F1 | GP MÓNACO

Red Bull sufre "dolores de cabeza" en los Libres mientras Charles Leclerc aspira a todo en casa

Verstappen se pelea con su coche en un circuito que se le puede atragantar. Sainz, discreto, mientras Alonso sorprende y termina tercero.

Charles Leclerc, durante los libres en Mónaco. /REUTERS
Charles Leclerc, durante los libres en Mónaco. REUTERS
Jorge Peiró

Jorge Peiró

A Charles Leclerc siempre se le atraganta su querido circuito natal de Mónaco. Correr en el lugar donde se crió es siempre especial para el piloto de Ferrari y, este año, desde la primera vuelta de los libres del Gran Premio de Mónaco ha demostrado que aspira a todo. Su coche es fuerte en este trazado: "Me sorprendería todo lo que fuera no pelear la pole".

El monegasco lideró la segunda sesión de libres de principio a fin mientras Carlos Sainz, terminó sexto, a casi siete décimas. Dos entrenamientos en los que los pilotos arriesgaron más de lo habitual a estas alturas de Gran Premio que la frase más repetida fue: "Creo que he tocado muro". Una radio unánime en la parrilla.

Si Ferrari está cómodo, Red Bull todo lo contrario. "Estoy saltando como un canguro, tengo dolores de cabeza", reclamaba Verstappen por radio mientras se peleaba con su coche. Saltó tanto que tocó el muro antes del túnel, a mitad de sesión. Checo Pérez sentía algo parecido: "El manejo es horrible".

El tricampeón sigue pilotando un cohete pero se le puede atragantar esta pista. Llevan avisando en el equipo desde el jueves de que el coche sufre, sobre todo cuando se sube a los pianos. El neerlandés intentaba bajar los tiempos de Leclerc y el monegasco iba cada vez más rápido y se acercaba más a los muros. Ferrari y Mclaren les están dando guerra.

Alonso cumple su palabra

Aston Martin es una auténtica incógnita porque llegaba a Mónaco arrastrando el desastre de Imola pero Alonso dio una vuelta a todo ese pesimismo. Su "hemos encontrado cosas interesantes" acompañado del optimista "tengo un buen presentimiento de hacer un buen finde" invitan a, por lo menos, dudar. Y más cuando se puso segundo al montar el blando.

El asturiano está cumpliendo literalmente aquello que destacaba en la previa de "ir construyendo poco a poco la confianza" conforme avance el Gran Premio. Terminó tercero los libres dos después de completar un vueltón con su Aston Martin. Mercedes mostró sus cartas a través de Hamilton, que finalizó segundo los entrenamientos, a un par de décimas de Leclerc.