El 'Lamborghini' Van der Poel somete a Van Aert tanto en la playa como en el barro
La campaña del ciclocross vive su apogeo con los duelos de ambos titanes. Los tres primeros han caído del lado del neerlandés. Quedan cinco: el último, en Benidorm.
Es 23 de diciembre. Por un día, Amberes arrebata a Bruselas la capitalidad de Bélgica. Unas 10.000 personas se han congregado en su playa a orillas del Escalda, frente al puerto donde sopla un viento gélido venido del Mar del Norte. Los sujetos de su interés son, principalmente, dos hombres: dos titanes enzarzados en una rivalidad que se alarga ya camino de la década y se ha escenificado en los escenarios más insospechados. La Piazza del Campo de Siena, el Poggio de San Remo, las calles de Glasgow, los adoquines de Roubaix; o, como ha sucedido estos días, la playa de Amberes y el barro de Gavere, las dos pruebas de Copa del Mundo de Ciclocross UCI donde Mathieu Van der Poel y Wout van Aert se han retado sábado 23 y martes 26.
Seguimos en Amberes. Una mala salida relega a Van der Poel, que ya ha disputado y ganado las pruebas de Herentals (el pueblo de Van Aert, que no participó) y Mol (donde Van Aert estrenó su campaña de ciclocross), al furgón de cola. Necesita tres de las ocho vueltas de las que consta la carrera para instalarse en cabeza de carrera. Y, cuando lo hace, desaloja a los demás: los especialistas como Eli Iserbyt, Lars Van der Haar, Laurens Sweeck o Joris Nieuwenhuis no pueden contenerle. Tampoco Tom Pidcock, ese prodigio de la polivalencia que lo mismo gana en Alpe d'Huez que en el Mundial de 'mountain bike' y que en su día llevó el arcoíris de ciclocross. ¿Y Van Aert? Van Aert, tampoco.
"Acaba de empezar su temporada", justifica el entorno de Van Aert en los medios belgas; "no está para disputar a tope durante una hora completa". Frente a la prudencia del ciclista de Visma, concentrado en una campaña de carretera donde apunta a las clásicas de pavé (Flandes, Roubaix: los Monumentos que le faltan) antes del Giro d'Italia y los Juegos Olímpicos y previo paso por la Clásica Jaén Paraíso Interior, el rutilante Van der Poel. "Está más fuerte que nunca en esta campaña de ciclocross", se enorgullecen los Alpecin-Deceuninck.
Ondertussen in het peloton | Van der Poel maakt de blits in flitsende Lamborghini bij aankomst in Antwerpen https://t.co/Rg0aQRwTWr
— In de Leiderstrui (@IndeLeiderstrui) December 23, 2023
Flamante, Mathieu Van der Poel ha llegado a Amberes en un Lamborghini: por algo es la imagen de la marca deportiva italiana en los Países Bajos. En el 'Lambo' se lleva una victoria impresionante. Repite número en Gavere, donde sólo necesita una vuelta para someter a Van Aert, Pidcock, Iserbyt y compañía. Rápido, hábil, fuerte. Imbatible.
Solventados los tres primeros envites anunciados entre Van der Poel y Van Aert con triunfo para el nieto campeón de Poulidor, restan dos en las carreras X20 de Baal (1 de enero) y Koksijde (4 de enero) y otros tres en las Copas del Mundo de Ciclocross UCI de Hulst (30 de diciembre), Zonhoven (7 de enero) y Benidorm (21 de enero). En esta última, la primera edición se resolvió con el mano a mano soñado, que cayó en favor de Van der Poel. Si finalmente ambos las mantienen en su calendario, un duelo final de campaña en la Costa Blanca hará vibrar a la afición española.