en la Bundesliga, en las filas del Rhein-Neckar Löwen, al obtener el galardón a mejor jugador de la liga durante cinco temporadas seguidas (entre 2013 y 2018).

"Me pareció un poco gracioso desde el principio", cuenta en declaraciones a Sport Bild un Büchner que detalla en qué momento se dio cuenta: "Hannes Feise y yo nos decíamos: 'aquí pasa algo. ¿Por qué sólo tenemos un paso para el salto y por qué la portería está más lejos de lo normal?'". Una situación insólita que quedará como una anécdota graciosa en el estreno de la temporada en la European League.