París fue otro infierno para el Real Madrid con una derrota que sigue acorralando a Alberto Toril

La noche en París no pudo empezar peor para el Real Madrid. Dos goles en dos minutos (Dufour y Thiney) en los primeros seis minutos tras errores defensivos de bulto y un penalti fallado de Olga Carmona hasta de la media hora de partido. Si el infierno fuera un partido, para el equipo blanco sería algo parecido a lo que vivió en la primera parte en el Stade Charléty. Con 2-0 al descanso, el conjunto de Alberto Toril se marchó a vestuarios cabizbajo, con una crisis que empieza a ahogar y sin hallar destellos de ninguna de sus futbolistas.

El segundo tiempo trajo otro aire. Y a otra Hayley Raso. La australiana apareció más y mejor y, pese a fallar en un mano a mano, se sacó de la manga un buen pase para que Moller dibujara el 2-1. El Real Madrid tenía un hilo de esperanza. Una ilusión que se topó con la madera en el minuto 75. Zornoza no atinó con su tiro estrella desde fuera del área, estampando el balón en el larguero. Su ocasión fue sinónimo de la imagen de un equipo blanco que no supo reaccionar y que tampoco tenía efectivos para hacerlo en su banquillo.

Además de las numerosas bajas, Signe Bruun se cayó a última hora de la convocatoria por precaución, según pudo saber Relevo. La delantera danesa sigue con molestias desde Suecia y es una baja muy sensible, ya que se trata de la máxima goleadora del Real Madrid esta temporada. Sin la '9' en el banquillo, sólo quedaban dos jugadoras del primer equipo (Maite Oroz y Oihane Hernández), además de varias de las canteranas que están dando un paso al frente en los últimos encuentros. En ellas volvió a confiar Toril para intentar salvar un partido que terminó con otra derrota y como colistas en la fase de grupos de la Champions.

El Paris FC volvió a sacar los colores del Real Madrid, que no encontró consuelo en la Champions. Una competición que cada vez queda más lejos.Aún quedan (minimísimas) opciones de pasar a la siguiente ronda y la mala dinámica del equipo madrileño no invita a pensar que pueda revertir esta situación en la próxima cita (20 de diciembre) ante este mismo rival en el estadio Alfredo Di Stéfano.

De este modo, la situación del Madrid es Europa es crítica. Al tiempo que se sigue acorralando a Alberto Toril. El club confía en el técnico cordobés, un hombre de la casa. No obstante, la crisis es más que palpable. Hay un gran descontento entre la afición y el equipo no ha logrado enderezar el rumbo: encadena dos derrotas y sólo ha ganado un partido de los últimos cinco en todas las competiciones.