Emil Nielsen, el guardaespaldas del Barcelona: "Tenemos la mejor portería del mundo"

Su envergadura llama la atención de los espectadores, pero más allá de sus 195 cm y 120 kg, Emil Nielsen (Aarhus, 1997) es uno de los porteros más versátiles del mundo. Con una intuición sobresaliente, una colocación notable y unos reflejos felinos, el danés forma junto al toledano Gonzalo Pérez de Vargas una dupla temida por toda Europa.

Tras pasar por el Aarhus y el Skjern en Dinamarca, el arquero firmó tres años mágicos en el Nantes francés que le abrieron las puertas del equipo más laureado del planeta. El FC Barcelona acertó de pleno con su fichaje. Ahora los blaugrana disfrutan con un ganador nato que sueña con una temporada de cine en 2024: Champions, Euro y Juegos.

Su actuación extraordinaria en el derbi contra Granollers, 23 paradas y un 50% de efectividad, ha dado mucho que hablar en el mundo del balonmano. ¿Está en el mejor momento de forma de su carrera?

Creo que sí. He empezado bien la temporada, estoy entrenando bien y me han ayudado mucho. El partido contra Granollers fue increíble por parte de todos, de la defensa y en lo personal. Estoy muy feliz.

¿Cómo es posible moverse tan rápido con tanta envergadura?

No lo sé, entrenamos todos los días para mejorar. Ahora mismo estoy en las mejores condiciones posibles en Barcelona, eso también ayuda mucho. Doy el máximo cada día cuando voy a trabajar. Por eso estoy donde estoy en la actualidad.

¿Qué consejos le da Tomas Svensson en los entrenamientos?

Trabajamos a diario para ser mejores. Es el proceso lo que vale. Tengo la ayuda de Tomas y del entrenador principal, hay una gran colaboración. Es una combinación de muchos factores, no podría mencionar una sola faceta, cada día cuenta. Esa es la receta.

Mucha gente dice que junto a Gonzalo Pérez de Vargas forma la mejor pareja de porteros del mundo. ¿Qué piensa al escucharlo?

Estoy totalmente de acuerdo con que tenemos la mejor portería del mundo. Somos grandes porteros. Llevo aquí un año y tres meses y no recuerdo un partido en el que ambos estuviésemos mal. Lo estamos haciendo muy bien y, una vez más lo digo, con una gran colaboración. Rendimos muy bien juntos, Gonzalo es un tipo genial.

Y tienen estilos muy diferentes.

Como bien dice, somos completamente diferentes y eso hace que sea muy difícil para los rivales. Somos dos perfiles muy distintos y complementarios, que funcionamos muy bien juntos.

Le toca bailar con Pérez de Vargas en su club y con Niklas Landin en la selección danesa. ¿Cómo logra manejar esa presión?

Es una competencia muy sana tanto en el Barça como en la selección. Tengo que dar el máximo cada día para poder jugar, de otra manera estaría en el banquillo. Quizá para otro portero sería muy duro mentalmente, pero para mí es positivo. Por supuesto hay decepciones, fue duro no estar el año pasado en el equipo nacional, pero es parte del camino y espero estar ahí la próxima vez.

Llega 2024, el año mágico para el balonmano con Champions, Euro en Alemania y Juegos de París... ¿Con qué sueña?

Quiero hacer todo el camino con el Barça y la selección, somos capaces de ganarlo todo. Mi objetivo es, por supuesto, ganar la Champions League, ganar el Campeonato de Europa y ganar los Juegos. Lo primero es tratar de ir a esos torneos y lo segundo ganarlos todos. Y somos capaces. Formo parte de dos de los mejores equipos del mundo y estoy muy agradecido por ello.

¿Piensa que el Barça es favorito para la Champions? Siempre se habla de cambios, pero al final el Barcelona llega.

Quizá no seamos el gran favorito, pero sí hay cuatro clubes que estamos en disposición de ganarla. Nosotros estamos ahí y este año podemos conquistarla, por supuesto. Creo en mi equipo.

¿Qué les dice a los que piensan que usted es el próximo Arpad Sterbik?

Es una comparación muy bonita. Crecí viendo a Arpad y era uno de mis porteros favoritos. Es muy amable de parte de la gente que dice eso. Me encantaría llegar al nivel que alcanzó Arpad. Estoy triste por no haber jugado nunca contra él, porque era uno de mis ídolos de niño.

¿Qué más ídolos tenía?

Kasper Hvid, naturalmente. Estaba en su máximo nivel cuando yo empecé a ver balonmano y jugaba en el Barcelona.

¿Es verdad que empezó a los 10 años a tomarse en serio el balonmano?

Sí, más o menos, como muchos niños en Dinamarca. Mis amigos jugaban al balonmano y era algo natural empezar con este deporte.

Y 16 años más tarde está en el club más laureado de su deporte. ¿Cómo está integrado en Barcelona?

Me encanta. Es una gran ciudad. A nivel deportivo, puedes sentir la pasión cuando un partido se acerca, especialmente con el fútbol. Es muy grande estar aquí: la mejor ciudad de Europa con un gran equipo de balonmano.

¿Todos sus amigos daneses querrán ir a visitarlo?

¡Oh! No se hace a la idea. Tenemos visitas todo el tiempo. Es genial, pero a veces son demasiadas y tenemos que decir que no. Pero me quedan tres años más, así que lo mejor está por llegar.

¿Qué piensa del ambiente del Palau?

Es increíble, especialmente en los partidos de Champions League. Es obvio que en los partidos de ASOBAL no hay tanta gente, pero los días de Champions, con el pabellón lleno, es impresionante.