La F1 estudia apagar (o posponer) las radios por los insultos de los pilotos: "Si controlas un coche puedes controlar tus palabras"
El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, quiere cambiar las reglas.
Entraron en los años ochenta y son una de las señas de identidad de la Fórmula 1. Las comunicaciones por radio tienen un encanto único. Una queja por aquí, ironía por allá, un enfado por acá. Pilotos e ingenieros de pista se las ingenian para inventarse cada semana algo nuevo. Definen a la perfección el Gran Circo y, desde que Formula One Management (FOM) decidió emitirlas en televisión, forman parte relevante del 'show'.
Ahora, estas comunicaciones entre piloto y muro podrían llegar a su fin. La Federación Internacional de Automovilismo (FIA), como mínimo, está pensándose apagarlas o posponerlas. Su presidente, Mohammed Ben Sulayem, sigue muy comprometido en la persecución que inició el año pasado contra los insultos y palabras malsonantes de los pilotos. "¿Damos un paso más y cortamos las radios? Tal vez. ¿Las retrasaremos? Tal vez".
Welcome back, mad Max! 👀 #Verstappen #F1 pic.twitter.com/PA5gnSbJjR
— Radio Messages (@radiomessages) July 21, 2024
Eliminarlas por completo sería dar un golpe a la competición y a todo el teatrillo televisivo que envuelve a la Fórmula 1. Posponerlas para revisar primero los mensajes y luego valorar si emitirlos podría ser la opción más sensata. "Hay muchas cosas en las que trabajaremos ahora con nuestro promotor, el promotor de la FIA. Seguimos siendo los dueños del campeonato", añadió el presidente de la FIA en su visita al Circuito Madrid Jarama durante la cumbre de oficiales de la Federación.
El castigo a los insultos arrancó cuando decidieron penalizar a Max Verstappen con servicios comunitarios por maldecir en rueda de prensa. Aquella sanción inició una guerra que se sigue librando hoy. La respuesta del máximo organismo, contundente: anunció hace algunas semanas sanciones ejemplares contra los insultos de los pilotos desde la primera carrera. Desde entonces, apenas se podrá decir nada.
No quiere que los niños digan palabrotas
"Nuestros pilotos son embajadores, envían un buen mensaje de nuestro querido deporte y no queremos que los padres nos vean como un deporte sucio. Hay libertad pero también disciplina, hay pilotos que ganan millones de dólares y deben ser disciplinados, como en cualquier otro trabajo. No son niños, tienen responsabilidades hacia la FIA", añadió Ben Sulayem.
Verstappen, por cierto, se rebeló contra la FIA y decidió mantener una huelga de silencio en las siguientes ruedas de prensa oficiales. No así en sus encuentros en corrillos con periodistas, contra los que no tenía nada. "Hasta Toto Wolff estaba sorprendido porque su hijo, menor de diez años, decía palabrotas que escuchaba a los pilotos. Eso no es lo que queremos en la FIA, si controlas en un coche, puedes controlar tus palabras y ser responsable hacia el deporte que te da tanto. No es mucho pedir y no es nuevo, son normas de la FIA escritas desde 1972″, añadió el presidente.
"Los veo como mis hijos. Fijaos en Verstappen y su castigo con servicios a la comunidad, la gente pensaba que el presidente de la FIA le iba a mandar a limpiar los baños. Hablé con él en Catar, estaba nervioso, le propuse inspirar a niñas y niños y le pareció muy bien. Fue a Ruanda (durante la semana de la gala de entrega de premios), les abrazó, fue muy bueno para ellos". Conociendo el carácter del campeón, no dará tregua este año.