Al Barça ya no le hace falta ni brillar para ganar

Al Barça ya no le hace falta ser brillante para ganar. Las de Jonatan Giráldez se plantaron en Vitoria con, prácticamente, su once de gala. Sin embargo, en los primeros minutos del partido, les costó más de la cuenta -más de lo habitual, mejor dicho-. Cediéndole al Alavés hasta dos oportunidades para meter gol. Pero Rolfö dijo basta y empezó el espectáculo. Desde su banda izquierda lideró al Barça, al que devolvió a su eterno nivel de superioridad.

En la primera mitad, el Barça jugó más por las bandas, con Geyse y Rolfö como las máximas exponentes de ese fútbol más vertical. En la segunda, volvieron a su esencia y encontraron con mucha más facilidad el carril central. Mientras tanto, el Alavés, con más fe que otra cosa, sobrevivía. Jana Xing, su portera, les salvó en varias ocasiones. Oshoala, Ohale (en propia puerta), Aitana y Rolfö marcaron para las culés. Y de esta forma el Barça Femenino se despidió de la Liga F hasta marzo con una nueva victoria en su haber. Como el que no quiere la cosa.

La sueca ya es una fija de "Mis 'dieses'". Sinceramente, no sabría con qué versión quedarme: si con la Rolfö extremo o la Rolfö lateral. En los últimos partidos, Jonatan la devolvió a sus orígenes, a la posición de extremo, más cerca del área contraria. Va a pase de gol por partido. Ante el Alavés, dejó una colección de centros al área desde el perfil zurdo, regalándole el primer gol a Oshoala. En el segundo, se fue por potencia de su par y centro al área para que Ohale, la central nigeriana del Alavés, introdujese el balón en su propia portería. La sueca estuvo a punto de redondear su actuación con un remate de cabeza que se estrelló en el poste. Quiso ajustarlo tanto... es lo que tiene buscar siempre la perfección.

Nuria Rábano sumó su cuarta titularidad en los últimos cinco partidos. La ex de la Real Sociedad y del Dépor crece en confianza y seguridad con el paso de los minutos. Además, ha encontrado a una socia de lujo en el perfil izquierdo: Rolfö. Frente al Alavés, volvió a cuajar un buen partido. Rábano se metió por dentro, para dejarle el carril zurdo libre a la sueca, y por fuera, para ser ella misma la que apurase su carrera hasta la línea de fondo. Incluso se atrevió con un disparo desde fuera del área. Poco a poco, la de Santiago de Compostela va mostrando todas sus armas.

Ornella y Laborde, ambas cedidas en el Alavés por el Barça, debutaban como titulares con la camiseta babazorra. Para la última de ellas, eran sus primeros minutos con su nuevo equipo. Y si nunca es fácil enfrentarse a las culés, mucho menos lo es cuando tienes ganas de demostrar. Ambas futbolistas, que necesitan el balón para brillar, apenas lo tuvieron, al igual que su equipo, al que la pelota le duraba lo mismo que un caramelo a la puerta de un colegio. Sin embargo, las dos jóvenes futbolistas se mostraron comprometidas con sus compañeras y sacrificadas en defensa. Tiempo al tiempo.

Hasta el momento, habíamos disfrutado más bien poco de la sociedad Geyse - Oshoala. O bien porque Jonatan Giráldez apenas las había alienado a la vez o bien porque, cuando lo había hecho, ambas, lejos de entenderse se habían estorbado. Frente al Alavés, ocurrió lo contrario. Oshoala se centró en sus labores de delanteras y Geyse, en las de mujer de banda. A la primera le fue bien rematando, aunque pudo marcar más de uno. A la segunda, le fue bien desbordando y metiendo balones al área. Quién sabe si estamos ante el comienzo de una gran sociedad.

Suena a locura destacar a la portera del Alavés cuando le han metido cuatro. Pero es que pudieron ser más y Jana lo evitó. La joven portera del Alavés, formada en el Atlético de Madrid, fue una de las más destacadas de su equipo. Frenó los goles de Geyse y Rolfö y a punto estuvo de parar el disparo a bocajarro de Aitana. Con el Barça enfrente, ser portera nunca es un buen negocio.