Ibai Llanos revienta récords con la Velada del Año en el Metropolitano
La Velada del Año 3 batió el récord de usuarios que había marcado su antecesora. En el Cívitas Metropolitano se reunieron 70.000 personas. El boxeo no lograba unos datos así desde hace casi un siglo.

La atmósfera que rodeó al Cívitas Metropolitano durante este sábado fue especial. Influencers convertidos en boxeadores, cantantes de renombre… nada importó. El hombre que más aplausos recibió fue el ideólogo de la Velada del Año, Ibai Llanos. El streamer vasco ha conseguido incluir en el imaginario de todos los jóvenes hispanohablantes un evento que va mucho mas allá de cualquier ámbito.
Todos los jóvenes quieren ver o estar en la Velada del Año y los datos refrendaron ese sentimiento. En el Cívitas Metropolitano hubo por encima de 70.000 personas, destacando que entre viernes y sábado se añadieron a última hora 1.900 entradas que volaron en segundos. En cuanto a internet, se rompió el máximo de espectadores en Twitch (3.356.074), incluso provocó la caída momentánea de la plataforma. La cifra se fue mejorando hasta fijarla en los 3.449.999 concurrentes.
En un mundo postpandemia, en 2021, Ibai decidió organizar una velada de boxeo de streamers y Youtubers, al igual que hacían los creadores de contenido anglosajones, después de que uno de sus mejores amigos, Reven, le propusiese hacerlo para 'ajustar' cuentas con El Millor. En tres meses armó todo y fue un bombazo. En 2022, ya con público, se batieron récords, pero nada comparable con la Velada del Año 3. "Será difícil de igualar en la 4", comentaba el público al abandonar el Cívitas Metropolitano. El hype es real y tan sólo unos minutos después de acabar un evento ya están pensando en el siguiente.

Estopa, María Becerra, Eladio Carrión, Rosario, Milo J, Nicki Nicole, Duki, Feid, Quevedo y Ozuna fueron los artistas que acudieron al show. Su sola presencia ya justificaba cualquier entrada pagada, pero lo principal no era la música, era el boxeo. Un deporte denostado durante muchos años contra el que ya no hay estigmas. Por encima de 70.000 personas vibraron con cada golpe, con cada finta… el problema de la industria en nuestro país no está en los estigmas.
Sergio Maravilla Martínez, Joana Pastrana, Samuel Carmona, Jonathan Maravilla Alonso o Sandor Martín (formando parte de la organización) fueron algunos de los ilustres que estuvieron en las esquinas de los creadores de contenido. "Gracias por el apoyo y gracias a mi entrenadora, Joana Pastrana. Yo no soy campeona de nada. Ella es campeona del mundo y nunca pudo cumplir su sueño de pelear en un estadio como este. El aplauso es para ella", apuntó Marina Rivers tras su victoria.
El respeto de los recién llegados al deporte y su estructura es máximo. Su ayuda permitirá llenar gimnasios, algo clave para el crecimiento y para que se pueda recuperar el lustre de antaño. En la década de los 70 el Palacio de los Deportes de Madrid se llenaba con facilidad, pero para recordar algo igual a los de este sábado hay que retroceder al combate entre Primo Carnera y Paulino Uzcudeun, quienes congregaron 70.000 personas en el Estadio Olímpico de Montjuic un 30 de noviembre de 1930.
En cuanto al espectáculo deportivo, lo previsto. Cuatro meses de entrenamiento dan para lo que dan y aunque todos los participantes dieron lo mejor que tenían se notaba que eran novatos. Aún así lo disfrutaron al máximo, de eso se trata. Abraham Mateo derrotó, en el combate de apertura, a Ampeter. Un pleito muy igualado que se decidió por pequeños detalles. Marina Rivers venció a Samy Rivers. Fue el combate de la noche. La mexicana salió a por todas, quiso morir en la raya como es costumbre en su país y la española fue capaz de frenarla en otro duelo muy especial. Mención especial al público, ya que el duelo se convirtió en un España vs México y el aliento de los fans fue espectacular.
Muy duro fue el enfrentamiento entre Luzu y Fernanfloo, quienes olvidaron su amistad y se golpearon con todo. La igualdad fue máxima. Dos jueces dieron nulo y el tercero le otorgó el triunfo al salvadoreño Fernanfloo. En casi cuatro horas de evento (sin contar alfombra roja) hubo cuatro actuaciones musicales y tres combates. El 'modo noche' que avisó Ibai estaba a punto de llegar.
La caída del sol provocó un pequeño parón en la acción. Desde La Velada del Año querían disfrutar del juego de luces y fuego, el cual aderezó el público con sus móviles. Antes del cuarto combate hubo sorpresa. Sin anunciar aparecieron Milo J, Nicki Nicole y Duki, lo que dejó la adrenalina por todo lo alto. Lo mejor que podía pasar ante el combate de los dos boxeadores de mayor peso de la historia del evento. Misho Almoli y Shelao estaban cerca de los 100 kilos.
El tonelaje y el pique previo provocaron que de nuevo el Metropolitano rugiese… aunque duró poco. A Misho se le luxó el hombro izquierdo a los treinta segundos de combate y la pelea llegó hasta ahí. Una pena. El público reconoció el esfuerzo de ambos e Ibai Llanos les invitó a la Velada del Año 4. "Tienen que estar", publicó el streamer en Twitter. De desilusión, a sorpresa, ya que tras la baja de Amouranth provocó que la rival de Mayichi fuese incógnita hasta última hora. Samy Rivers pidió a Iba hacer dos combates en una noche. KSI lo había hecho en las XSeries en agosto de 2022, pero nadie se esperaba ese arrojo de la azteca.
Rivers volvió a demostrar su sangre guerrera. Tuvo dos horas para descansar y salió a cruzar golpes de la misma manera. Mayichi no se achantó, entró al intercambio, pero fue la mexicana la que conectó las mejores manos. En su segunda tentativa logró la victoria. Merecida y el público lo festejó. Su valentía fue premiada. Quedaba un combate y era otro que había despertado mucho interés. Coscu y Germán Garmendia tenían experiencia previa y salieron a matar o morir. Coscu parecía KO, pero con una derecha tocó a Garmendia, quien se fue al suelo después de cuatro golpes. El argentino se quitó el casco para festejar y dio vida a su rival. En el segundo asalto cualquiera podía caer, pero la pegada de Coscu le dio el triunfo. No pudo existir un broche mejor. Boxeo en estado puro.