Mikel Merino, el niño que idolatraba a Steven Gerrard y que ahora se disfraza de delantero: "Estaba viendo una peli en el sofá y le tiraba balones para que los rematara"
El centrocampista del Arsenal, reconvertido a '9' por las bajas en ataque, será uno de los peligros del conjunto inglés este martes ante el Real Madrid.

La mañana del 15 de febrero Mikel Arteta tuvo una conversación con Mikel Merino. Frente a las ausencias de Gabriel Jesús, Kai Havertz y Bukayo Saka, el técnico deslizó al centrocampista la posibilidad de que ante el Leicester saliera a jugar como delantero. "No me quisieron dar mucha información porque saben que soy alguien que le gusta tenerlo todo atado al milímetro, tener toda la información posible y que iba a pensar más de la cuenta. Me preguntaron que cómo lo veía yo. Les dije que soy un jugador de equipo y que estoy para ayudar. Si consideraban oportuno ponerme de delantero, aunque nunca haya jugado ahí, que lo intentaría hacer de la mejor manera posible", confesaba el propio Merino hace unas semanas en Radioestadio Noche. El navarro no lo hizo mal ni en ese ni en los siguientes choques que Arteta optó por alinearle en la punta de ataque. Este martes, con la visita del Real Madrid al Emirates Stadium para disputar la ida de los cuartos de final de la Champions (21:00 horas), el ex de la Real Sociedad volverá a ser el hombre más adelantado de los gunners.
"Pensé que iba a costarle un poco más adaptarse a esa nueva posición, pero es verdad que no me ha sorprendido tanto. Mikel es un jugador que remata muy bien y que sabe estar en el sitio adecuado cuando el balón llega al área. Arteta ha sido muy inteligente y ha colocado al jugador más apropiado teniendo en cuenta que Mikel no es delantero", señala a Relevo Miguel Merino, padre del futbolista del Arsenal.
Inédito en esa posición hasta su llegada a Londres, al mediocentro, que también llegó a jugar de central durante su etapa en el Borussia Dortmund, no le ha costado acomodarse a su nuevo rol. En los ocho encuentros que lleva disputados en la punta de ataque, el '23' suma ya cinco goles. "Allí están más sorprendidos que nosotros aquí. Mikel es muy fuerte, muy inteligente, y cuando sabes cuándo moverte, que creo que es innato, puedes marcar goles. Meri ve mucho fútbol y se concentra en todo", afirmaba su excompañero, Álex Remiro, en The Guardian.
Muy crítico consigo mismo y alguien que siempre tiene que tenerlo todo bajo control, Merino nunca soñó con ser ese perfil de jugador que disfruta celebrando goles. "Su ídolo de pequeño era Steven Gerrard. A él le encantaban y le siguen encantando esos jugadores box to box. Un futbolista que sube, baja, defiende, que está en el área...", dice un Miguel que trata de rebajar un poco la euforia que rodea al nuevo killer del Arsenal. "En todos los partidos no va a meter goles. No va a ser un Messi o un Cristiano Ronaldo de la vida, pero dentro de sus posibilidades lo va a hacer lo mejor que pueda".
Su remate de cabeza es una de sus grandes señas. Su cabezazo, que valió para que España eliminara a Alemania en cuartos de final de la Eurocopa, aún resuena en la mente de los aficionados. Como su icónica celebración dando vueltas sobre el banderín de córner emulando a la que, años antes, hizo también su padre luciendo los colores de Osasuna. El testarazo le viene de serie y no cambia, juegue de centrocampista o de delantero.
"El remate de cabeza Mikel siempre lo ha trabajado mucho. Desde pequeño me acuerdo que siempre me pedía que le tirara balones para que los rematara. Mientras estaba sentado viendo una serie o una película en el sofá, ahí estaba yo tirándole balones para que los rematara. Era muy coordinado y nunca le tuvo miedo al balón".
«Me costó mucho al principio, pero ahora estoy muy feliz»
Su actuación ante el Leicester lo cambió todo. Desde aquel 15 de febrero, en el que disputó 21 minutos como '9', el ex de la Real ha participado en todos los compromisos de su equipo (8). Titular en todos ellos y llegando a completar los 90' en cinco duelos, Merino ya está definitivamente adaptado. "Estoy contento, me encuentro más asentado en el equipo, la plantilla, la ciudad. Es un cambio muy importante después de seis o siete años con la misma gente alrededor. Ahora estoy en un entorno distinto. Me costó mucho al principio, pero me estoy encontrando bien y estoy muy feliz", reconoció el jugador.
A sus 28 años, este martes disputará sus primeros cuartos de final de la Champions. Enfrente estará el Real Madrid, con 15 'orejonas' en su palmarés y al que conoce bien de sus últimas temporadas en la Real. Sabe lo que es enfrentarse a los de Ancelotti, pero desconoce lo que es hacerlo como delantero. Si Arteta decide colocarle de nuevo ahí, - en el último partido ante el Everton volvió a su posición habitual de centrocampista-, a Mikel le tocará bailar con Rüdiger y Asencio. Motivación no le falta. "Está con la flechita para arriba y se dejará la piel le ponga donde le ponga", matiza un Miguel Merino que no se sorprenderá lo más mínimo la próxima vez que su hijo le llame para decirle que va a jugar de ariete.