David Ramos cierra la crisis en Valdepeñas: "Se ha retratado mucho el personal"

David Ramos se ha comido el turrón en su casa de Torrejón y disfruta de un merecido descanso. Pocos, muy pocos, pensaban que el técnico madrileño seguiría al frente del Viña Albali Valdepeñas a estas alturas del calendario. Sin embargo, en apenas 23 días, el equipo azulón parece haber recuperado el rumbo, después de sumar tres victorias consecutivas antes del parón navideño.

El pasado viernes 1 de diciembre se sentó en el banquillo del pabellón Jorge Garbajosa sabiendo que aquel partido frente a Movistar Inter podía ser el último como entrenador del Viña Albali Valdepeñas. La espectacular victoria (2-5) ante los madrileños hizo que se ganara el derecho a continuar, no solo por el resultado, sino por el juego y la imagen ofrecida.

Los dos últimos partidos de 2023 disputados en el Virgen de la Cabeza el 9 y el 23 ante el Jimbee Cartagena (3-1) y Córdoba Patrimonio de la Humanidad (3-1) ratificaron un diciembre terapéutico con nueve puntos que han servido para zanjar de manera definitiva cualquier duda sobre la continuidad de David Ramos en un proyecto que lleva liderando los últimos cinco años.

La reticencia del presidente Luis Palencia a cesarle y la ausencia de un candidato de nivel para suplirle, cuando la situación del Valdepeñas era crítica, evitaron su despido. El tiempo parece haberle dado la razón a la directiva del Viña Albali, que a pesar de haberse quedado fuera de la Copa de España y encadenar trece partidos ligueros con solo dos victorias, cinco empates y seis derrotas, tuvo paciencia con David Ramos.

El entrenador madrileño afirmó que "lo importante es que el equipo se vuelva a sentir con confianza y entienda que ahora nos viene un mes de enero clave, que está claro que tenemos que disfrutar unas vacaciones dignas después de esta última dinámica, pero nos tenemos que volver escocidos porque sabemos que tenemos que dar mucho más y recuperar todo lo que nos hemos dejado atrás".

Ramos reivindicó a su equipo: "Tenemos cualidades para disfrutar compitiendo, que no se nos había olvidado jugar a esto, pero bueno, creo que lo importante, fundamentalmente, es que nos vayamos con la sensación de que podemos hacer cosas importantes, que sobre todo aquí en casa no podemos dejar escapar nada, hay que ser, como hasta ahora, contundentes y marcar territorio".

Analizando la situación vivida, Ramos no dudó en asegurar que "esto se nos ha ido de madre, nos hemos pensado quizás algo que no somos y ahí se ha perdido el norte. Desde el discurso que se ha trasladado, cómo hemos afrontado también desde la grada el tema y cómo hemos respondido nosotros desde la pista. Teniendo claro que los principales responsables somos nosotros, creo que todo eso nos ha contaminado y ha hecho que entre todos nos hayamos puesto zancadillas unos a otros".

Después de amainar la tormenta, el entrenador azulón reconoció que "he sufrido en lo personal. Sinceramente, es que llevo prácticamente un año y medio duro, porque hay mucha presión, aunque no lo parezca. Creo que nos habíamos dispersado un poco después del año de las dos semifinales de Liga, de Copa de España, la final de la Copa del Rey. Me ha hecho ver como profesional de esto que hay que reinventarse, que hay que sobreponerse, que hay que readaptarse y que si uno quiere seguir tiene que dar ese paso al frente".

Tras verse sometido a una situación límite, Ramos señaló que "también me ha hecho ver muchas cosas, he visto muchas caras, se ha retratado mucho el personal y yo me he quedado mucho más tranquilo porque tengo mi conciencia muy tranquila. Estoy con muchísima más fuerza incluso que antes, estoy disfrutando muchísimo de mi día a día, me gusta mucho esto, le pongo mucha pasión, y esto me ha hecho ver que todavía tengo que disfrutar muchísimo más".

De cara el futuro, Ramos aseveró que "llevo cinco años aquí maravillosos, y esto le ha dado mucho más valor. Lo doy todo, lo voy a seguir dando todo, voy a seguir peleando por este proyecto a muerte y si tiene que venir alguien algún día, a mejorarlo, pues que venga, que yo, por supuesto, lo respetaré, pero para que yo me vaya de aquí, tiene que ser porque sea una hecatombe como la que realmente estaba pasando o crean que yo no voy a seguir luchando, y yo voy a seguir luchando".

Por último, sobre el mercado de invierno, las últimas actuaciones de Álex González han despejado las dudas en la portería. Pendientes del mercado por si hubiera alguna oportunidad, la prioridad valdepeñera sería un jugador ofensivo. "Si viene algo tiene que ser para mejorar lo que hay, es complicado. Hay muy pocas cosas. Ahora mismo lo veo difícil, pero siempre te lo he dicho, siempre os lo digo, es que al final nosotros nunca podemos descansar", finalizó David Ramos.