Que Haaland llevara el brazalete del Manchester City es algo más que una decisión de Pep Guardiola

Una hora y cuarto antes de que empezara el último partido contra el Newcastle, momento en el que se anuncian las alineaciones de la Premier League por redes sociales (desde esta temporada se publican por norma 75 minutos antes del choque, por los 60' de años anteriores), la principal sorpresa en el Manchester City era la elección del capitán. Por primera vez desde su llegada al club hace dos años y medio, Erling Haaland iba a llevar el brazalete. No había sucedido antes y no estaba en el grupo de capitanes de esta temporada, que se elige a comienzos de curso.

En la alineación que ganó por 4-0 a las urracas para afrontar con algo más de optimismo el partido de vuelta ante el Real Madrid estaba, por ejemplo, Gündogan, que fue capitán en sus últimos tiempos en el club antes de irse al Barcelona, y también otros como Ederson, Foden o Stones, con muchísimos más años en la plantilla que Haaland. Pero el elegido para liderar el equipo era el noruego, máximo goleador de la plantilla.

Para entender esta decisión hay que remontarse, en primer lugar, a cómo se eligen los capitanes en el Manchester City. Al contrario de lo que sucede en otros clubes, la capitanía de los citizens no se basa en la antigüedad. Da igual cuántos años lleves en el club si has conseguido ganarte al vestuario. Dicho de otra manera: se vota.

A comienzos de curso, la primera plantilla del City organiza una votación en la que participa todo el primer equipo (incluido el cuerpo técnico) donde se elige al grupo de cinco futbolistas que ejercerán de capitanes durante la temporada... y en ese selecto grupo no estaba Erling Haaland. Entonces... ¿Por qué acabó siendo capitán en un partido de la Premier League contra el Newcastle?

Los cinco más votados por el vestuario del Manchester City fueron Kyle Walker, Kevin De Bruyne, Ruben Días, Rodri y Bernardo Silva, que son todos los que se han ido alternando el brazalete de capitán durante esta temporada en función de quién era titular o quién estaba disponible en cada partido. Sin embargo, la salida de Walker en el mercado invernal rumbo al Milan dejó un hueco vacante en el grupo de líderes.

Y ahí es donde Guardiola tomó parte en el asunto. El técnico catalán decidió que el quinto capitán tenía que ser Haaland, que recientemente ha firmado un contrato de nueve años y medio con el Manchester City (hasta 2034) y que, de esta forma, pasa a ser una de las voces más autorizadas del vestuario, como se vio en la charla que dio a sus compañeros antes de enfrentarse al Newcastle.

Lo que parecía una anécdota de un partido tiene un trasfondo de responsabilidad. Haaland confía en el Manchester City, como quedó demostrado con su renovación, y el club apuesta por Haaland, y esto es otra demostración más. El noruego no llevará el brazalete contra el Real Madrid, al menos salvo imprevisto de última hora (De Bruyne lo fue en la ida del Etihad, donde también fueron titulares tanto Ruben Días como Bernardo Silva), pero el fin de semana dio un paso más para ser un líder a todos los efectos en una plantilla donde se confía plenamente en él.