Carlos Sainz se juega esta madrugada ser descalificado del Gran Premio de China

Carlos Sainz se encuentra al borde de la descalificación de cara a la carrera de sprint de la madrugada del viernes al sábado. El resultado del madrileño en clasificación, había sido decimotercero, quedaría completamente invalidado y tendría que salir desde el pit lane. El equipo Williams no pudo entregar a tiempo las imágenes de video que exige la FIA sobre los alerones de su coche y la Federación los ha llamado a declarar ante comisarios esta madrugada.

En plena polémica sobre la flexibilidad de los alerones traseros (el llamado mini-DRS que podría haber utilizado McLaren para ganar ventaja), la escudería de Grove, presuntamente, no entregó imágenes de video de sus alerones una hora después de finalizar la primera sesión de entrenamientos de la pasada madrugada. Ese es el argumento de la Federación.

A las 10:56h, el portal de la FIA publicó el documento que anunciaba la investigación a Williams. Minutos más tarde, se hizo oficial la llamada de comisariosa declarar durante la próxima madrugada. Recordar que la propia Federación pidió a las escuderías instalar cámaras en sus monoplazas para observar la flexibilidad de sus alerones.

La Federación es muy estricta en este sentido y no duda cuando toca sancionar. Carlos Sainz y Williams, por tanto, quedarían fuera de la sprint ya que tendrían que remontar partiendo desde el pit lane en una prueba que solo dura 19 vueltas. Pensar en puntos es absurdo pues solo los ocho primeros se llevan premio. La investigación cobró tintes surrealistas cuando la FIA publicó un documento con la hora y día equivocados. Luego lo borró y publicó el que está dentro de esta pieza.

El equipo británico no logró entregar los archivos de video de las cámaras delantera y trasera a la FIA, según la Federación, tras la primera sesión de entrenamientos libres. Unas imágenes que se utilizan para comprobar si los alerones delanteros y traseros se desvían y flexan dentro de la distancia que contempla el reglamento, un tema muy candente en la Fórmula 1 tras las protestas recientes de varios equipos.