Carlos Sainz y Ferrari confían en dar un paso adelante en Yeda: "Vamos a ser más competitivos; hay opciones de podio"
El piloto español cree que han encontrado soluciones a sus problemas en la primera carrera del año de cara al GP de Arabia Saudí.

La Fórmula 1 encara su segunda carrera de la temporada más larga de su historia y algunos ya dan por muertos a Ferrari y Mercedes. Uno, el equipo que más Mundiales ha ganado desde 1950; el otro, el que dominó la categoría de 2014 a 2021. La primera cita en Baréin hizo saltar las alarmas en Maranello tras el fallo de la batería y la centralita del SF-23 de Charles Leclerc cuando marchaba en puestos de podio. Pero en Arabia Saudí, un circuito de velocidad, los italianos esperan empezar a encontrar el camino. Carlos Sainz será su punta de lanza, ante las 10 posiciones de sanción en parrilla del monegasco.
El español tendrá ante sí el reto de plantar batalla a los Red Bull de Max Verstappen y Sergio Pérez, que parten como claros favoritos tras los más de 30 segundos que sacaron a su más inmediato perseguidor, Fernando Alonso, en el GP de Baréin.
"Creo que sinceramente estamos más cerca en este tipo de circuito. Quiero pensar que hay más oportunidades aquí que en Baréin, pero todavía tenemos que esperar un poco", apuntó el madrileño en la rueda de prensa del jueves. "Quiero pensar que sí tenemos opciones de podio. La pista es completamente diferente a Baréin. El asfalto, la naturaleza de alta velocidad, la configuración de alerón que vamos a usar, la degradación... todo es un poco diferente en comparación con hace dos semanas. Tengo la sensación de que vamos a ser un poco más competitivos. Igual me equivoco y el domingo me decís que a dónde iba, que me he motivado, porque igual no es así".
¿Suficiente para vencer a los Red Bull? "Teniendo en cuenta lo competitivos y fuertes que fueron en Baréin, va a ser extremadamente difícil. Pero en la F1 puede pasar cualquier cosa e intentaremos ir a por ello. Quiero ser más optimista y creo que este fin de semana tenemos una buena oportunidad de volver al podio".
El español reconoce que no le tranquiliza que Leclerc salga 10 puestos más atrás del resultado que tenga en la clasificación del sábado, y deja claro que no es la manera de empezar la temporada para un equipo como Ferrari. Pero desliza que en Maranello ya han encontrado la respuesta y la solución al problema.
"No es la forma en la que quieres empezar una temporada, con una penalización en la segunda carrera y que te fallen la batería y la centralita en el primer fin de semana. Claramente no estamos contentos con eso y lo identificamos como una debilidad. Es una mala señal de hecho que la fiabilidad siga siendo un punto débil. Pero es la primera vez que vemos este fallo en mucho, mucho tiempo. Nos ha pillado por sorpresa", reconoce. "Estamos tomando medidas para solucionarlo y estoy seguro de que podemos hacerlo a corto plazo. Así que es una mala situación, pero ahora sólo podemos mirar hacia adelante y mejorarla y asegurarnos de que también somos más competitivos este fin de semana".
"Obviamente, la penalización de Charles al llegar aquí no es lo ideal, pero sólo es la primera carrera. Si algo nos enseñó 2022, no es cómo empiezas, sino cómo acabas. Así que vamos a tratar de evolucionar a partir de ahí y mejorar el coche tanto como sea posible. Intentar avanzar desde donde hemos empezado. Tenemos ideas, tenemos las cosas claras, sabemos en lo que tenemos que mejorar. El año pasado no conseguimos ser los mejores en el desarrollo del coche, pero este año vamos a darlo todo para que el coche mejore de la primera a la última carrera".
En los días entre el GP de Baréin y la segunda cita en Yeda, en la costa del Mar Rojo, muchos rumores han señalado a Ferrari, sugiriendo que algunos altos cargos, como Laurent Mekies, estarían pensando en salir por la puerta de atrás. Sainz ha salido al paso de las habladurías.
"La gente se sorprendería de lo contentos, no contentos, pero lo tranquilos que estamos internamente. Sinceramente no hacen ningún favor a la escuadra, no tiene sentido comentar estos rumores, porque al menos sabemos dónde hemos equivocado, donde el coche no es suficientemente fuerte. Tenemos objetivos muy claros de dónde queremos evolucionar. El Ferrari del año pasado ha sido el ejemplo perfecto de que no es cómo se empieza, sino cómo se acaba. Estamos tranquilos, tenemos un objetivo muy claro y ahora la cabeza se centra en trabajar".