CICLISMO

Javier Guillén da la clave de las invitaciones a la Vuelta: "No tenemos que barajar solo a equipos españoles"

El director general de la ronda española atiende a Relevo en un momento de incertidumbre para las escuadras que buscan un hueco en la edición de 2025.

Javier Guillén durante la entrevista. /JAVIER GUILLÉN / RELEVO
Javier Guillén durante la entrevista. JAVIER GUILLÉN / RELEVO
Javier Guillén

Javier Guillén

El director de la Vuelta a España, Javier Guillén, se ha pronunciado sobre los temas de actualidad que engloban a la carrera española. La última gran vuelta del año afronta una edición especial, la del 90º aniversario, donde la elección de los equipos invitados se ha vuelto más compleja que nunca. Tanto las estructuras nacionales como las extranjeras están presionando y lanzando mensajes para hacerse un hueco. Mientras tanto, el recorrido promete una lucha feroz entre Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard, que aún no se han visto las caras en esta carrera. Además de ellos, nombres como Enric Mas y Carlos Rodríguez también están confirmados, pero la ambición pasa por reunir un año más a la mayor cantidad de talentos posible.

Una vez presentado el recorrido, ¿cómo valora el recibimiento de los aficionados?

Bueno, como siempre, unos a favor, otros en contra. Está claro que nunca llueve a gusto de todos. A mí lo que sí que me gusta es que no deja de ser una vuelta que ha dado que hablar. He visto quizá mayor recepción en los equipos que, digamos, en los fans o los seguidores, dicho con todo el cariño, más frikis del ciclismo. También es verdad que a determinada empresa especializada le hubiera gustado otro tipo de Vuelta, pero también que ha habido mucha que sí que le ha gustado el recorrido. Desde luego, nunca llueve a gusto de todos. Nosotros tratamos de siempre proponer un modelo fiel a nuestras señas de identidad. Cada año hay que hacer una nueva propuesta. Para nosotros, este año, el recorrido es muy especial porque es el 90 aniversario de la Vuelta. De alguna forma, hemos querido, sobre todo, hacer una vuelta llena de argumentos. Argumentos, sobre todo, que hacen guiños a la tradición. Por eso hemos querido meter la típica etapa en Andorra, como muchas veces hacemos. Por eso hemos querido que esté Cerler, por eso hemos querido que esté el Angliru, por eso hemos querido que esté también Morredero... y no podíamos dejar de poner algún año después de mucho tiempo la Bola del Mundo. Yo creo que este era el año para ellos. Si a eso le sumas en otros conceptos que salimos de Italia, que eso es una innovación, pues, al final, desde el punto de vista de los argumentos, buscando siempre el mejor resultado deportivo, pues hemos hecho para empezar lo que queríamos. Luego ya veremos cómo sale.

Como dice, vuelve la Bola del Mundo. ¿A qué se debe su ausencia durante tantos años?

Bueno, básicamente que yo creo que hemos tenido muchos recursos antes. La vuelta siempre acaba en Madrid, su última etapa siempre acaba en la capital de España y ojalá que por muchos muchos muchos años más, pero también es verdad que la penúltima etapa no siempre lo ha hecho. Entonces, una vez que descubrimos la Bola del Mundo y la subimos en el año 2012, pues la verdad es que nos han surgido muchas alternativas. Hemos acabado en Alicante, hemos acabado en Andalucía, hemos acabado en Asturias, hemos acabado en en Bulbos, y claro, al final, poder meter todo eso del 2012 al 2025 pues realmente no era del todo fácil. Sí que teníamos claro que queríamos volver a meterla. Es verdad que, logísticamente, no es una subida fácil. Es una subida muy complicada. Para empezar, hay que partir la meta, es decir, el arco de meta está en un sitio y digamos que todo lo que es las zonas de relaciones públicas, todo el tema de poder atender realmente bien o recoger a los equipos, más allá de cuando cruzan meta, pues está justo en el aparcamiento de la granja de San Ildefonso. También, evidentemente, necesitamos más autorizaciones que en una etapa normal. Todo eso hace tener claro que lo queríamos hacer, pero que había que elegir el año. Yo creo que el 90 aniversario pues era un buen año para ello. Vamos a ver qué tal funcionan Angliru y Bola del Mundo, dos colosos que tenemos en España y, por extensión, en Europa en la misma edición. Ojalá, ojalá que todo esté previsto o todo pueda quedar previsto para que La Vuelta se decida en la etapa de la Bola del Mundo.

