En La Vuelta, como en LaLiga: el ciclismo aplicará un sistema de tarjetas amarillas
El nuevo método disciplinario se estrenará en la Clásica de San Sebastián y entrará plenamente en vigor la próxima temporada.

La Unión Ciclista Internacional (UCI) ha hecho pública la cristalización de una serie de medidas para mejorar la seguridad en las pruebas ciclistas de carretera que llevaban meses en discusión y cambiarán sensiblemente el desarrollo de las mismas. La principal es la implantación de un sistema de tarjetas amarillas que podrán ser mostradas a todos los miembros de la caravana de carrera (ciclistas, técnicos, motoristas e incluso periodistas) y que, en caso de acumularse, acarrearán suspensión. Este sistema entrará plenamente en vigor en la campaña 2025 y se probará en las carreras de la primera división masculina y femenina a partir de agosto. Así, su puesta en escena llegará en la Clásica de San Sebastián el próximo sábado 10 de agosto.
En la nueva normativa, la UCI ha previsto hasta 21 casos en los cuales un ciclista puede recibir una de dichas tarjetas amarillas. Todos ellos ya eran motivo de sanción en la normativa precedente, ya fuera en forma de multa, deducción de puntos UCI o incluso exclusión; medidas disciplinarias que siguen siendo contempladas y para las cuales la tarjeta amarilla constituirá un castigo complementario. No obstante, no veremos a los árbitros mostrarlas desde el coche o la moto: se comunicarán una vez finalizada la carrera.
Los escenarios que pueden llevar a la tarjeta amarilla son muy variopintos. Desde tirar basura fuera de las zonas designadas ó quitarse el casco en carrera hasta recibir impulso mediante empujón o asistencia mecánica antirreglamentaria por parte de compañeros o técnicos. Desde agarrarse al coche o abrigarse a rebufo del mismo hasta desobedecer a los árbitros, atajar en el recorrido ó rodar por la acera durante la carrera. Desde desviarse en el sprint final hasta colocarse sobre la bici en una postura peligrosa para los compañeros de pelotón. También está prevista tarjeta amarilla para los ciclistas que acepten ser entrevistados por un periodista en plena competición.
Des cartons jaunes feront leur apparition dans le peloton à partir du 1er août afin de renforcer la sécurité des coureurs ! Une phase de test aura lieu jusqu'à la fin de la saison. Les sanctions, en cas d'accumulation de cartons, seront prononcées à partir de 2025 (cf tableau). pic.twitter.com/mAWFPyyqI0
— Le Gruppetto (@LeGruppetto) June 12, 2024
Una vez concluido el período de pruebas, la persona que reciba dos tarjetas amarillas en la misma carrera (sea ésta una clásica o una vuelta) será descalificada de la misma y recibirá una suspensión de siete días, que serán 14 en caso de tres amarillas en 30 días y 30 si son seis amarillas en un año. No obstante, cada amarilla sólo podrá ser tenida en cuenta para una sanción: una vez aplicada la sanción, la tarjeta 'expirará'.
Dentro del 'paquete' de medidas se incluye también una ampliación de la 'zona de seguridad' en las etapas con llegada masiva. Si tradicionalmente se neutralizaban los cortes acaecidos por caída en el último kilómetro y en la actualidad son los tres finales, a partir de este mismo Tour de Francia serán los cinco últimos kilómetros los que no marcarán diferencias para la general en caso de caída. Esto, combinado con la norma por la cual sólo se registran diferencias superiores a tres segundos entre el último ciclista de un grupo y el primero del siguiente, permitirá a los ciclistas que no se involucren en el sprint tomarse con más tranquilidad los hectómetros finales y evitar accidentes.

Otra medida, probablemente la más controvertida a largo plazo, es la restricción del uso del pinganillo, reivindicación histórica de los organizadores vista con malos ojos por los equipos. Los primeros argumentan que estar constantemente recibiendo instrucciones desde el coche estresa a los ciclistas; los segundos, que es la única manera efectiva de dirigir a sus corredores en competición. La UCI ha decidido ensayar una serie de medidas restrictivas (como, por ejemplo, que sólo puedan llevar pinganillo dos ciclistas de cada equipo) en carreras concretas de esta misma temporada que, según su propio comunicado, están todavía por definir.