CICLISMO

Nunca es demasiado lejos para atacar si eres Tadej Pogacar

El esloveno cerró con otra exhibición en el Giro de Lombardía una temporada llena de victorias tras ataques lejanos.

Tadej Pogacar levanta su bicicleta tras ganar el Giro de Lombardía./MARCO BERTORELLO / AFP
Tadej Pogacar levanta su bicicleta tras ganar el Giro de Lombardía. MARCO BERTORELLO / AFP
Darío Ojeda
Jorge Moreno Aranda

Darío Ojeda y Jorge Moreno Aranda

"Un uomo solo è al comando", narraba Mario Ferretti en 1949 mientras Fausto Coppi atravesaba los Alpes camino de Pinerolo y de su tercer Giro. Un uomo solo è al comando también es un buen resumen del 2024 de Tadej Pogacar.

Con el ciclista esloveno no solo importa el cuánto, sino el cómo. Ha ganado más que nadie y lo ha hecho, casi siempre, de manera aplastante, atacando lejos, incluso muy lejos de meta, unas veces como parte de un plan y otras de manera improvisada, sorprendiendo incluso a quienes creían que no podía sorprenderlos.

Este sábado, en el Giro de Lombardia, la classica delle foglie morte (la clásica de las hojas muertas), Pogacar volvió a escaparse, esta vez a 48 km meta. Y, tras tantas exhibiciones, nadie pudo sorprenderse.

El esloveno llegó a Como con más de tres minutos de ventaja sobre Remco Evenepoel y su sumó su cuarto triunfo consecutivo en el monumento que cierra de forma oficiosa la temporada, el mismo donde Coppi ganó también cuatro veces seguidas después de la II Guerra Mundial.

Nunca es demasiado lejos para atacar si eres Tadej Pogacar

Tras la de este sábado en Como, Pogacar termina su temporada con 25 victorias (22 triunfos parciales y tres clasificaciones generales). Son las mismas que las logradas en 2005 por el esprinter italiano Alessandro Petacchi, hasta ahora el corredor con más triunfos en una misma temporada del siglo XXI.

De las 22 victorias parciales de Pogacar, dos fueron en contrarreloj (una en el Giro y otra en el Tour) y el resto en etapas en línea. Tres triunfos llegaron en un sprint reducido y el resto (17) en solitario tras haber atacado antes.

En nueve de esas victorias, Pogacar atacó a 20 kilómetros o más de meta. Además de Lombardía, lo hizo en Strade Bianche (81,1 km), 6ª etapa de la Volta a Catalunya (29,2), Lieja-Bastoña-Lieja (34,4), 20ª etapa del Giro de Italia (36), 4ª etapa del Tour de Francia (20), GP de Montreal (23,2), Mundial (101) y Giro dell'Emilia (37,8).

POGACAR PREFIERE GANAR SOLO

Ataques improvisados y estúpidos

Cuando después de ganar la Strade Bianche tras estar escapado 81 kilómetros le preguntaron cuál era la razón del ataque, Pogacar respondió: "¡No lo sé! (...) No creo que nadie lo esperara". Él tampoco, hasta que arrancó en uno de los tramos de tierra y sus rivales no lo volvieron a ver hasta que llegaron a la Piazza del Campo de Siena.

Algo parecido dijo después de ganar el Mundial, donde atacó a más de 100 km de meta y rodó en solitario más de 50, una de las mayores exhibiciones nunca vistas en el ciclismo masculino. "No estaba planeado. Solo ha sido un ataque estúpido", explicó.