Las dos vidas de Esra, la ciclista que endulza Granada: "El ciclismo es muy parecido a la pastelería"
Esra Nur Gökcek compatibiliza su actividad deportiva con la fabricación de baklavas, dulce títpico turco.
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Esra Nur Gökcek (Esmirna, 1996) se emociona al recordar a su familia. Sus lágrimas son el sinónimo perfecto de quien sale de su casa para buscar un lugar mejor donde crecer. Ella, triatleta profesional en Turquía, tuvo que salir de su entorno para cumplir sueños y dejar atrás todo y a todos. Su destino fue Granada donde encontró una vida más allá del deporte. "No tengo tiempo para nada", nos cuenta con una sonrisa al repasar su día a día que, como ella misma dice, tiene tres 'Esra': la ciclista, la pastelera y la de casa.
Son las 9 de la mañana cuando Esra nos cita en su obrador. En el horno, cientos y cientos de baklavas, el dulce típico turco que le ha hecho ganarse el respeto de los restaurantes y hoteles de mayor postín del sureste español que sirven su producción en galas y recepciones. Al lado, una gran olla burbujeante con el sirope, el secreto de un sabor difícil de olvidar para rociar sobre las 30 capas de masa producidas con la mantequilla más cara del mundo.
La mañana lluviosa en la capital nazarí va pasando y Esra ya nos avisa de que no tengamos prisa. "Con las baklavas hay que tener mucha paciencia, como con el ciclismo... ambas cosas se parecen mucho", nos dice. Cada bandeja de estos pasteles tarda algo más de dos horas en estar lista.
Cuando el trabajo artesanal termina, es el momento de trasladarnos a su tienda Ziríes situada en una casa de más de 450 años de antigüedad en el legendario Paseo de los Tristes en Granada, aguantando el encanto del tiempo a la sombra del Albaicín. Con el primer trabajo hecho, los dulces en los expositores y sin tiempo para el descanso, llega la hora de que Esra cambie el delantal por el casco, el maillot y las calas.
Tardes de bicicleta
La que fuera una destacada deportista en su país en triatlón, se ha propuesto volver a la élite, ahora del ciclismo, después de un parón hasta adaptarse a su nueva vida en tierras andaluzas. Fichada por el equipo Soltec a principios de esta temporada con el objetivo de coger forma, su 2024 será una prueba de fuego en sus objetivos. Duros entrenamientos a media jornada y una implicación para llegar alto prometen grandes cosas.
-U46317382242GtX-406x720@Relevo.jpg?cw=300&ch=533)
Y ya empieza a demostrarlo. Esra Nur Gökcek ha sido una de las grandes protagonistas de Reinas de la Alhambra, primer critérium femenino de ciclismo disputado en España con la organización de Relevo, fue también una de las llamativas sorpresas de la competición. Después de solo un año de su vuelta a los entrenamientos, fue capaz de aguantar el ritmo cuando estrellas como Mavi García o Ashleigh Moolman Pasio se pusieron serias e incluso sumó un gran cuarto puesto en la prueba de eliminación. El ejemplo perfecto de que hay motor en sus piernas y su progresión puede llevarla a la élite.
Su llegada a Granada es una nueva esperanza para Esra. Tras dejar Esmirna, su tierra natal, soñó con buscar sus sueños, encontrar mejoras y su futuro en el sur de España. Pero su salida de Turquía no significó un punto y final con su país de origen, al que sigue teniendo presente y, tras el terremoto que asoló la zona fronteriza con Siria y se cobró decenas de miles de muertos, activó una campaña de recogida de ayuda desde su nuevo hogar a través de su tienda y gracias a la ayuda del ciclismo en España.
Las dos vidas de Esra la hacen especial. La pasión que pone en sus dos trabajos hacen que la dificultad de tener que compatibilizar dos actividades que te exigen tanta atención y tiempo sea posible. Además, siendo buena en las dos. Quizás, porque como ella dice, la pastelería y el ciclismo tienen mucho más que ver de lo que imaginábamos cuando la conocimos.