Andrea Pereira y el infierno que se vivió en la Selección en el inicio de 'Las 15': "Antes nos mezclábamos para comer y aquí sabías quién se sentaba en cada mesa"
La defensa del América habla en Quiero ser Como de la crisis en la Selección y cómo fue su dolorosa salida del Barça.
Muchos han hablado de todo lo que rodeó el conflicto de 'Las 15' en la concentración de la Selección en la que empezó todo. Aún así, pocas veces, por no decir ninguna, se ha tratado en primera persona lo que se vivió aquellos días en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. "Lo peor fue la separación del grupo. A la hora de las comidas, antes todas nos mezclábamos y en esa concentración sabías quién se sentaba en cada mesa. De lo bien que nos llevábamos, con el buen grupo que teníamos, a acabar así...", relata Andrea Pereira, una de 'Las 16', exjugadora del Barça y última invitada de Quiero ser Como, el programa de Relevo en Youtube.
Año y medio después, sigue siendo difícil explicar el trasfondo de la división en aquel vestuario. "No acabamos de tener una opinión conjunta. Las del Barça quizá opinaban una cosa, las del Madrid otra... Ahí fue cuando empezó la separación y 'Las 15'. Claro que fue el tema Vilda y las primas y tal, pero había más cosas. La manera de hacerlo fue Jorge y por eso se puso el foco en él porque él fue quien intentó solucionarlo. Había muchas cosas más", desvela la defensa catalana, que se marchó al América en el verano de 2022, justo antes de que estallara la crisis en el vestuario de la Selección.
Pereira fue una de las que envió el email para no ser convocable hasta que la situación cambiara. No fue una decisión sencilla, pero decidió apoyar a sus compañeras tras recibir una llamada de Patri Guijarro, que aún no ha vuelto a vestir la elástica de La Roja porque considera que las mejoras no son suficientes para hacerlo.
Mientras, la situación en el vestuario era insostenible. El equipo estaba roto y era "imposible" unirlo en aquella concentración. "No había manera.... Había personas que se sentían dolidas entre ellas. Cuando confrontas a pesos pesados es muy difícil porque cada una tenía una idea clara", recuerda, al tiempo que confiesa no sentir ilusión de ser convocada en medio de esa crispación.
"A todo el mundo le gusta ir a la Selección, pero con buen rollo. Había un grupo, otro grupo, otro grupo... y era... ¿Dónde me pongo yo? Yo ya estaba en México e ir a la Selección para esto... No quería. Tuvimos la reunión y dejé la puerta abierta: si hacemos esto, lo hago. Yo no me comprometí a hacer algo. Me llamó Patri Guijarro y me dijo lo que iban a hacer. Yo les apoyé. También había visto la situación y no me merecía la pena ir a la Selección con ese ambiente", explica.
La defensa española también ha hablado de la figura de Jorge Vilda. "Tenía un equipazo y no supo sacarle rendimiento. Conmigo, muy bien. No tengo ninguna pega con él. Yo desde que empecé a ir, no me perdí nada. Nunca nos trató mal. Ni acoso, ni nada de eso. La única pega era el rendimiento. Eso si te pasa el primer año, vale... Pero llevábamos muchos años. Necesitábamos mucho más. Sobre todo, jugadoras que venían del Barça, de ganar tanto", detalla.
Andrea Pereira confiesa lo que más le dolió en aquel delicado periodo. "Nos habían dicho de todo... Lo peor fue que no nos creyeran. Que nos dijeran que el fútbol es así, que esto va así y que de qué vamos nosotras. Es en general, cuando te critican por un partido. No sabes nada, ni cómo he entrenado, ni si tengo alguna molestia... Igual con lo de 'Las 15", apunta.
La futbolista nacida en Barcelona, que no ha vuelto a la Selección desde entonces, señala que no ha visto el Mundial porque no suele ver fútbol y no se ve volviendo a vestir la camiseta de La Roja. "¿Volver? No creo, ahora mismo no. No por la entrenadora ni por lo que esté pasando en la RFEF, sino por mí. Porque juego en México y creo que, o eres Jenni, o…", expone. Aunque no pudo evitar vivir toda la polémica surgida con el 'Caso Rubiales': "Me decían que los españoles son muy liberales. Me preguntaban '¿esto es normal allí?' y yo decía 'no, no. No es normal'".
Un inesperado adiós en el Barça: «Nada, que te vayas...»
Por su parte, Andrea Pereira admite haber encontrado su segunda casa en México. La defensa barcelonesa destaca cómo ha crecido la liga a nivel futbolístico. "Cuando llegué dije '¿dónde me he metido?' pero ahora digo 'guau, qué rápido ha crecido la liga mexicana y todos los equipos'. Porque además es gente que quiere crecer, que invierte, que pelea por hacer cosas", recuerda tras haberse aventurado en esta nueva experiencia después de una dura salida del Barça. "Necesitaba volver a confiar y sabía que Villacampa me iba a todo. Necesitaba volver a ser Pere. Tenía ofertas de Inglaterra, pero allí hace mucho frío. No es mi juego y yo necesitaba adaptarme ya", explica.
Y menciona una anécdota durante uno de sus primeros entrenamientos con el América: "Hacíamos rondos, las chicas corrían detrás del balón y claro, yo decía 'pero posicionaros. También Villa ha hecho mucho trabajo. Ha trabajado muchísimo, pero al principio era como 'un poco de orden".
Atrás queda un triste adiós del Barça tras una temporada en la que un dolor de rodilla le martirizó. "Era como 'no puedo'. Cuando jugaba un partido sabía que iba a estar dos semanas en las que no me iban a poder mover. Mi objetivo era la Selección, la Eurocopa y era como 'sí, voy a la Eurocopa pero, ¿en qué nivel voy? ¿De verdad me sirve jugar a fútbol?'. Como había buen rollo en el equipo, me motivaban", rememora.
Dejó de ser 'Pere' en el vestuario azulgrana. "El último año fue como 'sí, vamos a hacer bromas', pero me costaba la vida. No me apetecía ir a entrenar, pero aprendí mucho de ese año. Lo había tenido siempre muy fácil... No lo pagué con mis compañeras, pero veían que algo me pasaba", declara, al tiempo que describe cómo se enteró de su final en el Barça.
"Llegué antes de las demás que han ido a la Eurocopa porque necesitaba seguir recuperándome y ahí me dicen 'nada, que te vayas'.... Yo le dije a mi representante 'da igual, dejo el fútbol hasta enero o lo dejo o si no me busco un equipo en Segunda o uno en Primera Federación'. Yo voy entrenando y si sale algo bien y si no, pues adiós. No tenía ninguna opción y estaban todos los equipos cerrados", narra.
Sus palabras dibujan el relato de una pesadilla. "Yo soñaba mucho con que no me iban a querer, con qué iba a hacer el año que viene… Cuando le dije a mi representante que Markel me había dicho que me echaban me dijo 'tranquila, tranquila'. Claro, yo le dije '¿cómo que tranquila?'... En la pretemporada, los pocos días que estuve, la gente hablaba de que no había dorsales y claro, yo ya sabía que a mí ya me habían… El último día dije que me iba. Yo seguía entrenando y ellas hablaban en el vestuario de a ver a quién iban a echar, qué iba a pasar y era yo", se acuerda con nostalgia, pero con la tranquilidad de haber encontrado de nuevo su sitio: "Pensaba que lo iba a echar más de menos, pero es que estoy tan bien".