Jasper Philipsen vuela en Bayona y se lleva la tercera etapa del Tour de Francia
El velocista belga se impone con autoridad en la primera llegada al esprint de la ronda francesa.
Cruzó Van Aert la meta de San Sebastián furioso, puñetazo de rabia y bidón al asfalto tras dejar escapar el triunfo en los últimos metros, y Pogacar, que fue tercero, se tomó a risa el enfado de su rival desde el rodillo. Juegos mentales, dicen algunos. Naturalidad del esloveno, opinan otros. Lo cierto, sea una cosa u otra, es que al belga del Jumbo no le sentó nada bien que sus compañeros de equipo, Vingegaard incluido, no se exprimieran para lanzarle con garantías en el desenlace de la segunda jornada del Tour.
Hoy, en el tercer y último día con salida en el País Vasco, la etapa se lanzó en Amorebieta con el nervio de Neilson Powless de nuevo inquieto. El estadounidense de Education First, rey de la montaña en el inicio de este Tour, como demuestran los lunares que pretende seguir luciendo en su maillot, parece empeñado en sacudir la carrera a base de fugas lejanas, hoy en compañía de Laurent Pichon, del Arkea.
En esas andaba la etapa, más tranquila que las dos primeras, aunque con paisajes aún más espectaculares, cuando Pogacar pinchó su rueda a orillas de un Cantábrico en el que el sol pegaba con fuerza. No vino el percance por chinchetas en el asfalto. No al menos esta vez. El esloveno, líder supremo del UAE, solventó el enredo sin dificultad y, relajado, bromista, sonrió a cámara antes de emprender el retorno a un pelotón más lento de lo esperado.
🔥 ¡𝐉𝐀𝐒𝐏𝐄𝐑𝐑𝐑𝐑𝐑𝐑!
— Eurosport.es (@Eurosport_ES) July 3, 2023
⚡ Philipsen bate a Bauhaus, Ewan y Van Aert en Bayona con un trabajo sensacional de Van der Poel y se lleva la victoria en la tercera etapa
🟡 Adam Yates retiene el liderato.#TDF2023 | #LaCasadelCiclismo pic.twitter.com/zfScPffAkr
El ritmo permitió estirar en cabeza la aventura del veterano Pichon, ya en solitario, sin Powless —satisfecho con los puntos de la montaña en el bolsillo—. No llegó a buen puerto, eso sí. El pelotón endureció la marcha a 36 kilómetros del final y cazó al galo a la altura de San Juan de Luz, justo cuando el Tour dejaba atrás suelo español para cruzar la frontera.
Ya con otra marcha, pensando en la victoria de etapa, y con las primeras banderas francesas izadas en las cunetas, el grupo aceleró el paso hacia Bayona, donde los esprinters se relamían ante su primera gran oportunidad.
Allí, en la ciudad de los dos ríos, primera llegada francófona del Tour, el belga Jasper Philipsen, de 25 años, ganador de dos etapas en el Tour del año pasado, una de ellas en los Campos Elíseos, comenzó a sacudir con fuerza el manillar a 200 metros de la línea de meta y arrinconó contra las vallas, sin cerciorarse, a un Wout Van Aert que, gafado en este inicio de Tour, a centímetros de tocar las vallas, bajó los brazos y renegó de la batalla, ya cabizbajo.
🚀 Así fue el polémico sprint que decidió la tercera etapa del #TDF2023. #TourRTVE3J
— Teledeporte (@teledeporte) July 3, 2023
¿Cerró Philipsen a Van Aert? https://t.co/tEVRsdZ45V pic.twitter.com/BlOC2xOkpV
El belga del Alpecin, en racha, aprovechó el lanzamiento de su colega Mathieu Van der Poel, el célebre nieto de Raymond Poulidor —eterno rey sin corona—, y se llevó la victoria de etapa por delante de Phil Bauhaus y Caleb Ewan, un escalón por debajo en el olimpo de los velocistas. Primera victoria para el conjunto belga aunque, seguro, no será la última.
La clasificación general se mantiene intacta —con Adam Yates de amarillo— antes de afrontar la cuarta etapa de este martes: 182 kilómetros planos entre Dax y Nogaro, ideal para que los esprinters se vuelvan a lucir en un más que probable final en volata. Los favoritos, por su parte, seguirán relajando las piernas antes de prender la primera traca en los Pirineos.