FÓRMULA 1

Los números de Red Bull dirigen la F1 a un terreno peligroso

El equipo austriaco suma cuatro dobletes en cinco Grandes Premios y empieza a neutralizar el efecto Alonso.

Pérez y Verstappen, junto a Alonso, ayer en el podio. /AFP
Pérez y Verstappen, junto a Alonso, ayer en el podio. AFP
Óscar Méndez

Óscar Méndez

Las carreras de Fórmula 1 empiezan a ser algo predecibles, al menos en cuanto a lo que la victoria se refiere. E incluso el podio, porque ya está siendo bastante habitual ver a Checo Pérez, Max Verstappen y Fernando Alonso en el cajón, una imagen que se ha repetido en tres de las cinco pruebas que se han disputado. Y es que el dominio de Red Bull sobre el resto de equipos es aplastante y este año han monopolizado los triunfos: cinco en otras tantas pruebas, con cuatro dobletes. Tan solo los problemas de Checo Pérez en la clasificación de Australia impiden el pleno.

Verstappen protagonizó ayer su segunda gran remontada del curso. Lo hizo en Arabia Saudí y lo repitió en Estados Unidos. El neerlandés partía noveno en parrilla y vio la bandera a cuadros en cabeza cinco segundos por delante de su compañero. El mexicano ha vencido en dos carreras hasta el momento más la prueba al sprint de Bakú, mientras que el bicampeón del mundo ha ganado tres. Una superioridad que se ve en la clasificación del Mundial. Alonso está a 30 puntos de Pérez y a 44 del triunfador en Miami. En el campeonato de constructores entre Red Bull y Aston Martin asciende a los 122 puntos.

Para llegar hasta aquí han necesitado acertar de lleno en invierno y construir un coche para dominar el Gran Circo desde el inicio. Esta temporada cuentan con la desventaja de tener muchas horas menos en el túnel de viento que sus rivales, primero por ser los ganadores en 2022 y segundo por la sanción que recibieron por parte de la FIA al exceder el techo de gasto permitido en dos millones. No les ha importado, aunque saben que la segunda mitad de esta campaña no será un paseo militar.

Las victorias de Red Bull no son fruto de la casualidad o de haber encontrado alguna laguna legal que otros equipos no han descubierto en sus fábricas, sino que viene de lejos. De las últimas 28 carreras que se han disputado en la Fórmula 1, los austriacos han ganado 23. Leclerc en tres ocasiones, Sainz y Russell son los únicos que han conseguido robarles algún triunfo, un bagaje escaso y que ha permitido a Verstappen ganar dos títulos mundiales y enfilar a por el tercero consecutivo.

Pérez y Verstappen, ayer en Miami. AFP
Pérez y Verstappen, ayer en Miami. AFP

Sin embargo, lo exhibido esta temporada está superando cualquier registro que hubiesen conseguido en el pasado. En 2022, un ejercicio que dominaron con mano de hierro y en el que Verstappen pulverizó numerosos registros, lograron cinco dobletes, uno menos de los que suman este año en apenas cinco carreras. Imola, dentro de 15 días, se presenta como la primera oportunidad para igualarlo, aunque muchos equipos han prometido mejoras para intentar acercarse a ellos.

Con el de ayer en Miami, el equipo de las bebidas energéticas suma 26 dobletes a lo largo de la historia y están a tan solo siete de los logrados por Williams, una de las escuderías más carismáticas y ganadoras que ha conocido este deporte. Red Bull se convirtió este domingo en el quinto equipo que empieza una temporada con cuatro dobletes en las primeras cinco pruebas tras Ferrari (1952), Williams (1992) y Mercedes (2014 y 2019).

Y los principales beneficiados son sus dos pilotos, que siguen engordando su palmarés carrera tras carrera. "He disfrutado mucho, me he sentido bien el el coche. Los tiempos no eran planos, sino que cada vez iba más rápido. Todo ha funcionado perfectamente hoy", apuntaba Verstappen tras su victoria. "Este resultado es muy bueno para el equipo", reconoció Pérez.

Ambos lideran cómodamente el Mundial como también han liderado cómodamente todos los Grandes Premios este curso. A excepción del celebrado en Australia, cuando las banderas rojas no permitieron una carrera normal, en el resto de pruebas la diferencia en meta respecto al tercer clasificado ha sido enorme. En Baréin Alonso entró a 38 segundos de Verstappen, en Arabia Saudí lo hizo a más de 20 de Pérez, una distancia similar a la de Leclerc respecto al mexicano en Bakú y ayer, el asturiano vio la bandera a cuadros a 26 segundos.