FÓRMULA 1

Una de cal y otra de arena para Ferrari en Canadá

La escudería italiana sacó petróleo con una estrategia valiente y acertada en un fin de semana a remolque. Pero no todo fueron aciertos.

Carlos Sainz, durante el GP de Canadá 2023 de F1. /Ferrari
Carlos Sainz, durante el GP de Canadá 2023 de F1. Ferrari
Sergio Lillo

Sergio Lillo

Los aciertos en Ferrari solo se celebran si son victorias, títulos o trofeos históricos como el que se apuntaron hace una semana en sus primeras 24h de Le Mans después de medio siglo fuera de la categoría principal. Como si de un bálsamo milagroso se tratase, el resultado en la clásica francesa se ha visto respaldado por la segunda mejor carrera de lo que va de temporada para los italianos. Y esto es de por sí un claro reflejo de la situación que viven en Maranello.

Sendos fallos propios en la clasificación del sábado condicionaron las posiciones de parrilla de sus pilotos, que arrancaron 10º y 11º, lejos de los puestos donde se espera ver a la mítica escudería. No obstante, en contra de lo que parecía casi una norma durante el año pasado, Ferrari acertó de pleno con su estrategia cuando el primer cambio de tercio llegó al GP de Canadá.

El Safety Car provocado por el abandono de Logan Sargeant y su Williams en la vuelta 12 adelantó las primeras paradas de todos los que habían salido con medios y blandos... excepto de los dos Ferrari. El muro de boxes apostó por alargar al máximo su relevo con los neumáticos medios y, pese a que el SF-23 ha sido un coche que no cuida bien de sus gomas en este primer tercio de año, acertaron de pleno.

Esto permitió a Leclerc y a Sainz imponer su ritmo y adelantar a todos sus rivales, menos a Verstappen, Alonso y Hamilton, cuando finalmente salieron de su única detención en boxes. Ambos lograron sellar un cuarto y un quinto puesto, respectivamente, pese a que el madrileño tuvo mejor ritmo que el monegasco durante el primer relevo (con medios) y el inicio del segundo (con duros).

Charles Leclerc y Carlos Sainz, en el circuito Gilles Villeneuve de Montreal.  Ferrari
Charles Leclerc y Carlos Sainz, en el circuito Gilles Villeneuve de Montreal. Ferrari

"Estoy contento porque hoy he ido rápido y estaba cómodo. Con el neumático medio he ido rápido y luego con el duro no había mucho que hacer porque la carrera ya estaba resuelta. Tiene sentido la estrategia de Ferrari; estábamos los dos intentando alargar el primer relevo para hacer el overcut al resto de la parrilla. El equipo ha hecho lo correcto y hemos acabado cuarto y quinto", sentenció Sainz, despejando cualquier tipo de posible polémica sobre si las órdenes de equipo fueron acertadas o no.

"Estaba muy cómodo con los medios, tenía muy buen ritmo, creo que los gestioné muy, muy bien, pero es cierto que tampoco había mucho que ganar adelantándole. Decidimos jugar juntos y hacer el overcut a muchos coches y lo conseguimos. Lo entiendo perfectamente y creo que ha sido la elección correcta y lo que nos ha permitido acabar cuarto y quinto. La prioridad siempre es el equipo".

Las buenas sensaciones también estuvieron en el garaje de al lado, donde Leclerc se mostró contento con el resultado, pero sobre todo apuntó que ha sido su mejor domingo en lo que va de año en cuanto a sensaciones.

"Ha sido un día positivo. Ya tuve buenas sensaciones el viernes en ritmo de carrera y las he confirmado hoy. Nos hemos quedado fuera con el Safety Car porque sabíamos que el aire limpio podría ser clave y nos ha funcionado. Creo que no podíamos hacerlo mucho mejor teniendo en cuenta dónde empezábamos. Lo que está claro es que las sensaciones son completamente mejores a las de cualquier otra carrera en lo que va de año", apuntó el monegasco tras bajarse del SF-23.

"No obstante, no debemos dejar llevar, porque es una sola carrera y un circuito muy particular. Tenemos que ver cómo nos va en Austria, pero desde luego que es bueno tener un domingo así".

Un resultado con algunos peros

Pero lejos de lanzar las campanas al vuelo, Sainz quiso subrayar que el rendimiento del SF-23 en el circuito Gilles Villeneuve no es una confirmación de que las mejoras introducidas en Barcelona vayan a darles alas. Austria (1-2 de julio) será una gran prueba de fuego, dado que el de Montreal era un trazado que se adaptaba mejor a las características caprichosas del Ferrari.

"Estamos haciendo progresos, llevamos mejoras en Barcelona para curva lenta y aquí se han notado. Pero nuestro rendimiento sigue dependiendo mucho de la configuración de cada circuito. Veremos en Austria cómo nos va, porque creo que va a seguir variando en ese sentido, dependiendo de la dureza de los neumáticos...", aseguró el madrileño.

Fréderic Vasseur, jefe de equipo de Ferrari, coincidió con el análisis de sus pilotos, aunque también deslizó que llevarán más actualizaciones al GP de Austria con las que esperan encarar en mejor situación las últimas cuatro carreras previas al descanso de verano.

"Hoy ha sido un buen día. Desde el viernes hemos mostrado una buena forma, con un ritmo competitivo tanto en la vuelta en seco como en la simulación de carrera. En las últimas 30 vueltas tuvimos el mismo ritmo que Lewis y Alonso, lo que creo que es un buen paso adelante", apuntó el francés.

"¿La clasificación? No me arrepiento de nada, pero debemos intentar corregir los errores. Estamos mejorando paso a paso, esperamos confirmación en otros circuitos porque Montreal es muy especial. En Austria llevaremos algunas actualizaciones más en el SF-23 y tendremos que juntarlo todo para intentar tener un fin de semana sin errores. No quiero hablar de que Ferrari esté preparado para ganar una carrera. Sabemos que si queremos conseguir un gran resultado tenemos que tener un fin de semana perfecto, hacerlo muy bien tanto en clasificación como en carrera. Pero soy optimista".

Por ahora, Ferrari cede 99 puntos con los líderes del campeonato, Red Bull, 45 con Aston Martin y 32 con Mercedes. Sainz sigue ganándole la partida a Leclerc en el Mundial de pilotos con 14 puntos de ventaja. Siempre hay matices en Maranello.