Entradas de la final de la Champions League 2023: cuánto cuestan y dónde comprarlas

No hay partido más especial que la final de la Champions League. El título más importante de la temporada decidido en un único encuentro. Una audiencia millonaria frente al televisor y un estadio lleno hasta la bandera, con dos aficiones soñando con ver a los suyos proclamarse campeones de Europa. Quién se lo querría perder. Muchos seguidores pasan su vida sin tener la oportunidad de ver a su equipo en un escenario similar. No es el caso de los aficionados del Inter de Milán y Manchester City, que estarán en Estambul el próximo sábado 10 de junio.

Conseguir una de las entradas disponibles para ver la final en directo no es sencillo. La demanda supera con creces los 75.145 asientos del Estadio Olímpico Ataturk. Hay que tener en cuenta que no todas las butacas salen a la venta. Además de algunos lugares que quedan inhábiles por asuntos de seguridad o infraestructura, cabe reseñar que, del aforo total, la UEFA se reserva unas 24.800 localidades para patrocinadores y otros compromisos. Esto deja unas 47.200 entradas a la venta para aficionados.

En total, 20.000 entradas se reparten para cada equipo finalista. En este caso, son Manchester City e Inter de Milán los encargados de gestionar esos tickets para hacerlos llegar a sus aficionados.

Por otro lado, las aproximadamente 7.200 entradas que quedan disponibles para venta general ya están agotadas. La UEFA las puso a la venta por medio de sorteo. Esto es, los aficionados interesados en acudir a la final tuvieron hasta el pasado 28 de abril para apuntarse. A partir de ahí, el máximo organismo del fútbol europeo realizó un sorteo para asignar el papel a aquellos que realizaron la solicitud en el tiempo previsto.

Las entradas para la final de la Champions League 2023 en Estambul poseen un precio que varía desde los 70 euros la localidad más económica hasta los 690 € la más cara. En total, las butacas del Estadio Olímpico Ataturk se divide en cuatro categorías, cada una con un precio diferente.

Además, cabe remarcar que las entradas de accesibilidad para los espectadores con discapacidad poseen un precio de 70 euros, tales como las de categoría 4, e incluyen entrada para acompañante.

El Ataturk fue la sede de una de las finales de Champions más memorables de la historia. En la temporada 2004/05, Milán y Liverpool se citaron para el partido más importante del año en un estadio recién renovado, que había reducido su aforo de 80.597 espectadores a 76.092 butacas al eliminar los asientos que tenían mala visibilidad.

El partido resultó un auténtico clásico, con una remontada increíble por parte del conjunto inglés que se había marchado al descanso perdiendo por 3-0. Tras el descanso, el equipo entonces entrenado por Rafa Benítez sufrió una auténtica transformación. Steven Gerrard logró el primer tanto para los reds en el '54 y, solo dos minutos más tarde, Vladimir Smicer, que había comenzado el partido desde el banquillo, hizo el 3-2. De pronto había partido en Estambul.

Djibril Cissé mandó el encuentro a la prórroga en el minuto 85, con los aficionados del Liverpool totalmente en trance mientras el Milán intentaba recomponer sus piezas tras el mazazo anímico. La final se resolvió finalmente por penaltis. Los italianos, en las botas de Serginho y Andrea Pirlo, fallaron sus dos primeros intentos, muestra del estado moral del equipo. Los reds, por contra, no erraron, con sendas conversiones de Hamann y Cissé. Dida dio ciertas esperanzas a los rossoneri al detener el intento de John Arne Riise, sin embargo Jerzy Dudek atajó el quinto penalti de la tanda a Andriy Shevchenko dándole a los ingleses la que fue su quinta Champions League.