El pelotón español del Tour de Francia no vota
Los plazos del voto por correo y la imposibilidad teórica de delegarlo dejan sin participar en las elecciones del 23J a la mayoría de los españoles que trabajan en el Tour.

Algo más de 200 españoles se encuentran desde el pasado 3 de julio en Francia, trabajando en el Tour. Abandonaron el suelo nacional ese mismo día, lunes, una vez consumada la bella Grand Départ desde el País Vasco. Trabajan para equipos, para medios de comunicación o para la organización; son ciclistas, directores, entrenadores, auxiliares, mecánicos, periodistas, fotógrafos, técnicos… Currantes y ciudadanos. Y sin embargo una gran mayoría no podrán ejercer su derecho a voto en las elecciones de este 23 de julio.
Existen dos vías para votar cuando un ciudadano español se encuentra desplazado en el extranjero de forma circunstancial. Una es el ERTA, y supone registrarse presencialmente en el consulado de turno (en este caso, París) antes del 29 de junio para recibir la documentación a lo largo del mes de julio en una dirección determinada en Francia y posteriormente enviarla a la mesa electoral de turno antes del 19 de julio. Una solución impracticable para cualquier persona que esté en el Tour de Francia.
La otra manera es el voto por correo. Su ejercicio era hasta ahora bastante sencillo. Una vez registrada la solicitud, presencial o telemáticamente, antes del 13 de julio, los funcionarios de Correos proceden a su entrega personal entre el 3 y el 16 de julio. Posteriormente, el voto ha de depositarse antes del 20 de julio. Todos los pasos se podían hacer de manera delegada… hasta que el reciente escándalo del fraude del voto por correo en Melilla provocó que la Junta Electoral Central dictaminara que la recogida debía realizarse de manera presencial, y previa identificación mediante documento de identidad. Algo imposible para quienes el 3 de julio estaban ya lejos de su domicilio, y sin perspectiva de regresar al mismo hasta el 23.
"Al convocarse las elecciones de forma tan repentina, nos ha dejado sin margen para poder votar", se quejaba todavía en Bilbao el murciano Luis León Sánchez, quien por desgracia sí estará en casa para votar debido a su caída y posterior retirada en la cuarta etapa. "Yo sé que podría votar con mucho papeleo, pero no vale la pena para lo que hay", rehusaba Marc Soler. Otros, como Juanpe López, se lo tomaban con resignado humor: "En estas elecciones, como en el Tour de Francia. Que gane quien se lo merezca… y ya está".
Algunos afortunados sí han podido ejercer su derecho a voto de forma delegada, 'colando' con el legítimo procedimiento de toda la vida, o aprovechando que han abandonado temporalmente la caravana en un momento dado de la Grande Boucle. Sin embargo, la mayoría de españoles presentes en este Tour de Francia se han visto privados de su derecho al voto; o, directamente, han declinado ejercerlo.