¿Lloverá en el GP de Australia de F1 2025? Lo que dice el pronóstico del tiempo, probabilidad de lluvia y a quién puede favorecer
La Fórmula 1 se convierte en un deporte muy diferente cuando la lluvia hace acto de presencia.
La Fórmula 1 comienza la temporada 2025 con el Gran Premio de Australia. Las antípodas vuelven a ejercer de carrera inaugural por primera vez desde 2019, en lo que es un regreso a las tradiciones. Desde que dejó Adelaida para celebrarse en Melbourne, el GP de Australia ha sido la primera prueba del año en 22 de las 27 ocasiones que se ha celebrado. Pero la pandemia del Covid-19 primero y la pujanza de Oriente Medio después le arrebató dicho honor simbólico.
Es habitual para el deporte mundial comenzar el año en el continente austral. Lo hace, por ejemplo, el tenis, que tiene en el Open de Australia su primer Grand Slam. No es casual. Evidentemente, los meses de enero, febrero y marzo son de verano en el hemisferio sur. Es por ello que aquellas disciplinas itinerantes, sobre todo las que se disputan al aire libre, suelen aprovechar para visitar Oceanía. Sin embargo, en esta ocasión la FIA podría encontrarse un tiempo adverso.
El pronóstico del tiempo para el GP de Australia 2025
La carrera del Gran Premio de Australia 2025 se disputa el domingo 16 de marzo a las 15:00 hora local (5:00 de la madrugada del domingo en España). A la hora en la que se ha de apagar los semáforos, la previsión es de lluvia en Australia.
Concretamente, la previsión del portal especializado en información meteorológica WeatherZone a la hora de la carrera es de un 81% de posibilidades de lluvia (aunque ha bajado desde el 89% en las últimas horas), así como una temperatura en torno a los 18 grados, un tiempo muy muy suave. Por ello, es muy probable que, de una manera u otra, el agua haga acto de presencia en el circuito de Melbourne Park. Una circunstancia que cambia por completo las predicciones de quien se puede llevar los primeros 25 puntos de la temporada.

Condiciones muy diferentes a las tandas de clasificación
Con todo esto, lo más reseñable no es solo que pueda o no llover, sino que las condiciones de carrera sí o sí van a ser muy distintas a la de los entrenamientos. De hecho, la tanda de clasificación para este sábado está prevista que se realice sin lluvia (son un 30% de posibilidades) y a una temperatura de 32 grados, 14 más que la carrera, por lo que el comportamiento de los neumáticos y su degradación va a ser toda una incógnita (venimos de pruebas en Catar, un lugar también muy caluroso) de cara a la prueba.
A quién puede favorecer la lluvia en el GP de Australia
La lluvia en la Fórmula 1 es un agente del caos. Básicamente, con la pista mojada la carrera se convierte en imprevisible. El rendimiento de los coches cambia por completo, las estrategias saltan por los aires y el riesgo de accidente se multiplica exponencialmente. Es por ello que, cuando las condiciones climáticas no acompañan, las posibilidades de un resultado inesperado se incrementan.
Los ejemplos de ello son múltiples: Olivier Panis en el GP de Mónaco 1996, Giancarlo Fisichella con Jordan en el Gran Premio de Brasil 2003 (marcado por el duro accidente de Fernando Alonso en la vuelta 54), Jenson Button con Honda en el Gran Premio de Hungría 2006 (Pedro Martínez de la Rosa terminó segundo)… Varias de las consideradas victorias más improbables de la historia de la F1 sucedieron con el firme mojado.
A day that felt like it might never come... 🥹
— Formula 1 (@F1) July 17, 2024
At the 113th attempt, Jenson Button became a Grand Prix winner for the first time at the Hungaroring 🇭🇺#F1 #HungarianGP pic.twitter.com/egickRWX5J
Por lo tanto, la lluvia en el GP de Australia perjudica principalmente al equipo McLaren. La escudería británica llega a la primera carrera del año como la principal favorita para anotarse la victoria. El conjunto papaya se proclamó campeón del Mundo de constructores el año pasado y en los test de Baréin fueron el mejor coche. Lando Norris es el principal favorito en las apuestas para llevarse la P1 en Melbourne, sin descartar a su compañero Oscar Piastri que, además, corre en casa.
Sobre el papel, el principal favorecido por la lluvia y las temperaturas bajas en Melbourne Park es el equipo Mercedes. Las flechas de plata se han mostrado especialmente efectivas tanto en mojado como en temperaturas frías. Así lo ratificaron en Baréin. Las temperaturas en los test 2025 fueron inusualmente bajas para celebrarse en el desierto. Sin embargo, en aquellas condiciones, la simulación de carrera llevada a cabo por Andrea Kimi Antonelli situó al equipo alemán como el segundo más rápido, a 24 segundos de Norris.
No solo los únicos que se beneficiarían de una posible lluvia, claro. Con una carrera patas arribas, pilotos de gran talento como Max Verstappen o Lewis Hamilton podrían encontrar el extra que, quizá, les falten a sus coches en este inicio de temporada. Así lo vimos el año pasado, sin ir más lejos. El neerlandés se impuso en el Gran Premio de Brasil 2024 bajo una intensa lluvia, conduciendo el que probablemente fuese el tercer mejor coche de la parrilla. Tampoco es casualidad que, por ejemplo, Hamilton lograse su único triunfo de 2024 en el Gran Premio de Gran Bretaña, en una carrera pasada por agua. Entonces conducía un Mercedes, además, que se vio beneficiado por las condiciones atmosféricas.