Javier Guillén sobre la asistencia de Tadej Pogacar. JAVIER GUILLÉN / RELEVO

Este medio ha podido confirmar la asistencia de Tadej Pogacar a La Vuelta. ¿Qué nos puede decir al respecto, el equipo le ha transmitido su decisión?

No, no, no. No sabemos nada. Solo esperamos que [Daniel] Arribas tenga suerte y que, al final, su premonición se cumpla y que Tadej Pogacar esté en La Vuelta. Yo creo que es un corredor de retos desde luego. Ya está marcando historia. Es una leyenda viva, en activo, del ciclismo mundial. Ya ha ganado un Giro, ya ha ganado unos cuantos Tours, pues yo creo que le va tocando ganar la tercera grande, que es por calendario, y la que no tiene todavía, que es la Vuelta a España. Estamos encantadísimos con que Jonas Vingegaard haya dicho que la Vuelta está en sus planes. Si a la presencia de Jonas Vingengaard pudiéramos sumarle a Tadej Pogacar, yo creo que a nivel de participación no se podría pedir más. Pero, pero, siempre hay un pero, no nos conformaríamos con ellos dos en caso de que Tadej confirmara, sino que necesitamos a más. Porque yo creo que todos aspiramos a tener a los mejores corredores. Ellos son los dos mejores vueltómanos del mundo, pero necesitamos más con ellos. Así que nuestros esfuerzos siempre irán dirigidos a Pogacar y al resto del pelotón.

En caso de vivir un duelo entre ambos, ¿han hecho alguna estimación sobre el impacto que podría suponer para la carrera española?

Bueno, eso es multiplicar por mucho el seguimiento, no solo mediático, sino también, por supuesto, por parte de la afición. A todos nos gustan los grandes duelos. Hoy el duelo que tenemos presente es Vingegaard contra Pogacar, Pogacar contra Vingeagaard, como se viene demostrando en los últimos años. Es verdad que ese duelo solo lo hemos visto, digamos, en una grande, en el Tour de Francia y ojalá que lo podamos ver en otra grande, como es la Vuelta a España, pero desde luego, el impacto y la repercusión se agranda, eso seguro.

Javier Guillén habla sobre las invitaciones de La Vuelta 2025. JAVIER GUILLÉN / RELEVO

Pensando en la participación, este año hay bastante lío con las invitaciones y muchos equipos insistiendo para acudir. ¿Ya tienen tomada la decisión de las estructuras que correrán?

Nosotros vamos a comunicar, yo creo que casi seguro después de que lo hagan Giro y Tour. Cuestión distinta en que lo haremos de forma prácticamente inmediata. Desde luego, tenemos una idea. Con esto quiero decir que es una idea que está en nuestro pensamiento, pero no se ha materializado. Lo tenemos muy difícil, muy difícil este año, porque como bien apuntas, no solo tenemos que barajar la presencia de equipos españoles, sino que también internacionalmente hay equipos muy potentes que tienen muchas ganas de venir a La Vuelta. Además, este año yo creo que tenemos que ser especialmente cuidadosos, porque si al final tenemos esa gran participación que pudiéramos tener, de momento únicamente ha confirmado Jonas Vingegaard su presencia, lo que sí que queremos es tener rivales contra estos grandes corredores. Entonces, a la hora de buscar esos rivales, si a nosotros nos dejan elegir la posibilidad de ir a otros países a tener equipos que tengan esos posibles rivales contra estos grandes corredores, pues creo que es nuestra obligación hacerlo. Pero, hoy por hoy, confirmo las dificultades. La decisión no está tomada y desde luego no va a ser fácil, pero en el momento que haya que tomarla lo haremos, aunque desde luego nos gustaría poder invitar a muchos más equipos de los que tenemos posibilidades de hacer.

