BALONMANO

18 Hispanos, dos monstruos y un solo billete olímpico: "El debut contra Croacia es ya una final"

Ángel Fernández disecciona un Europeo temible en el que la selección española de balonmano aspira a agrandar su leyenda en la competición.

Ángel Fernández realiza un lanzamiento en un partido contra Serbia. /RECIO / EFE
Ángel Fernández realiza un lanzamiento en un partido contra Serbia. RECIO / EFE
Andrés G. Armero

Andrés G. Armero

"El primer partido contra Croacia es ya una final". Las palabras de Ángel Fernández (Astillero, Cantabria, 1988) suenan a tópico, pero no lo son en absoluto. En un Campeonato de Europa de balonmano cada punto que se pierda en la primera fase te puede dejar fuera de los cruces de semifinales. Y en este especialmente. Bienvenidos a la temible Euro de Alemania 2024.

Este viernes debuta la selección española de balonmano a las 20:30 horas en el SAP Arena de Mannheim. Encuadrada en el grupo B, el partido contra Croacia marcará el camino. Luego vendrán la Rumanía del exentrenador blaugrana Xavi Pascual (domingo 14 a las 18:00) y Austria (martes 16 a las 20:30), faenas más asequibles para los 18 soldados de Jordi Ribera.

"Contra Croacia la clave es no meternos en su juego: un balonmano lento, muy agresivo, con una defensa muy dura. Tenemos que hacer nuestro juego, más dinámico, de más cruces", explica el extremo izquierdo de la Selección, que viste la zamarra de los Hispanos desde 2015, antes de advertir: "Si no, va a ser un partido muy tosco y ellos ahí van a salir beneficiados".

Los jugadores de Francia, en su debut en el Europeo 2024. C. NEUNDORF / EFE
Los jugadores de Francia, en su debut en el Europeo 2024. C. NEUNDORF / EFE

El jugador del Limoges francés se aferra a la filosofía del "partido a partido". No en vano, "si en este tipo de torneos piensas a largo plazo, en cuatro o cinco días estás en casa". Máxime, porque, si España hace los deberes y pasa a la fase de grupos principal, le aguardarán en Colonia, a buen seguro, Francia y Alemania (pareja favorita de un grupo A en el que también están Suiza y Macedonia del Norte) y dos de las selecciones del grupo C (Islandia, Hungría, Serbia y Montenegro). De todos esos nombres saldrán dos semifinalistas.

El factor local de Alemania, con un debut para la historia ante 53.586 espectadores, puede ser un arma de doble filo. "Hay dos caras de la moneda. La A, que les afecte positivamente, con un arbitraje un poco casero, que seguro que pasará. Llevan bastantes años sin hacer buenas actuaciones y creo que en este campeonato pueden hacer un gran papel", introduce el jugador cántabro. "Y la B, el punto negativo, lo que le ocurrió a Hungría hace dos años cuando organizó el Europeo y no pasó de grupos. Esa presión también te puede jugar en contra. Veremos".

Francia será el rival a batir en la parte del cuadro de España. En la otra, la todopoderosa Dinamarca , tres oros en los últimos tres mundiales, tendrá que lidiar con Suecia y Noruega. Ángel Fernández analiza a los dos monstruos del torneo: "Hay dos selecciones que están un paso por encima de las demás: Francia y Dinamarca. Pero los que hemos estado en las cuatro últimas finales del Europeo somos nosotros, y Suecia en dos; y no estas dos selecciones. ¿Favoritas? No son favoritas, están un paso por encima, pero esta competición es muy dura y en cualquier momento cualquiera se puede ir para casa".

España ya es historia de la competición con un póquer correlativo de presencias en finales que nadie había alcanzado. En Alemania sueña con llegar a la quinta consecutiva, que podría otorgarles la única plaza olímpica en juego. Para conquistarla, las cuentas son sencillas: o ganar el torneo o ser el mejor equipo tras Dinamarca y Francia, que ya tienen billete en calidad de vigente campeona del mundo y anfitriona respectivamente. Si no, habría que esperar al preolímpico.

Los 18 Hispanos que se alistan con Jordi Ribera están encantados de la continuidad de su entrenador al frente del proyecto. "Es lo que nos esperábamos todos, ha hecho una labor increíble, no sólo con la Selección, sino todo lo que ha creado en categorías inferiores, es de admirar. Todo lo que no hubiese sido esa renovación nos habría sorprendido a todos", se sincera Ángel Fernández.

El grupo está muy cómodo porque Ribera "es un hombre muy metódico, pero que a la vez nos deja bastante libertad a la hora de jugar". Para el cántabro, "una de las claves de este equipo reside en que Jordi sabe marcar un método, una técnico-táctica para los jugadores, pero, dentro de eso, te da libertad para ser tú mismo". Que no le corten las alas a Ángel y al resto de los Hispanos. Este Europeo son palabras mayores.