BARCELONA

El adiós de Piqué se 'cocinó' en una semana: reunión secreta con Laporta, grabaciones nocturnas...

Relevo cuenta los detalles de cómo el central y el club mantuvieron la confidencialidad.

Gerard Piqué en el Camp Nou./Getty
Gerard Piqué en el Camp Nou. Getty
Manuel Amor

Manuel Amor

La retirada de Gerard Piqué ha pillado a contrapié a la mayor parte del planeta fútbol, que si bien entendía que el central del Barcelona estaba en la fase final de su carrera, no esperaba un paso al costado a mitad de temporada. Dentro de ese grupo de sorprendidos entran muchos de los trabajadores del club (directivos, técnicos y jugadores) que, a pesar de su cercanía con el futbolista, se enteraron por el vídeo publicado en sus redes sociales de la noticia. Una marcha que se certificó a finales de octubre y que, hasta el anuncio oficial, solo conocían un selecto número de personas.

Según ha podido saber Relevo, Joan Laporta conoció las intenciones de Piqué el pasado 27 de octubre, cuando el segundo le pidió una reunión y se citaron en casa del presidente. La intención del jugador era que fuese lo más confidencial posible y, aparte de ambos, el único presente fue Alejandro Echevarría, uno de los 'hombres fuertes' del máximo mandatario blaugrana. En el citado encuentro, Piqué les comunicó que no regresaría tras el parón del Mundial y cerraron las cifras de su marcha. Cabe destacar que en ningún momento les informó de cuándo y cómo lo anunciaría públicamente.

Laporta supo guardar el secreto

Laporta solo lo confesó a unos pocos directivos para evitar que se filtrase la noticia. Figuras importantes dentro del club como Xavi, Jordi Cruyff o Mateu Alemany se fueron enterando a lo largo de los últimos días y siempre primó la confidencialidad. Piqué era consciente de que, mientras más gente lo supiese más opciones había de que llegase a la prensa. De ahí que ni siquiera lo comentase en el vestuario. Solo algunos pesos pesados sabían sus intenciones y el 90% de la plantilla se enteró a través del vídeo posteado en Twitter.

La grabación del mismo se realizó horas antes de su publicación y de madrugada. El central pidió el favor de que le abrieran el campo en plena noche para no ser visto y no levantar sospechas, tal y como ha podido saber este medio. Filmaron las tomas necesarias y se marcharon lo antes posible. Ni siquiera el presidente sabía de la existencia del vídeo y supo del mismo cinco minutos antes de que viese la luz.

Piqué y Busquets en el Camp Nou. Getty
Piqué y Busquets en el Camp Nou. Getty

Lo que pasó después ya forma parte de la historia del Barcelona. Piqué consiguió su objetivo: ser él quien anunciase su retirada. Lo hizo de una manera efectiva, pues en cuestión de minutos la noticia dio la vuelta al mundo. La intimidad y confianza fue clave para que no se supiese antes de tiempo. El sábado, contra el Almería, se despedirá del Camp Nou. Así se gestó el 'adiós' de una leyenda.