El Barça desmonta el mito del fútbol femenino gratis

Ante el Bayern de Múnich, el Camp Nou volvió a vivir otra noche mágica.46.967 personas presenciaron la victoria culé ante el conjunto germano, batiendo el récord de asistencia a un partido de la fase de grupos de la Champions.

Más allá del resultado, que volvió a demostrar que el Barça es uno de los mejores equipos del mundo, el partido desveló un dato todavía más revelador: por primera vez, no hubo entradas gratis. 

Los 46.967 espectadores que ayer se acercaron al Camp Nou pagaron por ver un partido de fútbol femenino. Frente al Real Madrid, la primera vez que el Camp Nou acogió un partido de fútbol femenino con público, los socios retiraron más de 35.000 entradas en las primeras 24 horas. Gratis. Cuando la venta de localidades se abrió al público general, se vendieron más de 60.000, la web se colapsó y las colas virtuales alcanzaron las mil personas. Los precios de las entradas oscilaban entre los nueve y los 15€.

Para el encuentro ante el Wolfsburgo, el Barcelona repitió la misma fórmula y obtuvo el mismo resultado: otro récord del mundo. La experiencia es un grado y, frente al Bayern, el club blaugrana dio un paso adelante: por primera vez, no hubo entradas gratis. Los socios mantuvieron su exclusividad (24 horas), pero ya no pudieron retirar sus entradas de forma gratuita: un descuento del 50% y un máximo de cuatro localidades. El precio del resto de las entradas también varió: de 11 a 26€.

Las entradas VIP, por supuesto, también había que pagarlas. Iban desde los 85€ de la upper gallery hasta los 120€ de las business boxes. Un dato: tanto las primeras como las BOX, que valían 95€, se agotaron. "Es un privilegio. La afición ha vuelo a demostrar que está con el equipo y el escudo. Ya no se trata de batir récords, porque lo que está haciendo este equipo en sí ya es un récord", destacó Xavi Puig después a las cámaras de Barça TV después de la victoria ante el Bayern.

El Barça es uno de los grandes responsables del crecimiento del fútbol femenino español. El club blaugrana ha sabido vender como nadie su producto. En su haber, dos récords del mundo. El primero de ellos se batió en el partido que las enfrentó al Real Madrid en la pasada edición de la Champions. 91.553 espectadores se dieron cita para presenciar el encuentro de vuelto de los cuartos de final. Dos semanas después, las culés rompieron su propia marca: 91.648 aficionados vieron el Barça - Wolfsburgo de las semifinales de la competición continental.

La apuesta del club blaugrana por el fútbol femenino, una generación de futbolistas brillantes y la normalización de este deporte en la sociedad, que también ayuda, son algunos de los factores que explican el éxito culé.

El Barcelona ha manejado a la perfección los tiempos del fútbol femenino y está recogiendo sus frutos. Primero: invertir, cuidar y ganar. Después: monetizar esa atención. El partido ante el Bayern de Múnich fue el colofón final del proceso.

El Barcelona, consciente de su gran masa social, también promocionó el partido a través de sus redes sociales. Llevando el mítico "lo que no se ve, no existe" a su máxima expresión. En el metro, en las farolas, por la ciudad. El Barça y el fútbol femenino, una comunión perfecta que perdurará en el tiempo.