Pupa cruel en el Metropolitano
Carrasco falló un penalti, con el partido ya finalizado, con 2-2 en el marcador. El Atlético, eliminado de la Champions.

Se acabó. Tenían razón los que se indignaban con la comparación entre Simeone y Ancelotti. No tienen nada que ver. Cholismo y Ancelottismo se encuentran en galaxias lejanas. En este mismo partido con Ancelotti en el banquillo, la flor habría sido diferente con el penalti de Carrasco, con 2-2 en el marcador y el encuentro finalizado. Cuando Simeone se puso el traje de Ancelotti (el de moverse permanentemente en el alambre con la seguridad de que no caerás) perdió toda su esencia. Primero, porque al técnico le dio un ataque de entrenador (Hermoso por Savic), incumpliendo de este modo el ave maría purísima del cholismo, el partido a partido; tenía un ojo puesto en la final de Porto, reservando a Savic apercibido de sanción. Y segundo, porque el Atleti regaló mucho atrás y se mantuvo de pie gracias a San Oblak, con dos paradones decisivos en el 81' y 74' con 2-2 en el marcador. Eso también incumple el padre nuestro del cholismo, la fortaleza defensiva.
La flor se tiene o no se tiene. El penalti de Carrasco, el travesaño de Saúl y el rechace de Reinildo pasarán a formar parte de la leyenda negra del Atleti. Con el Ancelottismo, su equipo habría resucitado con éxito. Con Simeone, en cambio, es un sí, pero no. Un pudimos ser, pero no fuimos. Una historia hermosa, emocionante, pero con un final triste. Cruel. Para Simeone y el propio Carrasco, que jugó un partidazo. Pero el fútbol tiene razones que el corazón no entiende. Quien marca más que el rival, gana. Y el cholismo perdió ante un mourinhista Xabi Alonso. Así es la vida. Y el fútbol. El Atleti debe seguir el plan de ganar en Oporto, pero para conformarse con un trago menor, la Europa League.
METROPOLITANO
🤳 Mi fondo de pantalla
Del minuto 49, con el 2-2 de De Paul, al 68' el Metropolitano se comportó como el Calderón. Empujaba tanto que el Atlético rozó el gol en hasta cinco ocasiones. Pero, por desgracia, en el Calderón o en el Metropolitano, el sino del Atlético muchas veces es cruel. El estigma no termina de quitarse. Eso es el Atlético también. Levantarse en noches duras como las del Bayer Leverkusen. En eso al Atleti no le gana nadie. En no derrumbarse jamás. La vida le sigue dando bofetones, pero toca levantarse y pelear por meterse en la Europa League y la Champions, en LaLiga, para que la temporada no se convierta en una pesadilla.
CARRASCO
💯 Mis 'dieses'
No estaba siendo su temporada. Las pocas noticias positivas que sabíamos de él, nos las proporcionaba nuestro corresponsal en Europa, Andrés García Armero: Yannick es imagen de los chocolates Cote d'or. En la vida hay que mirar siempre el lado positivo. Los plumillas somos de beatificar y crucificar rápidamente. Pocos podían pensar que uno de los futbolistas de la noche iba a ser el belga. Simeone, la familia de Yannick y el CEO de la chocolatera belga si acaso. Querido Carrasco, los atléticos deberían seguir tomándose un chocolate a la taza a tu salud. Porque, en la victoria y en la derrota, una familia nunca deja solo a un hermano malherido. Fue el casi héroe. Una pena. Su gol, como en los Juegos Olímpicos, ni sirvió de consuelo la medalla de chocolate.
CORREA Y GRIEZMANN
🗨 Tengo un Whatsapp para ti...
Ángelito, por el amor de Maradona. Antoine, por la Libertad de Eugène Delacroix. ¿A qué estabais jugando? Griezmann tirando un cañito en su campo, para propiciar el primero del Bayer, y Correa jugándose un regate en una zona prohibida, para servir en bandeja el segundo de los alemanes. Esas cosas dejadlas para el TikTok, el Instagram o para cuando estéis de barbacoa en vuestras mansiones de La Finca. En la vida hay veces que se puede jugar y otras, no. Ya sabemos que Griezmann tiene el perdón de la afición y Correa seguirá siendo el muñeco del pim pam pum.

XABI ALONSO
🤦♂️ Me ha hecho cambiar de opinión
Xabi Alonso avisaba en la previa. Iba a jugar con la presión del marcador de Brujas-Porto (0-4). Fue un gran futbolista que bebió de muchas y diferentes fuentes: Guardiola, Ancelotti, Mourinho, Pellegrini, Benítez... Como definía a la perfección nuestro compañero Patxo de la Rica, un 'guardiolista' con todo para triunfar. Tiene clase y gusto, pero también oficio. Sacó en el Metropolitano ramalazos de mourinhismo, como cuando Kondogbia robó un balón y lo frenó en la banda para quedárselo y evitar que pillaran a su equipo a la contra.
DIOGO COSTA
📀 Mi 'bonus track'
El termómetro de la Youth League solía ser un buen presagio para lo que venía horas después en el Metropolitano. En el último partido de Champions, el Juvenil de Fernando Torres pinchó frente al Brujas (1-2), antes de que el primer equipo se estrellara ante la muralla belga (0-0). Frente al Leverkusen, goleada con doblete de Adrián Niño y tantos de Abde y Paco Esteban para jugarse el liderato en Porto. Al principio de la tarde parecía que los Juveniles estaban marcando la senda correcta. Pero luego se empezó a complicar con el Brujas. Lo que sucedió en el Jan Breydel merecería un capítulo aparte. El Porto se disfrazó del Milán de Sacchi para golear 0-4 al 'intratable' Brujas. Lo más flagrante es que con 0-1, los belgas fallaron dos penaltis. Primero Vanaken y luego Lang, tras la decisión del colegiado de repetir el lanzamiento. Fue un sí, pero no. Como el nombre del portero-héroe de los portugueses. Sonaba al rojiblanco Diego Costa. Sí, pero no. Fue Diogo Costa el que empezó a poner la noche en el Metropolitano cuesta arriba...