Quién es el árbitro del Atlético - Real Madrid de Champions League y por qué fue polémico el año pasado

Existen pocos escenarios más calientes en el mundo del fútbol que un derbi local en una eliminatoria a vida o muerte. Más todavía si se trata de la Champions League, claro. Atlético de Madrid y Real Madrid se citan para disputar el partido de vuelta de los octavos de final de la competición de clubes más prestigiosa del mundo. El marcador en la ida (2-1) confiere la ventaja de un gol a los blancos. Los locales, por lo tanto, están obligados a remontar.

En resumidas cuentas, sobre el terreno de juego del Metropolitano hay mucho en juego. Desde luego, va más allá que un simple partido de fútbol. La rivalidad vecinal, la diferencia de goles, el pase a los cuartos de final de la Champions… Un cóctel explosivo de altas pulsaciones en el que un hombre es el encargado de poner paz. El árbitro es el encargado de aplicar el reglamento en un contexto de nervios e histeria. Un trabajo tremendamente complicado, más si se tiene en cuenta que son miles los ojos que van a escrutar cada una de sus decisiones.

El árbitro designado para dirigir el derbi entre el Atlético y el Real Madrid de los octavos de final de la Champions League es Szymon Marciniak, colegiado polaco de 44 años de edad. Se trata de uno de los árbitros con mayor reputación del viejo continente, como lo demuestra el hecho de que fuese el encargado de dirigir la final del Mundial 2022, la final de la Champions League 2023 o la final del Mundial de Clubes 2023. Sin duda, los tres encuentros más importantes de su carrera. También, el pináculo al que todo trencilla puede aspirar.

Marciniak fue futbolista amateur durante su juventud, jugando por ejemplo en el equipo juvenil del Wisla de Cracovia, antes de comenzar su carrera como árbitro a los 21 años de edad. Su carrera como trencilla fue fulgurante. En 2009 debutó en la primera división polaca y en 2011 ya logró la calificación de arbitrio FIFA. Su debut en la Champions League se produjo en 2012, un encuentro de fase previa entre el Ventspils letón y el Molde noruego.

En total, Szymon Marciniak ha arbitrado al Real Madrid en nueve ocasiones en la que los blancos han ganado cuatro partidos, empataron dos y perdieron en tres ocasiones. La primera vez que el polaco se cruzó en el camino de los blancos fue el 8 de marzo de 2016, durante el enfrentamiento del conjunto madridista con la Roma en los octavos de final. El equipo español ganó por 2-0 y llegó a avanzar hasta la final, la cual ganó precisamente al Atlético en la final de Milán (1-1, 5-4 en penaltis).

El último encuentro del Real Madrid dirigido por Marciniak se produjo esta misma temporada. Fue, concretamente, el 10 de diciembre de 2024, en la crucial visita de los blancos a la Atalanta. Los madridistas llegaron al encuentro en una posición complicada de la tabla, con riesgo incluso de quedarse fuera de la repesca. Finalmente, el equipo de Carlo Ancelotti venció por 2-3, con goles de sus tres principales estrellas: Kylian Mbappé, Vinicius y Jude Bellingham.

Por su parte, Szymon Marciniak ha arbitrado un total de ocho partidos del Atlético de Madrid, con un saldo de siete victorias y una derrota para los rojiblancos. La primera vez que los atléticos fueron dirigidos por el árbitro polaco fue el 15 de septiembre de 2015, en un choque de la fase de grupos entre los rojiblancos contra el Galatasaray. Aquel encuentro se saldó con un 0-2 a favor del conjunto español.

Además, Marciniak también ha arbitrado un partido de los atléticos esta temporada. Concretamente, fue el encargado de impartir justicia en la victoria in extremis de los madrileños contra el PSG por 1-2. El conjunto dirigido por el Cholo Simeone conquistó el Parque de los Príncipes con un gol de Ángel Correa logrado en el minuto 92, en un triunfo crucial para que los colchoneros pudiesen finalizar la temporada regular entre los ocho primeros.

Szymon Marciniak fue el árbitro designado para el partido de vuelta de las semifinales de la pasada Champions League entre el Real Madrid y el Bayern de Múnich. En la ida, españoles y alemanes había empatado 2-2, por lo que todo estaba por decidirse. En un partido disputado en el Santiago Bernabéu, los blancos vencieron por 2-1 y se clasificaron para la final, en la que alzaron laDecimoquinta. Fue una eliminatoria muy igualada y, por lo tanto, no estuvo exenta de polémica.

Concretamente, el cuadro alemán se quejó del gol anulado a Matthijs de Ligt en el minuto 12 del descuento, y que hubiese mandado el partido a la prórroga. A la desesperada, el central estaba apostado en el área blanca ejerciendo de improvisado ariete. Joshua Kimmich mandó un balón a la olla que fue despejado por Ferland Mendy. Con la pelota suelta en el área, primero la tocó Thomas Müller y, posteriormente, De Ligt la introdujo en la red. Sin embargo, antes de que el neerlandés cabecease, el juez de línea levantó su bandera y el árbitro señaló fuera de juego. Algo que contraviene la norma, que dicta que en una situación así se debe dejar jugar y comprobar en el VAR después.

El gol debió subir al marcador, pero quedó anulado por el silbido arbitral. Técnicamente el gol no se produjo, pues el colegiado paró la jugada antes del remate. Evidentemente, aquello sentó muy mal al cuadro bávaro. "Hay que tener los huevos muy grandes para hacer lo que ha hecho el árbitro", dijo Thomas Tuchel en rueda de prensa. "El árbitro debería haber dejado seguir la jugada y luego revisarla con el VAR. No queremos ser malos perdedores, pero esta decisión nos parece equivocada, y por eso es aún más amargo", expresó el CEO del Bayern.

Al término del choque, algunos aficionados quisieron añadir más leña al fuego y publicaron en las redes sociales unas imágenes en las que se podía ver a Szymon Marciniak junto a un neceser con el escudo del Real Madrid, el cual atribuyeron al colegiado polaco. El vídeo se convirtió en viral debido a lo caliente del momento. Sin embargo, nunca ha sido acreditado que la bolsa perteneciese al árbitro. Además, es importante tener en cuenta que el error cometido al anular el gol del Bayern fue propiciado por su linier, Tomasz Listkiewicz, quien no debió levantar la bandera hasta que no finalizase la jugada.

Se da la circunstancia que Szymon Marciniak ya sabe lo que es arbitrar un derbi madrileño con sabor europeo. Sucedió el 15 de agosto de 2018, cuando fue el encargado de dirigir la final de la Supercopa de Europa entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid. En aquella ocasión, los rojiblancos doblegaron a su eterno rival por 2-4, llevándose el título a sus vitrinas.

Eso sí, el partido necesitó de una prórroga para proclamar a un campeón. En el tiempo reglamentario los dos equipos madrileños empataron a dos, con un doblete de Diego Costa para los colchoneros (minutos 0 y 78) y goles de Karim Benzema (6') y Sergio Ramos de penalti (62') para los blancos. En el tiempo extra, Saúl, primero, y Koke, después, certificaron el triunfo atlético.