Recogiendo esto que comenta, ¿el factor principal para tomar la decisión será entonces que esos equipos tengan un corredor top del pelotón?

Eso va a estar muy presente. Ahora mismo no te puedo decir si eso va a hacer que la balanza caiga por ese lado, pero eso va a estar presente, y te lo digo porque ya está presente. Además, ten en cuenta que tenemos presión, presión cariñosa, pero tenemos mucha presión de esos equipos extranjeros. También es verdad que siempre nos llegan mensajes de por qué el hecho de ser un equipo nacional te casi garantiza estar en la grande de tu territorio. De alguna forma se genera un tipo de agravio frente a otros equipos, en Italia con los italianos, en Francia con los franceses y en España con los españoles. Y claro, a todo eso también tenemos que ser sensibles. No es fácil. El equilibrio es complicado porque, además, tengo clara una cosa, en el momento que lancemos la decisión habrá dos equipos muy contentos, pero unos cuantos bastante enfadados. Aquí, una vez más, como ocurre con el recorrido, nunca llueve a gusto de todos. Evidentemente entenderemos la decepción o el enfado de aquellos que no pueden venir, pero también hay que entender que tenemos dos 'Wild Cards' y que con eso nos tenemos que manejar. Al final, la organización siempre busca el interés general de la carrera y, en base a ese interés general es donde tomaremos la decisión.

Este año el recorrido de La Vuelta se ha concentrado en el norte. ¿En 2026 se dará el caso contrario y pasará por buena parte del sur?

Bueno, la península ibérica o España es muy grande y conformar una carrera de 21 etapas saliendo de Italia o saliendo de Mónaco, como es el caso del 26, y tratar de aglutinar todo el territorio nacional es prácticamente imposible. Es verdad que este año no hay sur, como tampoco hay levante prácticamente o sin prácticamente. El año pasado hubo muchas etapas en Andalucía, el año pasado estuvimos en Extremadura... Este año pues estamos en el norte, estamos en Galicia y obviamente con una filosofía que trata, por lo menos, de cada dos o tres años estar en todo el territorio. Que estemos en el sur en el 26 es una posibilidad que sí que es real. Ahora mismo tenemos muchísimos planes encima de la mesa, pero yo no la descartaría también viendo un poco la trayectoria de La Vuelta. En Andalucía solemos estar casi siempre una vez cada dos años, nunca hemos dejado pasar tres años y yo no veo como mala apuesta que La Vuelta vuelva al sur, pero ahora mismo es bastante aventurado decirlo. Sí que confirmo que existe vocación por parte de la organización que respecto a lo que se hace un año, pues intentar cambiarlo para el siguiente, eso es cierto.

Javier Guillén se pronuncia sobre volver a salir de España en 2027. JAVIER GUILLÉN / RELEVO

En 2025, La Vuelta empieza en Italia y, en 2026, en Mónaco. ¿En 2027 volverá a salir de España?

Son decisiones que se toman muy a largo plazo. Nosotros, después de haber salido de Lisboa en el año 24, salir de Italia en el 25 en la región de Piamonte y salir de Mónaco en el 26, sí creemos que volver a salir de España es la opción más plausible. Tenemos muchas ofertas. Encajar fechas tampoco es fácil porque no solo depende de La Vuelta el querer salir de un país, sino que también se tienen que dar las circunstancias para que ese país te acoja en la fecha que pueda convenir a ambos, a La Vuelta y al territorio. En este caso, es obvio que después de tres años seguidos, el hecho de salir de España es lo que más nos gustaría y yo creo que sí, que veo una salida de España.

Las Grandes Vueltas han adoptado una dinámica de salir de otros países. Por ejemplo, el Giro lo hará este año de Albania, así como el Tour ha partido desde España en 2023. ¿A qué se debe este cambio?

Pues yo creo que se debe a la globalización del ciclismo, al efecto ciclismo como un deporte muy seguido que no solo es atractivo desde el punto de vista deportivo, sino que también es muy atractivo desde el punto de vista turístico. A que existe la posibilidad de empezar tu competición en un territorio y continuarlo en el país del que eres originario o al que obviamente te debes. Esto es así porque nosotros somos grandes ventanas al mundo. A través del ciclismo, unido a una carrera, en este caso el Giro, el Tour o La Vuelta se produce un gran seguimiento de nuestro deporte a nivel televisivo, a nivel mundial y por eso pues nos demandan nuestras competiciones. A nosotros también nos permiten crecer, nos permiten internacionalizar la marca, nos permiten refrescar los recorridos, nos permiten integrarnos con otras culturas y, de alguna manera, también es un efecto importante de variedad. Pero lo más importante que yo destacaría es que esto lo hacemos porque nos lo piden, y que te lo pidan es algo muy importante, porque creo que a otros no se lo piden. Por lo tanto, nosotros tenemos que estar agradecidos y orgullosos de que sea así.

¿Con cuánto tiempo empiezan a trabajar en un recorrido?

Un recorrido, más o menos, lleva un año y medio de empezar a ver ideas, hablar con instituciones. Una cosa es segura, que la vuelta acaba en Madrid. Por lo tanto, de las 21 etapas, una ya tienes todos los años hecha. A partir de ahí, necesitas saber de dónde vas a salir. Y aquí, obviamente, influye mucho las peticiones que tengas, la estrategia que se quiera seguir y, una vez que tienes claro de dónde sales y a dónde llegas, pues ahí lo que tienes que empezar a trabajar es un poco en qué zonas quieres estar presente. Y sobre eso, tienes que empezar a construir el recorrido desde el punto de vista de los perfiles. Es decir, esto no es tanto llegar a esta ciudad y salir de la otra, sino que primero hay que hacer un modelo de recorrido. Ver si queremos que esta Vuelta sea más dura al principio, o sea menos dura, o que tenga la salsa en medio, que la tenga al final, o cómo podemos siguiendo el modelo que a nosotros nos gusta seguir, que siempre es un modelo de menos a más, pero donde los finales en alto estén siempre presentes. Oye, ¿qué territorios podemos ir a buscarlo? ¿Dónde lo tenemos? Y a partir de ahí lo vas configurando. Pero, desde luego, hacer una grande... Lleva mucho tiempo, porque son muchas instituciones. Hay que ponerse de acuerdo en los perfiles, congeniar bastantes intereses... Al final, siempre lo que buscas es que al público le puedan dar, los deportistas, los ciclistas, el mejor espectáculo posible. Y eso empieza con un buen recorrido. Eso lleva tiempo.

La última. ¿Cómo ve el ciclismo español con la irrupción de tanto talento joven?

Pues la veo bien, la verdad es que lo veo bien. Si esta pregunta me la hubieras hecho hace cinco o seis años, después de encontrar relevos para Alberto Contador y para Alejandro Valverde, pues a lo mejor la respuesta hubiera sido un poco más pesimista, pero hoy es una respuesta optimista. Es obvio que, ahora mismo, digamos que el top 1 del ciclismo mundial lo ocupan corredores no españoles. Tenemos a Tadej Pogacar, a Jonas Vingegaard, a Remco Evenepoel, a Van der Poel o a Van Aert, pero junto a ellos tenemos a grandes corredores españoles que, como bien dices, son jóvenes, están despuntando. Les tenemos colocados en grandes equipos y, a partir de ahí, yo creo que con ellos, pues primero ser optimistas y hay futuro, pero también hay que dejarles tiempo. Es que España es un país en el que enseguida queremos ganar, queremos ganarlo todo y queremos ganarlo ya. Eso yo creo que necesita tiempo, necesita paciencia, pero es obvio que hoy podemos hablar de más corredores españoles que antes y eso es una buena noticia.